El Ayuntamiento de Alicante ha decidido adelantarse a la nueva legislación, que está preparando la Dirección General de Tráfico (DGT), y elaborar ya una ordenanza municipal propia para regular el uso de vehículos de movilidad personal (más conocidos como los patinetes eléctricos).
Dicha ordenanza intentó ser en un primer momento una de las más restrictivas de España, prohibiendo el uso de estos vehículos en prácticamente toda la ciudad. Tanto la oposición política como algunos usuarios mostraron su malestar al respecto, lo cual hizo rectificar al equipo de gobierno. Aún así, el proyecto final sigue sin convencer a todos.
Los patinetes eléctricos no podrán circular tampoco por las calles peatonales ni por las aceras-bici
Primera prohibición casi total
“La acera es para el peatón” declaró José Ramón González, concejal de Movilidad, cuando presentó públicamente el primer borrador de esta nueva ordenanza el pasado 15 de octubre. Esta frase significaba que los patinetes eléctricos quedaban prohibidos ya no solo en todas las aceras de la ciudad (incluyendo las avenidas peatonales como La Explanada), sino también incluso en los parques y en las aceras-bici (como la de la avenida Lorenzo Carbonell).
Además los patinetes tampoco podrían circular por las calzadas junto a los demás vehículos, a excepción de aquellas calles donde hubiera una ciclovía específica o los coches tuvieran limitación de velocidad a 30 km/h. Todas estas normas se acercaban mucho a una prohibición de facto del uso de patinetes eléctricos en Alicante, pues apenas unas pocas calles (inconexas entre sí) cumplen actualmente estas condiciones en la ciudad.
Fuera de las avenidas anchas
A partir de este momento se dieron una serie de protestas, tanto por parte de algunos partidos de la oposición como de alicantinos propietarios de estos patinetes eléctricos, cuyo precio suele oscilar entre los 250 y los 500 euros. El equipo de gobierno municipal se abrió a negociar, e introdujo varios cambios significativos en la ordenanza.
Finalmente los patinetes sí podrán circular por la calzada de aquellas calles de la ciudad que tengan un solo carril de tráfico. Según aseguran desde la Concejalía de Movilidad, éste es el caso del 80 % de las vías de Alicante.
Queda prohibido, por tanto, el uso del patinete en aquellas calles más anchas que son de doble sentido (como la Avenida de la Estación), o de dos carriles de tráfico en el mismo sentido (como Condes de Soto Ameno). Las únicas excepciones son aquellas que tengan una ciclovía específica por la calzada, algo que no ocurre en casi ninguna.
Los patinetes continúan vetados en todos los carriles-bici que hay sobre las aceras, y solo pueden circular en aquellos parques que son atravesados por ciclovías para las bicicletas.
«Esta ordenanza está pensada para una ciudad bien provista de carriles-bici, pero no es el caso de Alicante» R. Mas (Compromís)
Debate en el pleno
El proyecto final de la ordenanza fue aprobada en el pasado pleno municipal del 31 de octubre con los votos a favor de PP, Ciudadanos, PSOE, Unidas Podemos y Vox. Las dos únicas abstenciones vinieron por parte de Compromís.
“Esta normativa está pensada para una ciudad que no existe. Alicante no está tan conectada con carriles-bici como Valencia o Elche. En la práctica estamos creando islas. Los usuarios tendrán que bajarse del patinete y andar durante más de un kilómetro si quieren, por ejemplo, ir a trabajar a la EUIPO” criticó Rafael Mas, edil de Compromís.
Dicho grupo municipal trató de introducir dos enmiendas a la ordenanza con el fin de que se permitiera el uso del patinete también en las aceras-bici, así como que se hicieran excepciones en algunas calles o tramos para que no quedaran inconexos. Sin embargo todas ellas fueron rechazadas.
Desde Unidas Podemos y el PSOE, a pesar de que votaron a favor de la nueva ordenanza, también pidieron al equipo de gobierno que extienda la red de carriles-bici en la ciudad para hacer más factible la movilidad sin necesidad de usar un vehículo.
El portavoz de Vox, por su parte, recordó que “también hay que proteger los derechos de los coches” e incluso llego a cuestionar la existencia del cambio climático.
Los conductores deberán llevar casco y ponerse un chaleco o tiras reflectantes
Más normas de seguridad
Por otra parte la nueva ordenanza también incrementa las medidas de seguridad para los conductores de patinetes eléctricos. El uso del casco pasa a ser obligatorio. Así mismo, todos los usuarios deberán llevar puesto un chaleco o tiras reflectantes mientras conduzcan. El vehículo tiene que estar aprovisionado de su propia luz y un timbre. El límite de velocidad queda fijado en 30 km/h.
De igual forma, los conductores tendrán que pagarse un seguro de responsabilidad civil, mientras que los menores de 16 años necesitarán además un permiso de conducción de ciclomotor AM. Queda terminantemente prohibido que más de una persona viajen sobre el patinete al mismo tiempo, ni siquiera en el caso de los niños.
Las sanciones por incumplir alguna de estas nuevas normas oscilan entre los 100 y los 500 euros.
Entrada en vigor
La ordenanza todavía no ha entrado en vigor. Durante el pasado mes de noviembre se ha abierto un plazo para que cualquier particular o asociación pueda presentar las alegaciones que estime oportuno. Se espera que su aprobación definitiva tenga lugar en enero o febrero de 2020.
Así mismo, desde el momento en que la nueva ordenanza sea publicada en el Boletín Oficial de la Provincia (BOP), los agentes de Policía Local tendrán prohibido poner multas a los infractores hasta pasado un plazo de 60 días.
El concejal González también ha asegurado que hay varias empresas interesadas en implantar un servicio público de alquiler de patinetes eléctricos en Alicante, con las que el Ayuntamiento está ya negociando.
Igualmente el Consistorio planea ofrecer cursos de conducción voluntarios destinados a los conductores de patinetes eléctricos.