Entrevista > Mari Carmen de España / Concejala de Empleo (Alicante, 28-agosto-1980)
Ha sido un año atípico y duro, pero desde la Agencia Local de Desarrollo (ALD) han puesto todo lo que estaba en sus manos para informar y ayudar, siguiendo trabajando al máximo nivel a pesar de las dificultades.
¿Qué actividades ha hecho la ALD en este 2020 tan particular? ¿Cómo ha sido trabajar con esta pandemia?
Ha sido un año muy complicado. Empezamos muy ilusionados y con muchos proyectos que queríamos desarrollar; Alicante estaba comenzando a tener una gran capacidad de atraer gente del exterior para trabajar e instalar sus empresas aquí y en marzo nos llevamos un mazazo, no solo en la Agencia sino a todos los niveles.
Tuvimos entonces que reconvertir todas esas acciones que teníamos pensadas; y no solo en mejoras de espacios para que se instalasen las empresas, ya que la Agencia trabaja varias patas como son el emprendimiento, la formación y la atracción de inversiones.
«De cara a la ejecución presupuestaria de este año estamos cumpliendo casi en su totalidad»
Uno de esas patas, la formación, quedaría paralizada…
Es cierto que toda la parte de formación cambió por completo porque hubo una paralización total. Esto supuso un cambio radical de transformación a lo digital en tres meses, lo cual es muy complicado pues no todo el mundo está preparado ni tiene las herramientas necesarias. Y también porque teníamos que cambiar todas las líneas de trabajo que estaban en marcha o en proceso, con sus convenios y convocatorias cerrados.
Tengo que agradecer muchísimo a los trabajadores de la Agencia por todo lo que hicieron. Se pusieron a disposición desde el minuto uno que nos confinaron. Todos nos fuimos a casa y formamos grupos por departamentos que diariamente nos conectábamos y seguíamos funcionando por teletrabajo. Reorientamos todos los cursos de formación para transformar aquellos que pudimos a online. La tramitación no se paralizó y todas siguieron adelante.
Así cuando por fin pudimos incorporarnos al trabajo físicamente y hacer vida en la ciudad, teníamos ya mucho avanzado. Eso ha hecho que de cara a la ejecución presupuestaria de este año estemos cumpliendo casi en su totalidad.
«Los cursos están teniendo mucho éxito tanto en asistencia como en contratación»
¿Qué es lo que más reclaman las personas?
Es muy variado y también depende de la franja de edad que estemos hablando. Normalmente los tramos más afectados son los menores de 30 y también de 45 hacia arriba, y en esta pandemia todavía se ha incrementado muchísimo más.
Ya a principios del año había mucha demanda en cursos de jardinería, albañilería o limpieza. El porcentaje de éxito de contratación después de realizar estos cursos es bastante alto. Son cursos muy completos; por ejemplo, la limpieza la damos en todos los niveles como pueden ser establecimientos, hoteles, etc. Os puedo asegurar que son cursos muy profesionales y se aprenden todas las gamas de productos y utensilios.
Esto lo hacemos de la mano de LABORA que es quien nos da estas ayudas en colaboración con el Ayuntamiento para elaborar estos programas. Nosotros ponemos el profesorado y las instalaciones. Están teniendo mucho éxito tanto en asistencia como en contratación.
Además de estos tres sectores, ¿tenéis pensado nuevos cursos enfocados a otros ámbitos?
Ahora en materia de formación estamos diversificando bastante. Además de los cursos de la Agencia sumados a los de LABORA, el trabajo se está haciendo con colaboración público-privada.
Desde la Agencia nos coordinamos con todas las áreas industriales de la ciudad e intentamos que nuestras empresas tengan ese feedback con la institución pública para casar la oferta y demanda de empleo. Incluso poder trabajar la formación para que si, por ejemplo, una empresa necesita instalación de cableado de fibra óptica, que se hagan cursos específicos para que la incorporación sea inmediata.
«La ALD es una institución abierta a toda la ciudadanía»
En la orientación para el empleo, ¿cómo ayudáis a las personas que vienen aquí a preguntar?
Tenemos un servicio específico de orientación para el empleo llevado por una serie de técnicos que les reciben desde que abren la puerta y les hacen un escáner de su perfil y lo que les falta para llegar a la situación laboral que desean. Si por ejemplo alguien quiere ser camarero, trabajamos para que de los pasos en dirección a dicho objetivo.
También analizamos si dicho objetivo es factible, porque a veces llegan con una ilusión de poder incorporarse a un trabajo concreto que tiene una oferta laboral escasa o nula. Así que intentamos, dentro de las capacidades de cada persona, orientarles y dirigirles hacia el objetivo final de trabajar.
Todo ese trámite y proceso lo hacemos desde la Agencia y es algo bastante desconocido. Yo misma noto que cuando le digo a la gente que llevo la Agencia me preguntan “¿pero y eso qué es?”. Me toca explicar toda la labor que hacemos, y que además es una institución abierta a toda la ciudadanía. Por eso muchos cuando llegan aquí se sorprenden de cómo les facilita la vida y más en una situación tan complicada de estas características en la que no tienen empleo. También viene gente que tiene trabajo pero que quiere mejorar su situación.
¿Cómo está evolucionando el empleo en Alicante?
En estos momentos los datos no son positivos. Existe mucha incertidumbre aún, esperemos que esas noticias sobre las vacunas ilusionen a la gente y les anime a pensar que existe una puerta abierta no muy lejana para recuperar sus trabajos.
Desde la Administración local nosotros estamos trabajando con la ayuda directa, básicamente para que sigan abiertos los negocios. Este verano dimos una ayuda de cinco millones y ahora hemos sacado otra de un millón de euros para el comercio y la hostelería que se está terminando de baremar para poder pagarla antes del 31 de diciembre.
El golpe de esta pandemia está afectando mucho a los sectores productivos de esta ciudad, y esto nos preocupa. Muchos negocios han cerrado, y otros que tenían un cierto colchón de ahorros se les está acabando. Nosotros tenemos esta responsabilidad de ayudarles a mantenerse, y por eso durante 2021 están previstas más ayudas. Porque mientras que la gente no pueda salir a comprar o hacer actividades con normalidad, está claro que la generación de ingresos no va a ser igual.
«Con los paquetes de ayudas tratamos de evitar el cierre de los establecimientos»
Estos seis millones de euros que comentas… ¿qué tipo de ayudas son?
Son ayudas directas. El primer paquete de cinco millones fue a todos los sectores de autónomos y pymes de uno a diez trabajadores, ya que eran los más afectados y apenas tenían margen de maniobra para soportar un primer golpe de cierre total. Las grandes empresas sí podían mantenerse trabajando desde casa, así que fuimos a los que más lo necesitaban.
Aquí entraron todos, incluso el sector cultural y los artistas porque al paralizarse todo pasaron a ingresar cero. A pesar de que ahora llevamos varios meses en los que podemos volver a hacer un poquito de vida social, para ellos sigue siendo insuficiente.
¿Y el segundo paquete?
Éste se ha dirigido más al comercio y hostelería, porque estaban ya empezando a cerrar persianas y esto es lo último que debe pasar.
Nosotros no tenemos competencias en todas las materias, pero en comercio sí. Esto nos facilita poder articular y ejecutar ayudas más fácilmente que en otros sectores. Hemos sido rápidos para poder ejecutar el presupuesto de 2020, y creo que lo hemos hecho con bastante acierto y agilidad para que ninguno de los solicitantes se quedara sin ayudas.
El proceso se cerró a mediados de noviembre y son más de 700 comercios y establecimientos hosteleros los que han pedido ayuda. Una cifra bastante importante, y esto les servirá para pasar lo que queda de año y principios del que viene. La Diputación también nos dio una línea de ayudas de medio millón de euros para el pago de alquileres. Intentamos ir sumando pequeñas cosas para que todo el mundo pueda acceder y mantenerse.
Otra línea abierta es la EDUSI, enfocada a ayudar en los barrios más desfavorecidos. ¿Cómo funciona y qué se ha hecho con ella?
La EDUSI es un proyecto estratégico de la ciudad que viene con fondos europeos y está sirviendo para transformar una de las zonas de Alicante que ha sido golpeada no solo por causa de la pandemia sino también por otras cuestiones, por lo que se ha ido apagando.
Hablamos del entorno de las Cigarreras, barrio de San Antón, Carolinas Bajas, Campoamor, etc. Una zona que aún siendo céntrica está teniendo problemas de ocupación ilegal y se están cerrando comercios porque la falta de seguridad lleva a que casi nadie quiera instalarse aquí.
Era importante dar ese golpe de efecto y trabajar dentro de este entorno. La EDUSI es muy transversal, pero en la parte que le toca a la Agencia estamos trabajando en cercanía con los vecinos, a través de una ubicación propia en Cigarreras.
¿Cómo se pueden reactivar esas zonas?
Nosotros también trabajamos con las personas que quieren montar su propio negocio. En las Cigarreras lo hacemos; basándonos en el estudio del entorno definimos dónde estaría mejor que se ubicasen, en qué condiciones y que trámites necesitan. Estamos con ellos desde el primer folio que llega con el proyecto plasmado hasta que realmente se abre el local y la empresa es real.
Todo ello se hace en un entorno que va a servir para reactivar y dinamizar la economía de estas zonas, que además son barrios muy bonitos de la ciudad. San Antón es un barrio precioso y Carolinas tiene una gran tradición comercial. Con el Auditorio Provincial de Campoamor, las Cigarreras y el Teatro Principal tenemos un triángulo cultural muy chulo. Junto con el Mercado Central hacen que se genere un modo de vida y una actividad distinta y que abre muchas oportunidades a los vecinos de esa zona.
Cambiando de tema, ¿la Oficina de Atracción de Inversiones dónde actúa y que resultados concretos espera obtener?
Esta oficina actúa en toda la ciudad. Desde la Agencia no solo orientamos sobre las ubicaciones óptimas para establecerse cada empresa, sino que también llevamos las áreas industriales. En Alicante, contando el Puerto y el Parque científico de la UA con quienes trabajamos estrechamente, sumamos once áreas industriales. Ahora estamos sumidos en la modernización, en el poder convertir algunas de ellas en áreas industriales avanzadas e incluso en poder ampliar el suelo industrial de la ciudad.
Esto quiere decir que todos los inversores que han tocado la puerta de la Oficina ya saben que en un plazo, ya sea un año o dos, se podrán instalar en Alicante en cuanto se termine con la modificación para ampliar el suelo. Y a lo mejor incluso puede venir ya con una delegación de avanzadilla.
Nosotros casamos esta oficina con Alicante Futura, una estrategia municipal de la Agencia. En resumidas palabras, consiste en generar entornos en la ciudad que favorezcan la instalación de empresas con base tecnológica.
De la mano de la Concejalía de Urbanismo hemos aprobado también la denominación de proyectos prioritarios para agilizar los trámites de una inversión en Alicante que suponga una cantidad, a partir de un millón de euros y unos puestos de trabajo, para que se instale lo antes posible. Esto ya está funcionando y de hecho este año llevamos unos 13 o 14 proyectos prioritarios aprobados aún a pesar de la pandemia. Esto supondrá unos 60 millones de euros de inversión y casi 400 puestos de trabajo en cuanto tengan las licencias y se hagan efectivos. Algunos ya están levantando nave.
Respecto a la covid estáis preparando un informe. ¿De qué se trata y que conclusiones queréis obtener con ello?
Yo creo que es importante, después de todo lo que hemos pasado, conocer al detalle cuáles han sido los sectores, zonas, franjas de edad y sexos más afectados. De hecho, ya tenemos bastante marcadas las líneas de trabajo de 2021 gracias en parte a una previa de este informe covid sobre lo ocurrido en la ciudad de Alicante.
Cuando conocemos dónde está el problema es cuando actuamos con mayor efectividad. Podemos creer que el sector servicios es el más afectado, o no. Pero este estudio, testado por tantas entidades que han ido barrio por barrio, es el que mejor va a definir nuestras líneas de trabajo, que van a funcionar porque no vamos a errar. Iremos a lo que verdaderamente ha sido afectado y necesita un refuerzo desde la Administración pública.
¿Algo que quieras añadir?
Pues invitar a todo el mundo a que venga a la Agencia ya sea para informarse sobre cualquier cuestión de empleo o para sacar adelante un proyecto. En Alicante hay mucho espíritu de emprendimiento, y aquí tenemos unas herramientas que les ayudarán a sacar sus sueños adelante.
Datos
Orientación para el empleo. Entrevistas de orientación inicial: 845. Actualización de datos: 259.
Formación para el empleo. Número de cursos: 36. Número de alumnos: 400.
Impulsa EDUSI. Acciones de orientación: 314 personas. Encuentran empleo: 70 personas. Cursos: 28. Personas formadas: 340. Asesoramiento para la creación de empresas: 121. Empresas creadas: 37 (22 en el sector de las industrias culturales y creativas).
Empleo directo (en colaboración con Labora). EMCORP: 47 puestos. EMPUJU-EMCUJU: 30 puestos (pendientes de contratar). ECOVID-19: 72 puestos de trabajo (58 conserjes, 12 técnicos auxiliares y 2 trabajadores sociales).
Atención a emprendedores. Asesoramiento a personas emprendedoras: 546. Altas autónomos a 31/10/2020: 31. Altas S.L. a 31/10/2020: 65.
Formación en el Centro de Emprendedores. Cursos: 33. Asistentes: 746.
Viveros de empresa. Alicante Emprende: 11 de 14 despachos ocupados. Príncipe Felipe: 12 naves de 250 y 500 m², ocupadas en su totalidad.
Escuela de Talento Femenino (EDUSI). Talleres y cursos en habilidades profesionales y personales enfocados a fomentar el emprendimiento en mujeres. Total cursos: 27. Total asistentes: 313.