Entrevista > Antonio Baile / Antropólogo (Orihuela, 18-mayo-1954)
Concejal en la Transición, enfermero durante la mayor parte de su vida laboral, regente de varios restaurantes, antropólogo de carrera y gran investigador del pasado de Santa Pola. Todo esto es Antonio Baile Martínez, una auténtica enciclopedia local andante.
Si bien nació en Orihuela (la ciudad de su madre), Antonio Baile Martínez es santapolero de toda la vida. Ha dedicado a su pueblo más horas de investigación de las que puede recordar. Todo ello ha fructificado en libros y publicaciones sobre memorias anuales, los piratas de Tabarca, las fiestas populares, personajes históricos influyentes, etc.
¿Por qué te apasiona tanto la historia de Santa Pola?
A mí lo que de verdad me apasiona es la antropología, el por qué pasan las cosas. Por ejemplo cuando hablo de las fiestas, yo explico qué significa el pregón, las razones de sentarse de esa determinada manera, qué significa el acto, etc. Esto es lo que me interesa conocer. Mis libros no son solo de historia, sino que van mucho más allá.
Cuéntanos alguna curiosidad antropológica de Santa Pola que la gente desconozca.
Pues mira, ya que he sido cocinero, siempre me ha gustado saber de dónde vienen las recetas. Tengo mis propias hipótesis sobre el origen de algunos guisos, como el caldero. Estuve hace algunos años en Grecia y probé un plato llamado sopa focense que era muy similar. Entonces creo que cuando los griegos se lanzaron a conquistar el Mediterráneo, en el sur de Francia los marselleses le añadieron anisete e hinojo convirtiéndola en una bullabesa. Y nosotros le añadimos el ajo y la ñora, naciendo así un caldero.
«El Ayuntamiento tradujo la calle Bailén como carrer Ballen pensando que venía del verbo bailar»
¿A qué personaje histórico local le pondrías una calle en Santa Pola que aún no la tenga?
En Santa Pola se han hecho muchos desacatos con el callejero. Necesitamos un reglamento serio de distinciones y honores, porque el del Ayuntamiento no sirve para nada. Aquí ocurre que el concejal de turno se levanta por la mañana y decide ponerle una calle a Pepito Pérez. A veces ni saben quién es esa persona, e incluso se la quitan a otra sin saber por qué. Y esto lo han hecho todos; los de izquierdas, los de derechas y los franquistas.
Por ponerte algún ejemplo. Tiempo atrás se puso a una calle el nombre de Bailén por la Batalla de Bailén, sin embargo los políticos se creyeron que iba por el verbo bailar y la tradujeron al valenciano como carrer ballen. Y en la calle Oropel, dedicada a la tradición del Misteri de Elche, ellos la tradujeron al castellano como calle Oro y piel. ¿A qué hay que ser tontos para hacer estas cosas? Pues todavía nadie las ha cambiado.
«Me gustaría que repusieran la calle al Duque de Béjar, quien salvó la aduana de Santa Pola»
Respondiendo a tu pregunta, Santa Pola tiene aduana desde el siglo XIX. Tardó mucho porque a los alicantinos les molestaba pues les quitaba comercio. Fue el Duque de Béjar quien nos ayudó a mantener el puerto a pesar de que había un decreto para que desapareciera. Sin embargo los franquistas le quitaron dicha calle para dedicársela al general Mola, y nunca se ha repuesto. También hay dos alcaldes muy importantes que no están representados: Julián Moradela y José Ramón Baile. El primero protegió el Castillo y el segundo evitó que la glorieta pasara a manos privadas.
Recientemente has dado una conferencia sobre Felisa Lázaro. ¿Quién fue esta mujer?
Fue a iniciativa de la revista La Rella. Yo no sabía mucho sobre esta mujer, solo que era una vallisoletana triple de zarzuela que venía a veranear a Santa Pola. He descubierto unas facetas suyas que no me podía imaginar. A finales del siglo XIX fue una cantante famosísima, una de las primeras españolas que registró su voz en disco y participó en la primera zarzuela que se grabó en película. También fue de las pioneras en salir fuera de España, llegando a hacer giras por Francia.
Era además una mujer muy altruista; realizó conciertos en beneficio del hospital de Torrevieja, del Asilo de Aspe, de la Iglesia de Santa María de Elche, o de familias que habían sufrido víctimas en la Guerra de Marruecos o en naufragios de barcos. Su gran padrino artístico fue el poeta José Zorrilla.
«Tengo escrito otro libro de hitos importantes anuales de Santa Pola que abarca todo el siglo XIX»
¿Qué libro estás preparando ahora?
En el verano del año pasado me planteé volver a investigar todas las noticias relacionadas con Santa Pola año por año, como ya hice en mi libro ‘Santa Pola 1900-49’. Acudiendo a nuestro archivo municipal, al de Elche y a las hemerotecas digitales me encontré con que en octubre ya tenía escrito otro libro, esta vez sobre el siglo XIX. Cada año tiene dedicada una página concreta desde 1800 a 1899.
Estuve hablando con varias empresas para ver si me financiaban la edición y tuve muchas respuestas positivas. Llegué a recaudar 8.000 euros. La idea era imprimirlo en abril, pero la pandemia de la covid me lo paralizó todo. Ahora ya no sé muy bien cuando va a salir, porque tengo que volver a preguntar a las empresas ya que algunas pueden haber cerrado o tener menos ganas de patrocinar libros.
También desde hace algunos meses estoy preparando un libro sobre la histórica familia santapolera Múrtula y la polémica que hubo en el siglo XIX respecto a la propiedad de la glorieta. Ya estoy a punto de terminarlo.