La historia de Accem es la de los movimientos migratorios ocurridos en Europa y España durante las últimas décadas. Los orígenes de la organización se sitúan en 1951, cuando se crea el Departamento de Migración de la Conferencia Episcopal Española. La entidad ayudaba a los miles de españoles que por entonces emigraron a países como Francia, Alemania, Suiza, Argentina o México en búsqueda de una mejor vida.
Curiosamente con el paso de las décadas las tornas cambiaron y España se acabó convirtiendo en un país receptor de inmigrantes. En 1990 Accem se constituyó como una ONG aconfesional, dedicada a amparar personas en vulnerabilidad y especialmente a refugiados solicitantes de asilo en nuestro país.
Acogida de refugiados
La delegación alicantina de Accem comenzó a funcionar en 2018 y actualmente cuenta con catorce profesionales. “Somos un equipo multidisciplinar. Trabajan abogados, psicólogos, trabajadores sociales, traductores, profesores de español, etc.” nos indica María Fuentes, prospectora laboral.
Esta trabajadora social lleva concretamente el Programa de Integración Socio-Laboral para Personas Refugiadas AccemARIADNA en Alicante; el cual está financiado por el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones.
“Las personas que acceden a este programa son refugiados con los que se trabaja desde el sistema de acogida de Protección Internacional, es decir que han huido de sus países de origen por razones de causa mayor. Puede ser por una guerra, persecución política, una catástrofe natural, etc.” nos explica.
En estos momentos Accem Alicante cuenta con 36 plazas de acogida. La procedencia de estas personas va variando según el contexto socio-político mundial. “En los últimos años estamos interviniendo con muchos venezolanos, colombianos o sirios. Ahora sobre todo con africanos de países como Senegal o Gambia que llegan hasta Canarias. También últimamente están accediendo familias afganas, y prevemos que trabajaremos también cada vez más con cubanos” nos comentan.
«Los refugiados vienen a España con unas ganas y compromiso enormes por trabajar» M. Fuentes (Accem)
Programa AccemARIADNA
El objetivo final es que los refugiados puedan encontrar un empleo digno en España y así tener una segunda oportunidad. Para ello una técnica de empleo les realiza una entrevista en profundidad con el fin de conocer sus experiencias, formación y expectativas laborales. Acto seguido, se diseña un itinerario personalizado de inserción socio-laboral buscando la autonomía de la persona y su aproximación al mundo laboral.
A continuación se les ofrecen diversos talleres de formación tales como aprender a diseñar un currículum, buscar empleo en internet, mejorar sus habilidades sociales, conocer la legislación laboral española, etc.
“Mis funciones se centran en la última fase del itinerario de búsqueda activa de empleo y la prospección laboral. Es decir, me pongo en contacto con las empresas para conocer qué tipos de trabajadores buscan e intentamos atender a su demanda valorando el perfil laboral de las personas de la bolsa de trabajo que gestionamos en Accem”, nos indica María.
Emplear a refugiados conlleva ventajas fiscales para las empresas, entre otros beneficios
Ventajas para las empresas
Por ello, desde Accem están buscando empresas de la provincia que colaboren con la organización. “Emplear a personas refugiadas tiene muchas ventajas. Para empezar, existen diferentes bonificaciones fiscales por ello. Además, hoy en día cada vez se apuesta más por la responsabilidad social corporativa, y así la empresa gana una imagen de mayor diversidad y enriquecimiento cultural” nos aduce la prospectora laboral.
Igualmente cualquier sociedad privada que contrate a refugiados cuenta con el apoyo del equipo de Accem, a coste cero, en cuestiones como orientación legislativa en materia de extranjería, gestión de los procesos selectivos o seguimiento de la inserción.
“Procuramos facilitar la selección de personal a las empresas y acompañarles en todo el proceso. Por ejemplo, si una constructora nos pide que la persona candidata realice antes un curso específico de formación en albañilería… valoramos destinar ayudas económicas al pago de formaciones que aumenten su empleabilidad” nos afirman.
Una persona que lleve 2 años acogida en España puede solicitar el arraigo laboral con 6 meses trabajados
Perfiles laborales
Los perfiles laborales que se pueden encontrar en esta bolsa de trabajo son muy diversos. “Son personas con mucha experiencia laboral en múltiples campos. Electricistas, trabajadores de limpieza, pescadores, fontaneros, mozos de almacén, agricultores, peluqueros, especialistas en atención domiciliaria, etc. Además, son trabajadores que tienen una capacidad de adaptación que cuesta imaginar hasta que los conoces” nos indica María.
Incluso un empleo de carácter temporal puede resultar muy beneficioso para los refugiados, pues con seis meses de cotización una persona que lleve dos años acogida en España ya puede solicitar el arraigo laboral.
Sensibilizar al empresariado
Actualmente ya son varias las compañías alicantinas que participan en el programa AccemARIADNA, y desde la ONG quieren sensibilizar al resto del sector empresarial alicantino para que se sumen a esta causa.
“Yo puedo asegurar que son personas que vienen a España con unas ganas enormes de trabajar. Siempre muestran un gran compromiso, porque están deseando empezar una nueva vida y saben que encontrar un trabajo es la clave para ello” nos afirma María Fuentes.
Por eso en Accem solicitan colaboración e implicación al empresariado. “Animo a que contacten con nosotros y nos visiten. Por supuesto estaremos encantados de explicarles todos los recursos y ventajas que tiene contratar a un solicitante de asilo” nos expresan.
Hace pocas décadas éramos los españoles quienes buscábamos segundas oportunidades en el extranjero. Ahora las tornas han cambiado, y quién sabe lo que ocurrirá mañana.