Entrevista > Luis Faguás / Deportista (València, 5-marzo-1979)
Luis Faguás es un amante del mar. De los 12 meses del año y aunque las condiciones climatológicas no sean de postal para turistas. Responsable de la Escuela Municipal de Vela de València y director de la Red de Escuelas de Vela Homologadas de la Comunitat Valenciana, analiza para AQUÍ la situación de la náutica en nuestra ciudad.
¿Hace cuánto que se encuentra al frente de la Escuela Municipal de Vela?
Desde septiembre de 2010 y como director desde la jubilación de Begoña Alday en mayo 2020, antes estuve dos años como director adjunto.
¿Qué tipo de actividades abiertas al público proponen?
Tenemos clases para niños a partir de seis años y para adultos, desde clases por sesiones a campus de verano.
«Tenemos una dársena perfecta para ser el mejor polideportivo del Mediterráneo y está por explotar»
¿Cuáles son las que tiene mejor acogida?
Los campus de verano se llenan muy rápido, algunos incluso el 1 de marzo, que es el día que empezamos con las inscripciones. En temporada de buen tiempo, los ‘navega’ que son dos horas miércoles, viernes y fines de semana funcionan también genial.
València tiene uno de los mejores campos de navegación del mundo, y una vez lo descubres es difícil dejar de venir.
¿Qué actividad están preparando que nos pueda anticipar?
Tenemos cursos con Formación Profesional de Grado Medio, donde las actividades náuticas van a ser asignaturas curriculares, y conseguiremos uno de nuestros objetivos que es tener muchos técnicos trabajando todo el año.
¿Cuántas personas conforman la Escuela?
En temporada alta casi veinte monitores. En invierno, unos diez. Quiero destacar la labor de Luis y Kike que están a mi lado desde hace muchos años, así como Borja, Juanki, Guille, Josep, Meri… y todos los técnicos que han pasado por la Escola en estos diez años.
¿Y alumnos?
Hay muchísimos alumnos que repiten y repiten, con lo que es complicado saber cuántos usuarios únicos tenemos, pero estamos hablando de más de 10.000 usos por año.
«Iniciativas como ‘La Mar de Dones’ para acercar la vela a las mujeres fue todo un éxito»
¿Con cuántos colegios?
Este año esperamos que pasen más de 6.000 alumnos de centros escolares. Con la FP va a ser un punto de inflexión, pero también trabajamos con grupos de alumnos con discapacidad, con la Universitat de València y con EDEM.
¿Cuántos alumnos y colegios había cuando usted llegó a la Escuela Municipal y cuántos ahora?
El excepcional equipo humano que hay detrás de la Escola ha hecho que el crecimiento haya sido exponencial. Los números son solo una cifra, lo importante es que hemos aumentado la flota de embarcaciones y con ello el número de alumnos sin perder la esencia de la Escola, una escuela municipal abierta a los valencianos y sus visitantes donde prima la calidad.
¿Si vivo en Campanar es fácil llegar al puerto?
Llegar a la Marina es muy fácil, tanto en bicicleta como en vehículo particular. También el transporte público hasta la playa es muy cómodo desde diferentes partes de la ciudad.
¿Y desde el área metropolitana?
Yo vengo de Paterna y por los horarios suelo venir en coche, aunque alguna vez en bici usando el antiguo cauce del Turia. Si no tuviera que ir cargado con el portátil y ropa de navega lo haría más a menudo, pero para el área metropolitana lo más cómodo es acudir en coche.
«No todo tiene que ser turismo de toalla y sombrilla; las actividades náuticas son un atractivo más»
¿Qué balance puede realizar de la labor de la red de Escuelas de Vela Homologadas de la Comunitat de la que también está al frente?
Somos una red heterogénea, con escuelas de playa y puerto, públicas, privadas y de club náutico, pero con muchas sinergias entre las que destacan el amor por el mar y el viento y cómo no, la promoción del deporte de la Vela en todas sus variantes.
¿De cuántas escuelas podríamos estar hablando?
Somos más de cincuenta escuelas que trabajamos juntas con este objetivo, además de conseguir un distintivo de calidad medioambiental, que es el Gallardete Azul. Tenemos programas de formación de técnicos, de alumnos…
¿Cree que la vela se promociona adecuadamente en Valencia?
La ‘Fede’ y el Ayuntamiento trabajan para ello. Tenemos uno de los mejores Clubs Náuticos del Mediterráneo, el RCNV y escuelas de windsurf y vela. Nos encargamos de que el mar no cierre en invierno… ni en verano.
¿Qué tipo de iniciativas para la promoción de la vela llevan a cabo?
Iniciativas como ‘La Mar de Dones’ para acercar la vela a las mujeres, donde navegaban de forma casi gratuita los martes, han tenido un gran éxito; primero con la ayuda del Ayuntamiento de València y luego asumiéndolo la Federación de Vela de la Comunitat Valenciana (FVCV) como un proyecto propio, así como jornadas de Puertas Abiertas para colegios con menos recursos.
«Es complicado saber cuántos usuarios ‘únicos’ tenemos, pero estamos hablando de más de 10.000 usos por año»
Para los kilómetros de costa valenciana, ¿considera que se practica poco la vela?
Siempre se ha dicho que València vive de espaldas al mar y lo estamos cambiando, es trabajo de todos acercar el mar a la gente, y tiene que haber más que turismo de toalla y sombrilla. Las actividades náuticas han de ser un atractivo más que ofrecer a turistas y locales.
¿Forma parte la vela de la identidad valenciana?
Pocas cosas hay más valencianas que la mar y el mediterráneo. Pensemos en los cuadros de Sorolla en la playa de la Malvarrosa o en las barcas de Vela Latina en la Albufera. Además, hemos tenido dos ediciones de la America’s Cup y la salida de la Volvo Ocean Race en Alicante.
¿Le llama la atención que tengamos ‘semana blanca’ asociada a la nieve y no una semana azul asociada al mar?
Es algo que a todos los que nos dedicamos a la náutica nos ‘duele’. Poco a poco se va cambiando, pero en la nieve hay una infraestructura detrás que nosotros no tenemos, aunque se van viendo cambios.
«El transporte público hasta la playa es muy cómodo desde diferentes partes de la ciudad»
¿Y esto por qué se produce?
Sobre todo por mentalidad. En Valencia tenemos un tiempo espectacular de abril a noviembre, tanto que no tenemos ningún tipo de cultura del neopreno, cuando hace frio dejamos de ir a la playa y con ello a navegar. Hablo del gran público.
Por cuestión del material, entiendo.
Nadie va a esquiar sin comprar un mono de esquí y una chaqueta, pero para navegar un neopreno de quince euros o un traje de agua no nos parece una buena inversión… y si pasas frío la vela es un deporte poco atractivo. Aun así hay que hacer autocrítica, y ver que el mar y los puertos han de estar abiertos a todos.
¿Qué debería hacerse?
Promocionarlo más desde organismos locales, como ya se viene haciendo, y adaptando la oferta a las necesidades de los colegios. No todos caben en el mes de junio, pero con nuestra climatología podemos navegar todo el año… o ¿alguien esquía en pantalón corto y manga corta? ¿o en chándal?
¿La vela es un deporte ‘de temporada’?
Cada vez menos, aunque lógicamente es más bonito navegar entre mayo y septiembre ya que el viento suele ser mejor y navegar con sol y calor… pues es más chulo.
¿En comparación a otras regiones del litoral como Andalucía, Cataluña, Galicia… en qué posición nos encontramos?
Somos un referente tanto en escuelas como en competición, pero siempre bien acompañados de nuestros amigos los catalanes, baleares, andaluces… Si quieres viento más fuerte, pues Canarias o Tarifa son excepcionales, pero tenemos unas condiciones que son muy buenas.
¿En qué medida la vela es un deporte caro?
Pues podemos compararlo con el ciclismo, hay para todos los gustos. Puede ser muy económico, como navegar en la Escola por dieciséis euros dos horas, o tremendamente caro como la America’s Cup o los barcos con ‘foils’. Si vienes a navegar una vez a la semana, entre dieciséis y diecinueve euros con un barco TOP como los de la Escola, es asumible.
«Empieza a haber empresas donde compartes barco y aplicaciones con el ‘Som Tripulació’»
¿Compensa tener un barco en propiedad para navegar sólo en Semana Santa y verano?
En mi opinión no. Hay barcos de todos los precios, pero lo caro de un barco (hay cruceritos de veintiséis pies desde menos de 10.000 euros que te pueden dar muy buenos ratos) es mantenerlo, amarre, reparaciones, revisiones… si no navegas con mucha asiduidad es mejor alquilarlo.
La política del ‘sharing’ también llega a la mar.
Empieza a haber empresas donde compartes barco y aplicaciones con el ‘Som Tripulació’, donde se pone en contacto a armadores con tripulantes.
¿Hay mucha gente que vive de la náutica en Valencia?
Más de la que la gente podría pensar. Hay escuelas de vela, marineros, velerías, astilleros, varaderos, alquiler de lanchas, mecánicos, tiendas de acastillaje, tiendas de material, etc. Es un mercado cada vez más profesionalizado.
¿Cómo valoraría la celebración de la Copa América en Valencia?
Tener un super evento comparable a ser sede de un Mundial de Fútbol o unos Juegos Olímpicos en la ciudad de València es un hito que todavía no valoramos del todo. Puso a València en el mapa, no solo de la vela, sino del deporte mundial. Además, la edición de 2007 fue una de las mejores en los más de cien años de esta competición.
¿Recuerda alguna anécdota?
A mí en Nueva York una vez me preguntaron que de donde era y al decir “de València” me dijeron “¡America’s Cup!”.
¿En beneficio de la vela quedó alguna oportunidad desaprovechada?
Yo me quedo con la espinita de tener una instalación singular donde ubicar la Escola Municipal de Vela y el resto de deportes náuticos en un marco incomparable como La Marina de Valencia. Tenemos una dársena perfecta para ser el mejor polideportivo del Mediterráneo y está por explotar.
Si parásemos a cualquier vecino de València por alguna de sus calles, ¿cuántos sabrían lo que es un noray?
(Risas) Pues igual menos de los que sabrían contestarte cómo se calcula el recibo de la luz o cuál es la diferencia entre un cable HDMI y un Euroconector. Pero es una pregunta muy específica… si les preguntas qué es el Garbí o de donde sopla el Levante te contestan más.