Entrevista > Martín Sanz / Escritor y periodista (Madrid, 2-noviembre-1974)
Aún siendo madrileño de origen, Martín Sanz Moros nos reconoce que ya se siente más alicantino. Por algo lleva más de media vida residiendo en esta tierra, y se ha consolidado como uno de nuestros principales relatores y biógrafos. No en vano se ha publicado hasta quince libros sobre alicantinos ilustres y otras muchas historias de la provincia. “Ya estoy escribiendo el decimosexto” nos cuenta entre risas tras terminar esta entrevista.
Este periodista ha trabajado en diversos medios e instituciones, y actualmente ejerce de responsable de comunicación en Hidraqua y sus compañías mixtas, encargadas del suministro de agua potable en distintos municipios de la Comunitat Valenciana y Murcia.
Haciendo gala, una vez más, de una impresionante eficacia para aprovechar sus escasos ratos libres, Martín acaba de publicar dos nuevos libros casi simultáneamente. Uno de ellos dedicado al fallecido político benidormense Miguel Barceló, y otro a la historia del Festival de Cine de Alicante.
¿Cómo te surgió esto de escribir libros sobre personas y aspectos de nuestra provincia?
Hace ya mucho tiempo que cuando viajo a Madrid realmente no me vuelvo a sentir en casa hasta que en el trayecto de regreso, desde el tren o coche, veo llegar el cartel de Villena. A Alicante le debo todo lo que tengo, tanto en mi vida personal como profesional.
¿Así que cómo le puedo devolver a esta tierra todo aquello que me ha dado? Pues dedicándole mi tiempo a escribir sobre ella y sus gentes más insignes.
¿Cuál fue tu primer libro?
Fue la biografía de don Vicente Ramos, cronista oficial de la provincia de Alicante. Lo escribí cuando yo tenía unos 27-28 años. Había llegado hacia poco de Madrid, pero desde el principio me interesé mucho en la cultura alicantina. Y poderme enfrentar a semejante tótem de esta tierra como era don Vicente… fue algo impresionante para un chaval como yo.
Él era una inmensa fuente de conocimiento viviente de todos los aspectos relacionados con la provincia que te puedas imaginar. Por ejemplo, desde el Hércules hasta la historia de la Diputación… De hecho, falleció cuando estaba escribiéndola.
«Algunos temas de mis libros fueron buscados, y otros simplemente vinieron hasta mí»
Y desde entonces has escrito sobre la Albufereta, el arquitecto García Solera, el cocinero Ramón Riquelme, el cineasta Luis Colombo, la Cruz Roja provincial… Son temas muy variopintos, ¿cómo los seleccionas?
En algunos casos los he pretendido yo y ha coincidido que las personas biografiadas también han querido hacerlo. Porque no siempre es fácil que la gente te dé la confianza de contarte su vida; por ejemplo, García Solera o Miguel Barceló fueron un poco reacios en un principio.
Y en otros casos ha surgido porque me ha llegado la propuesta, como el de la Cruz Roja que me lo propuso la propia institución. Por supuesto para mí es un honor siempre que piensen en uno. En definitiva, algunos de mis libros los he buscado mientras que otros me han llegado.
¿Hay alguno, entre los quince libros, al que le tengas especial cariño? Imagino que además cada uno te recuerda tus propias vivencias personales por las que pasabas entonces.
Totalmente. Cuando los releo siempre siento removerse muchas cosas en mi interior. Quizás aquellos dos a los que recuerdo con más afecto sean ‘La gran olvidada. Postales desde la Albufereta’ y ‘Ausencias’.
De hecho son dos libros a los que quiero volver con una segunda edición actualizada. El de la Albufetera porque tuvo un éxito enorme, me han pedido ejemplares desde sitios que no te podrías imaginar. Y el de ‘Ausencias’ porque es una semblanza de personas ya fallecidas que pertenecen a mi mundo interior y sentimental, y desde que se publicó por desgracia ya ha habido más ausentes que me gustaría incluir.
«Estoy preparando una actualización de ‘Postales desde la Albufereta’ y ‘Ausencias’»
Vamos ya con tus nuevos ‘bebés’. Hasta ahora habías publicado muchas biografías dedicadas a alicantinos vivos, pero ahora sale este de Miguel Barceló post mortem.
Sí, pero en realidad también pude entrevistarlo en vida. De hecho este libro surgió a raíz de una conversación con el propio biografiado, en la que acordamos sentarnos y que me contara las cosas de su vida. Así, durante el invierno de 2016 comenzamos a trabajar de una manera muy ordenada y rigurosa, como era siempre Miguel Barceló, quedando todos los fines de semana en su hotel Les Dunes de Benidorm. Salieron casi sesenta horas de grabación.
Afortunadamente él todavía tuvo tiempo de leer el primer borrador del libro, y he de decir que le gustó bastante. Simplemente me hizo alguna matización de fechas y pequeños detalles. Sin embargo no acabamos de decidir la fórmula de publicación, dado que él quería hacer una pequeña edición apenas para sus amigos. Y poco después falleció, así que el proyecto se quedó ahí en un Word durante años.
Entonces, ¿cómo resucitaste este libro ‘Miguel Barceló Pérez, desde la reflexión’?
Pues fue hace un par de años por un almuerzo con mi buen amigo Matías Pérez Such, sin ninguna duda una de las personas que mejor entiende el turismo como sector en la Comunidad Valenciana, que se enteró de este trabajo y me animó a publicarlo. Gracias a la Fundación Frax que él preside y al senador Agustín Almodóbar (nieto de Miguel Barceló) nos pusimos a trabajar a tres bandas y por fin el libro ha visto la luz tras tantos años.
Estamos muy contentos, porque ha quedado una edición preciosa que seguro le habría encantado a don Miguel. Ojalá hubiera estado presente en la presentación que hicimos en el Auditorio de la Fundación Mediterráneo de Benidorm, que estuvo lleno de público.
«Miguel Barceló era un europeísta muy adelantado a su tiempo»
Quizás Miguel Barceló fuera uno de los principales puntales en la provincia de aquella derecha que rompió con el Franquismo y facilitó la Transición a la democracia, ¿no?
Fue una pieza clave para la reunificación del centro-derecha en la provincia de Alicante e incluso en la Comunidad Valenciana. Es decir: la conversión de UCD, Partido Liberal y Alianza Popular en el PP. Era un hombre muy ocupado y preocupado por su ideología hasta el final de sus días.
Fue concejal de Benidorm y senador durante muchísimos años. ¿Quizás en su época el Senado tenía más peso y prestigio que hoy en día?
Bueno, creo que toda la clase política tenía un prestigio antes que ahora ya no tiene (risas). Independientemente de la institución donde desarrollen su labor.
De todas formas creo que el Senado ahora sí está teniendo un papel más fundamental en la política española. A veces se dice que es “un cementerio de elefantes”, pero yo lo he conocido por dentro y te puedo asegurar que hay gente que trabaja muy bien. Por ejemplo el propio Agustín Almodóbar es un trabajador incansable por la industria turística.
Volviendo a Barceló, ¿cuáles crees que fueron sus principales aportaciones políticas tanto a la provincia como a su Benidorm natal?
Él siempre fue un gran europeísta por encima de todo. De hecho en aquellos tiempos de la Comunidad Económica Europea ya tenía una visión muy vanguardista de lo que iba a acabar suponiendo la Unión Europea. Fue un pionero en esto, como en tantas otras cosas. Sería muy interesante escuchar su opinión sobre estos momentos críticos que está viviendo ahora Europa.
Y además fue un gran defensor del ‘modelo Benidorm’. Daba igual que estuviera en Nueva York o en Benifato, él siempre hablaba de la importancia que tenía su poble para España y Europa. De hecho tú sabes que hay veces que cuando estás en el extranjero si dices que vienes de Alicante no les suena, pero Benidorm sí (risas). Miguel era benidormense de corazón, y europeísta liberal de espíritu.
«Mi libro sobre Barceló ya ha llegado a la biblioteca del Senado»
¿Dónde se puede comprar el libro?
Los lectores interesados pueden solicitarlo a la Fundación Frax. También haremos nuevas presentaciones próximamente.
Por cierto, he de decir que el libro ya está en la biblioteca del Senado. Esto me resulta especialmente emocionante. Es un honor muy grande, pero no para Martín Sanz sino sobre todo por la trayectoria de don Miguel, su familia, Benidorm y Alicante.
Vamos con el siguiente. ¿Cómo te surgió escribir ’21 años del Festival de Alicante, historia de una ilusión’?
Nació de una propuesta surgida por parte de Vicente Seva, el director del festival. Nosotros nos conocemos desde mi época de joven redactor de cultura, dado que ya le entrevisté alguna vez en los años 90 cuando ya hacía cortometrajes. Siempre le he dicho que nunca deje de hacer cine, aunque ahora esté más centrado en otros menesteres.
De hecho yo fui una de las primeras personas que supo que se iba a hacer la primera edición del festival, que en un principio estaba solo dedicada a cortometrajes. En aquel momento se estaba construyendo la Ciudad de la Luz, y yo trabajaba en la sociedad pública implicada. Entonces un día Vicente vino a pedirnos un patrocinio para poner en marcha esta idea y nosotros lo apoyamos.
En otras palabras, conozco el Festival de Alicante desde el principio. Lo he alabado cuando lo he tenido que alabar, y criticado cuando lo he tenido que criticar. Vicente lo sabe, y por eso me pidió que lo escribiera yo.
«El Festival de Alicante ha ido creciendo gracias a la perseverancia de Vicente Seva»
¿Por qué precisamente lo habéis publicado en el vigesimoprimero aniversario del festival?
En realidad empezamos con el libro hace tres años, y la idea original era publicarlo por el vigésimo aniversario. Sin embargo por diversos motivos se fue retrasando, así que al final he añadido una edición más y ya está (risas).
Hoy en día salen muchos nuevos festivales de cortos que son casi ‘de quita y pon’ y desaparecen a la segunda o tercera edición. ¿Cuál es la clave para que el de Alicante haya aguantado dos décadas?
Pues por encima de todo gracias al empeño de Vicente Seva. Si él no se lo hubiera creído, este festival no habría seguido. Y ha sido una labor difícil, cuando tienes una dependencia de las administraciones públicas estás sujeto a muchas variables. La primera que cada cuatro años tienes que volver a explicar el proyecto a los políticos.
«Durante los próximos años se va a desarrollar mucho en Alicante el ‘turismo de pantallas’»
Además el festival ha ido evolucionando mucho. Hoy en día ya tiene largometrajes y documentales tanto nacionales como internacionales.
Sí, el festival ha ido in crescendo. De hecho ha sido un reflejo de las evoluciones de la propia industria cinematográfica española, dado que los actores y directores que han pasado por Alicante han sido quienes eran los protagonistas de cada momento. Al final este libro no deja de ser un recorrido por la historia más reciente del cine español.
¿Qué dirías que ha aportado este festival a Alicante y específicamente a la industria audiovisual alicantina?
Creo que ha puesto a Alicante en el mapa de este tipo de certámenes. Ahora, 21 años después, ya estamos en el circuito de los festivales. Por supuesto el modelo a seguir para todos es San Sebastián, y quizás el siguiente es el de Málaga. Sin embargo, nosotros no estamos ya tan lejos.
Pienso que en los próximos años vamos a ver desarrollarse cada vez más el llamado ‘turismo de pantalla’ en Alicante. Es decir la gente que busca un destino turístico para ver el lugar de un rodaje, la celebración de un festival o acontecimientos relacionados con el audiovisual. Este festival está contribuyendo a ello, e incluso ya está atrayendo a turistas que vienen aquí unos días ex profeso para ver este evento.
¿Dónde podemos adquirir este libro?
A través del Instituto de Cultura Juan Gil-Albert, que es la institución editora. Aprovecho para agradecer a los dos directores de publicación que han sacado adelante este proyecto: Toni Cabot y Cristina Martínez.
Además en la promoción del Festival de Cine de Alicante, que se realizará el 28 de abril en Madrid, también se presentará el libro, al igual que una vez que comience el propio certamen en mayo.