Entrevista > Rafa Jordán / Ciclista (Utiel, 12-agosto-1983)
Rafa Jordán, docente de profesión, está considerado por muchos como el mejor ciclista de nuestra localidad, aunque no le agradan este tipo de calificativos. Creció practicándolo por las montañas que nos rodean, y viéndolo por la tele, con Alberto Contador -doble ganador del Tour- como gran ídolo, “también por el ictus que sufrió en plena carrera”.
“Induráin, aunque vi algo, me pilló muy joven”, admite. En cuanto a mountain bike, su especialidad, siente gran admiración por José Antonio Hermida, “un pionero entre los corredores nacionales”. Internacionalmente destaca suizos y franceses.
Ganador de las dos últimas ediciones del Machacacachas, pertenece al Club Ciclista Utiel “desde siempre”, estando en la directiva y hasta en la presidencia una temporada. “Por eso es mi prueba, la que organiza mi club y ayudo”, agrega.
¿Cómo llega el ciclismo a tu vida?
De pequeño ya me gustaba: nos criábamos con la bicicleta en la calle. Recuerdo que siendo un adolescente tenía buen nivel y salía con gente de mucha más edad.
Luego lo combiné con el atletismo, deporte en el que me centré, llegando a competir en algún Campeonato de España con la Selección Valenciana de campo a través o 1.500 metros.
¿Quisiste volver a la bici?
Durante tres o cuatro años hice duatlones, igualmente compitiendo a nivel nacional. Nunca gané ninguna prueba, pero sí subí en varias ocasiones al podio. Seguidamente tuve una lesión y ya me dediqué por completo a la bicicleta.
«Estoy a favor de las bicicletas eléctricas si se usan correctamente, no a nivel de competición»
¿Principalmente de montaña?
Es la que más me gusta, aunque para entrenar dispongo también de una de carretera. La montaña brinda algo especial, permite desconectar de los problemas diarios y conocer un sinfín de lugares naturales.
Además, cuando vas a pruebas descubres nuevos paisajes, maravillosos, siempre en contacto con el entorno natural.
¿Tan dura es la prueba del Machacacachas?
Los que vivimos en la zona estamos acostumbrados a la montaña de aquí, con mucha piedra y rampas duras, pero sin grandes desniveles. Se trata de una marcha dura física y técnicamente que he tenido la suerte de ganar cuatro veces.
Los utielanos corremos en casa, conocemos el terreno y contamos con la motivación de hacerlo en nuestro pueblo, ante nuestra gente.
¿Qué distancia era este año?
Había dos recorridos, una marcha algo más corta, de unos 41 km., y una maratón de 52 km. La prueba reina suele ser la de mayor dureza, la que más llama la atención, y había más participantes.
Tardé alrededor de dos horas y media, sin apenas descansos porque las bajadas son exigentes y pide que tengas que ir en constante tensión y concentración.
«Las pruebas que celebramos aquí me han salido bien, porque conozco el terreno, estoy motivado…»
¿No te puede dar una ‘pájara’?
Claro, por eso es determinante comer e hidratarte bien. No podemos olvidarnos, aunque no tengas sed ni hambre: no te das cuenta que baja el nivel de glucosa y energía hasta que te da un desvanecimiento, una ‘pájara’ como decimos en el argot, te quedas sin energía.
¿Te ha sucedido a menudo?
Por supuesto, nos pasa a todos. Como digo, no eres ciclista hasta sufrir una ‘pájara’. Se pasa muy mal: pedaleas, pero te das cuenta que no avanzas, notas un vacío, una sensación de hambre, pesadez, mareo…
Algunos balbucean hasta incoherencias, al no llegar suficiente glucosa al cerebro, puede ser gracioso para los que estamos alrededor (ríe).
¿Eres partidario de las bicicletas eléctricas?
Si se usa correctamente, claro que sí. Es un tipo de bici que la demandan ciertas personas, porque a su edad o por tema de salud ya no pueden, o bien salen con gente que van a más ritmo y así se equilibran. Como disfrute lo veo bien; a nivel competitivo, no.
«Para nosotros, la edición Machacacachas de este año, la vigesimotercera, fue muy especial por la DANA»
Dicen que eres el mejor ciclista de Utiel.
Exageran, porque en nuestra localidad hay ciclistas muy buenos. Las pruebas que celebramos aquí, como decía, me han salido bien, debido a que las preparo mucho, estoy motivado, me crezco, pero hay utielanos que están sobresaliendo a nivel nacional.
¿Sois la cuna valenciana del mountain bike?
Sobre todo somos pioneros, tanto en cantidad de ciclistas como en la organización de una competición. ¡Pocas pruebas hay con este número de ediciones! Este año, la vigesimotercera, fue muy especial por la DANA.
¿Cuál va a ser tu próximo reto?
Debido a que tengo una niña pequeña, de tres años, mi idea es participar en carreras de la zona, por València o Cuenca, que me permiten ir y volver el mismo día. Claro que me gustaría competir por todo el país, pero exige pasar fuera todo el fin de semana y a día de hoy es complicado. El ciclismo no deja de ser una afición.