Entrevista > José Juan Tomás ‘Bil’ / Poeta (Villena, 18-noviembre-1978)
Entrevistarse con ‘Bil’ es hacerlo frente a unos ojos cargados de ilusión y energía, como los de un niño. Una característica que siempre ha impregnado sus poemas, esos que destilan la sencillez de lo complejo y la esperanza de una quimera que no entiende de imposibles para alguien que aterrizó tarde en el mundo de la poesía. Alguien para el que la edad es sólo un número escrito en un cartón en el fondo de la cartera.
Gracias a la editorial Cuadranta, esta primavera ha conseguido ver la luz su primer poemario, ‘Érase una vez, muchas veces tú…’ donde en el prólogo, Jordi Gandía ya nos destaca la facilidad de transmitir felicidad con sus palabras. Charlamos con él de la vida y la poesía, para confesarnos que ya trabaja en nuevos poemas de contenido más social y paisajístico que espera que pronto puedan ver la luz.
La editorial Cuadranta acaba de publicar tu primer poemario, ¿cuándo surge en ti el gusanillo por escribir poesía?
Desde bien pequeño la acción poética siempre llamó mi atención. Podría decir que nació cuando cursaba Educación Primaria y también en mi casa; tuve buenas influencias que me mostraron este camino tan chulo. Los primeros versos los escribí en el colegio.
‘La brújula sin imán, ¿qué ha significado para ti?
Poéticamente hablando pongamos que la brújula significó salir del armario. Sacar las palabras del fondo oscuro del cajón y empezar a compartirlas con la gente.
‘Érase una vez, muchas veces tú…’ ha visto la luz después de casi cinco años. ¿A qué se ha debido este retraso?
Con un trabajo hecho desde 2019, vino la pandemia y lo torció todo. Yo no entendía publicar en ese momento un poemario de amor con distanciamiento social y otras lindezas que nos impusieron.
Después retomé mi gran pasión por la montaña y la naturaleza, que fue lo que terminó de despistarme y dejé de buscar a las musas… (risas) hasta que el trabajo iniciado antes de la pandemia fue concluido para poder ver la luz finalmente.
«Pongamos que la brújula significó salir del armario, sacar las palabras del fondo oscuro del cajón y empezar a compartirlas»
¿Cuál es lo que van a encontrarse los lectores entre sus páginas?
Pues un poemario muy de a pie, muy cotidiano, que te muestra cosas sencillas del día a día a las que a veces no les prestamos la atención que merecen.
¿Consideras que escribir poesía es como desnudarse con palabras?
Cuesta mucho destapar y, como bien dices, desnudar los sentimientos. Si lo haces de manera tranquila y adecuada, hacia todo aquello que te inspira, es cuando puede convertirse en poesía.
¿Qué es para ti la poesía?
Una válvula de escape. Estamos sometidos, cada vez más, a una rutina aplastante y un estrés constante. La inmediatez con la que funciona todo, nos conduce inconscientemente a perdernos los pequeños detalles de nuestras vidas.
Para mí la poesía es esa pausa necesaria y exclusiva que me aleja de esta realidad caótica y me recuerda que hay que cuidar y disfrutar el lado sencillo de las cosas.
«Esta inmediatez con la que funciona todo nos conduce a perdernos los pequeños detalles de nuestras vidas»
Las nuevas generaciones parecen haber reavivado este género, ¿no crees?
¡Juventud divino tesoro! Ellos siempre tendrán el poder de la destrucción y la creación. Los mayores nos debemos al compromiso de ser espejo, y mostrarles que hay un camino creativo que recorrer. Aplaudo y admiro mucho a los artistas prematuros.
¿Consideras que la poesía debe ser explicada para que se entienda mejor?
Una de las cualidades bonitas que tiene un poema es que puede tener distinto significado para según quién y en qué momento lo lea. Las explicaciones ya las dan los profesores, los políticos, los abogados… y me parece que, en estos ámbitos, poca poesía existe.
Tu cercanía y naturalidad han calado entre el público. ¿Tienes previsto publicar más poemarios?
Estaría guapo seguir publicando. Tengo que organizar algunos poemas de contenido más social, más paisajístico. Todo se andará.
«Los jóvenes siempre tendrán el poder de la destrucción y la creación, los mayores nos debemos al compromiso de ser espejo»
¿Qué autores te han influido más en tu carrera?
Imposible mencionarlos a todos. Hay mucha poesía inspiradora suelta por el mundo.
¿Cuál es el libro que hay ahora mismo encima de tu mesilla de noche?
Tengo varios, como ‘El Monstruo de colores’ o ‘Duerme como un Tigre’. El último libro que he leído, hace muy poquito, ha sido ‘La sombra del Albatros’.
¿Volverás a los recitales de poesía en la ciudad?
Seguro. Organizar y participar en esta clase de eventos es coincidir con personas muy top del movimiento cultural de la ciudad. A su vez, significa poder mostrar y compartir con el público que hay un arma cargada de futuro llamada poesía.