Entrevista > Rosanna Espinós / Actriz (Alcoy, 10-diciembre-1965)
Un viaje cultural a Igualada (Barcelona) transformó el concepto que tenía Rosanna Espinós del teatro, “al observar la estructura y amor por las obras que allí había”, apunta, por entonces con 18 años. Anteriormente ya le había influido “el aire de Alcoy, tan lleno de artistas” y había hecho sus primeros pinitos en su etapa estudiantil.
“En el instituto había varios grupos teatrales”, indica, recordando un premio a la mejor interpretación que recibió por ‘LSD’, entregado por Jesús Puente, popular actor y presentador de televisión. A partir de entonces ha trabajado en infinidad de obras y series como ‘L’Alquería Blanca’, en un papel que ha evolucionado.
Es de reciente estreno ‘La buena letra’, película en la que tiene un pequeño papel, y pronto llegará ‘Mi cielo, tu infierno’, con un rol más significativo. Asimismo, está en tres funciones de ‘Contrahecho Producciones’ (‘Delirium’, ‘Vesania’ y ‘Cegarem ortigues amb els tacons’), “tocando temas latentes como la adicción, la locura y la prostitución”.
¿De joven te fijabas en alguna actriz?
Estaba absolutamente fascinada por las que aparecían en televisión, como Carmen Maura, majestuosa en ‘¿Qué he hecho yo para merecer esto?’ (1984) o ‘Mujeres al borde de un ataque de nervios’ (1988).
Esas películas me marcaron, pero mucho más un festival de teatro amateur al que asistimos en Cataluña. Fuimos un grupo de amigos -entre ellos, Pepa Miralles, Pep Sellés y Xavi Castillo-, y todos regresamos maravillados: vi la función ‘Agnus Dei’ y me dije que deseaba hacer eso.
¿Dónde te formaste a continuación?
Principalmente sobre los escenarios. Hice talleres de teatro junto a la malograda Àngels Sanz y después estuve tanto en ‘La Cazuela’ como en la versión paralela, creada por Pep Cortés (‘La Cassola’).
Realizamos la función ‘Aci no paga ni Déu’ y ya no dejé de trabajar, hasta ahora. Con los años tuve la oportunidad de hacer igualmente televisión y cine.
«El teatro posee aspectos que le hacen único: es en directo, la respuesta del público es inmediata…»
¿Podrías escoger entre los tres?
Lo cierto es que el teatro posee aspectos que lo hacen único: es en directo, la respuesta del público es inmediata… Sin embargo, todos los códigos actorales me gustan.
El cine y la televisión están mejor pagados y son menos vampiros, en el sentido que es más concreto en el tiempo, te absorbe menos. Además, te da cierta notoriedad.
Eso te pasó en ‘L’Alqueria’.
Exacto, y en otra en la que participé previamente, ‘Senyor retor’ (2011), ambas para Canal 9. Las dos tuvieron mucho éxito: fue una pena que la segunda finalizara con el cierre de la cadena.
«Ha gustado tanto ‘El patiment de les dones’ que en septiembre la retomaremos sobre los escenarios»
¿Cuáles han sido tus obras teatrales de referencia?
‘Homenatge a T’, dirigida por mi amiga Pepa Miralles, una propuesta multidisciplinar, muy especial, pues era una obra poética escrita por Jordi Botella que rendía tributo a la canción de Ovidi Montllor. Hacía el personaje de Teresa.
No puedo olvidarme de la mencionada ‘Aci no paga ni Déu’, en la que compartía cartel con Neus Agulló y Juli Cantó -mi compañero de vida-, o ‘Merkel’, interpretando a Angela, la canciller alemana. Lástima que solo pudimos realizar la función tres veces, tras meses de esfuerzo.
¿Qué es ‘El patiment de les dones’?
Una ruta dramatizada que hemos llevado a cabo por las calles de Alcoy. Ha tenido tanto éxito que la hemos repetido en diferentes ocasiones -siempre durante la Feria Modernista- y en septiembre la vamos a retomar, en una versión sobre escenario.
Son cuatro monólogos, interpretados por cuatro mujeres, que relatan casos muy notorios para la ciudad en el siglo XIX.
«La nuestra es una profesión en la que debemos tener mucha paciencia, es una carrera de fondo»
El también alcoyano Pau Durà te reservó un papel…
Para ‘Formentera Lady’, apareciendo como enfermera en una escena. El pasado año volví a repetir en el cine en dos proyectos, uno de ellos ‘La buena letra’, film ya estrenado, dirigido por Celia Rico, y que ha agradado bastante tras pasar por el Festival de Málaga.
El segundo fue ‘Mi cielo, tu infierno’, de Alberto Evangelio. Hago de madre de una de las protagonistas (Tania Fortea), que sufre una trama de amor clandestino.
De igual modo estoy con ‘Micomicona’, compañía que elabora obras para alumnos de institutos, como ‘Historia de una escalera’ o ‘La casa de Bernarda Alba’.
¿No paras?
Los actores no podemos, en una profesión en la que debemos tener mucha paciencia, es una carrera de fondo. En ‘L’Alqueria’ tenía un papel muy bonito (Carmen), enfermera asistente del malo de la serie (Narcís Boira, interpretado por Jaume Linares). Le acompañé hasta su muerte.
Pensaba que ahí finalizaba mi inclusión en la historia, pero la sorpresa fue cuando me hicieron volver, dándome más protagonismo como mujer lesbiana que tiene un romance con el personaje que interpreta Carme Juan.