Es, sin duda alguna, uno de los destinos más fotografiados y, como se dice hoy en día, ‘instagrameados’ del Mediterráneo occidental. Altea mantiene, al menos a ojos de sus visitantes, esa esencia de pueblo blanco al que con tantísima maestría cantó Serrat aunque, al contrario que en la letra del inmortal tema del ‘Noi del Poble Sec’, aquí nadie parece querer huir de un destino agrio y falto de futuro.
Al contrario, por muy exportada que esté la imagen de ese pueblo subido a una colina y coronado por la cúpula de su iglesia, muchos de sus rincones, especialmente los del Casco Antiguo, siguen siendo un auténtico tesoro por ‘desenterrar’.
Esto no es sólo para los veraneantes, sino también para muchos habitantes de los pueblos cercanos que todavía no han perdido la capacidad o, al menos, las ganas de sorprenderse y maravillarse como lo hacen los niños al contemplar algo por primera vez o, como mínimo, con otros ojos.
En tres idiomas
Para ello, la Villa Blanca ha preparado para este mes de agosto, el más vacacional en España (y buena parte de Europa), una amplia oferta de visitas guiadas y gratuitas por el casco antiguo de la localidad.
Una iniciativa que sigue creciendo verano tras verano y que permite a vecinos, visitantes y turistas adentrarse en el patrimonio histórico, cultural y artístico de uno de los pueblos más bonitos de la Marina Baixa. Las rutas, que se celebran durante todo el mes de agosto, están abiertas a todo el mundo previa reserva y se ofrecen en tres idiomas: valenciano, castellano e inglés.
Estas visitas se convierten en una oportunidad ideal para redescubrir las callejuelas empedradas, las fachadas encaladas y los rincones con historia que hacen de Altea un lugar único. La iniciativa busca, además, poner en valor el legado cultural del municipio y fomentar un turismo más respetuoso, pausado y con conciencia patrimonial.
La inscripción previa es obligatoria y puede hacerse por email o por teléfono
Cada viernes y sábado, con aforo limitado
El programa de visitas se extenderá hasta el sábado 30 de agosto. Se celebran cada viernes y sábado a partir de las 19:30 horas, con punto de encuentro en la Tourist Info de Altea, situada en el Paseo Sant Pere. La única excepción será el sábado 9 de agosto, cuando no habrá visita debido a la celebración del emblemático Castell de l’Olla, el mayor espectáculo pirotécnico del verano en la comarca que congrega a decenas de miles de personas en ese entorno.
Y aunque la iniciativa está abierta a todos y es gratuita, para participar es imprescindible reservar plaza con antelación, ya que el aforo está limitado a treinta personas por grupo. Las reservas pueden realizarse por correo electrónico, escribiendo a altea@touristinfo.net, o bien por teléfono, llamando al 965 84 41 14.
Apuesta por el turismo cultural
La responsable local de Turismo, Xelo Cortés, considera que esta es “una buena manera de conocer el patrimonio alteano”. La edil ha querido poner en valor “la acogida que tiene cada año esta iniciativa”, destacando que “muchas de las visitas cuelgan el cartel de completo pocos días después de anunciarse”.
“Nos gusta que tanto los visitantes como la población local tengan la oportunidad de disfrutar de nuestro casco antiguo de una forma distinta, acompañados por profesionales que conocen su historia, su arquitectura y sus leyendas”, añade González, quien anima a todos los interesados a “no dejar su reserva para última hora”.
El aforo es limitado a treinta personas y el punto de encuentro es la Tourist Info de Altea
Experiencia adaptada a todos los públicos
Las visitas guiadas están diseñadas para todos los públicos, sin necesidad de tener conocimientos previos sobre historia o arte. Los guías oficiales combinan la explicación histórica con anécdotas y curiosidades que convierten la experiencia en un recorrido ameno y enriquecedor. Además, la ruta incluye paradas estratégicas en algunos de los puntos más emblemáticos del centro histórico: la plaza de la iglesia, las calles del Fornet, el Mirador de los Cronistas o el Portal Vell, entre otros.
El hecho de que las explicaciones se realicen en tres idiomas garantiza la participación de un público diverso, tanto local como internacional, lo que responde a la vocación de Altea como municipio turístico acogedor y multicultural.
Una actividad para disfrutar del atardecer alteano
La elección del horario, a las 19:30 horas, no es casual. Las visitas se inician cuando el calor empieza a dar tregua, permitiendo disfrutar del encanto del casco antiguo a la hora del atardecer, uno de los momentos más mágicos del día en Altea. Los participantes pueden disfrutar, al finalizar el recorrido, de la oferta gastronómica del centro histórico o de un paseo junto al mar.