Nuestra Elena Amores vive posiblemente su mejor momento deportivo, recién cumplidos los veintitrés. Al hecho de haber fichado por un club -el Super Amara Bera Bera de San Sebastián- que aspira a todo, se suma una nueva convocatoria para la Selección Nacional absoluta.
Han sido tres años muy satisfactorios en el Mecalia Atlético Guardés de A Guarda (Pontevedra), pero como ella misma remarca “tocaba dar un paso adelante”. Ahora disputará asimismo la EHF European League, la principal competición continental.
“Bera Bera acaba de ganar el triplete nacional y significa un reto importante para mí”, indica la veloz jugadora, que se ha destapado en los últimos años por una alta capacidad goleadora. “Solo intento ayudar al equipo”, se justifica.
Felicidades por la convocatoria para la Selección Nacional.
¡Gracias!, fue a finales de junio, siete días concentradas en el Centro de Alto Rendimiento de Sierra Nevada (Granada). Estoy muy contenta en todos los sentidos, con los técnicos, entrenamientos y compañeras, nos ha servido para conocernos un poco más.
«Los siete días concentradas con la Selección en el CAR de Sierra Nevada han sido un aprendizaje continuo»
¿Fue tu primera llamada por parte del técnico, Ambros Martín?
Ya acudí un par de veces a entrenar cuando estaba José Ignacio Prades y Ambros también me llamó el verano pasado. Solo ha sido preparación, todavía no he debutado con la camiseta de la Selección Española absoluta. Espero que pronto.
¿Qué has aprendido de la experiencia?
Muchísimo, ha sido un aprendizaje continuo, un reto más, con entrenamientos duros, exigentes. Enseguida te das cuenta de cómo sube el nivel, conforme vas ascendiendo escalones.
¿El objetivo es consolidarte en el grupo?
Poco a poco, cogiendo el ritmo de ellas, sería todo un sueño. El reto más inmediato es asentarme en mi nuevo club, donde sabemos que el nivel es igualmente alto, y siempre que se pueda venir a la Selección a ayudar en lo que sea.
«Todavía es pronto para soñar con Los Ángeles’2028, pero voy a trabajar para disputar unos Juegos»
¿Cómo fue la conexión con el seleccionador?
Nos pedía a todas un poco lo mismo, exigencia y estar comprometidas con el equipo, así como con nosotras mismas. Se trata de un proyecto de largo recorrido.
A finales de noviembre se disputa el Mundial…
Exacto, en Alemania y Países Bajos. Sería un sueño acudir, como señalé anteriormente: ir a una cita tan importante te marca como jugadora y sería fantástico.
No quiero mirar más allá, sé que dentro de tres años son los Juegos Olímpicos en Los Ángeles, pero eso son palabras mayores, ni me lo planteo aún.
¿Eres ambiciosa en ese sentido?
Por supuesto, voy a trabajar para ello y ojalá llegue, sea en Los Ángeles o en Brisbane, cuatro años más tarde. Pero si no se produce tampoco hay que frustrarse. Trabajamos por objetivos y si no se cumplen, hay que buscar nuevos.
«Además de mi velocidad, en estos últimos años he mejorado las finalizaciones y la defensa, un aspecto clave»
¿Tu gran temporada en el Guardés te condujo a la Selección?
Pienso que sí. He estado muy cómoda estas tres campañas, con compañeras que ayudan. Me hicieron crecer como persona y ser más visible en la pista: se reflejó en el campo, sobre todo en los partidos importantes.
¿Entonces por qué el cambio de club?
Fue una decisión difícil, aunque debía tomarla, era un paso adelante en mi carrera. Bera Bera es un equipo superior, con un mayor presupuesto, y aspira a todo. Quiero jugar ese tipo de torneos, nuevos retos, subir de nivel…
Con el Guardés conseguimos plaza europea para este año, pero va a tener que competir una inferior, por cuestiones económicas. Esta temporada se apreció en la falta de plantilla, por ejemplo.
Debo decir, no obstante, que los propietarios del Mecalia Atlético Guardés se han portado excelentemente conmigo, han facilitado mi salida, remarcaron la gran oportunidad que era y les estoy muy agradecida por estos tres años. Salir así de un club es mucho más reconfortante.
¿Cuáles son tus principales virtudes?
En mi posición, la de extremo, es determinante la velocidad, porque nos pasamos gran parte del partido haciendo esprines. He logrado igualmente buenas finalizaciones y he mejorado en defensa, un aspecto básico en el balonmano, conseguir una bola más que el rival.
¿Quién va a ser tu entrenador en el Bera Bera?
Imanol Álvarez, un técnico al que ya conozco de mi etapa júnior. Tengo muy buen recuerdo de él, siempre te da confianza y buenas indicaciones, clave para tu seguridad como jugadora.
¿Vienes para ser titular o luchar por el puesto?
Todas queremos luchar por la posición, pero también es importante tener una buena relación con la que ocupa el mismo puesto. Nos hará mejores a las dos.
Te hará ilusión jugar la competición europea.
Mucha, aunque primero tenemos que superar una complicada eliminatoria frente al Dijon francés. Si pasamos ya es fase de grupos.