ENTREVISTA> Shami Mendiratta / Artista (Rawalpindi, India Británica, 8-octubre-1939)
Maribel López fue la última propietaria particular de Villa Adelaida, la única casa señorial construida en un tiempo anterior al boom turístico en Santa Pola que sobrevivió a la especulación urbanística. Ella falleció en 2015, y en su testamento cedió este singular edificio al Ayuntamiento con la condición de que fuera convertido en un centro de talento joven dedicado al arte, la ciencia y la literatura denominado Hans-Maribel-Shami.
Tras una década de eterna espera, esta primavera por fin Villa Adelaida ha abierto sus puertas al público. Por el momento se están realizando visitas guiadas en horario de mañanas y tardes para conocer la casa por dentro, incluyendo la exposición artística ‘Shamaribel. Una experiencia mística’ que estará disponible hasta abril de 2026. Los interesados pueden hacer sus reservas de forma gratuita a través del teléfono y WhatsApp 678 35 82 37.
Para celebrar esta tan esperada inauguración, hemos hablado con el autor de las obras expuestas. Se trata del indio Shami Mendiratta… el viudo de Maribel.
«Esta villa debe ser un centro vivo, y no simplemente un museo para recordar a los muertos»
Por fin se ha inaugurado Villa Adelaida. ¿Cómo te sientes al ver esta distinguida casa abierta al público?
Me siento bienvenido de nuevo a la casa donde pasé quince años de mi vida junto a mi alma gemela. Esto debe ser un centro, y no un museo. Porque los museos son para recordar gente muerta, y los centros son lugares vivos.
Las personas más importantes en la vida de Maribel, aparte de sus padres, fueron su primer marido el científico Hans Bremermann y este hombre venido de Asia que te habla. De ahí que quisiera ponerle el nombre de ‘Centro Hans-Maribel-Shami’.
¿Qué tipo de actividad quería Maribel que se desarrollara en este centro?
Para Maribel esta casa lo fue todo, como su propio hijo o su padre. En realidad ella no tenía relación con mucha gente en Santa Pola, ya que vivió en Alemania, Estados Unidos y La India donde fue muy feliz. Incluso tuvo de vecino al Dalai Lama y llegaron a enamorarse mutuamente (risas).
El caso es que ella nunca quiso legar Villa Adelaida a nadie, y me pidió que me quedara a cargo para convertirla en lo que yo pretendiera. Para mí es un gran honor, teniendo en cuenta que era su marido y no su hijo. Ella quiso confiar en alguien que ni siquiera es europeo, porque consideraba que debía ser un centro único en España.
Un ejemplo de esto es que convertimos la torre superior en un centro de meditación con una Biblia, un Corán, los Vedas y el libro sagrado del sijismo. Cuatro de las principales religiones del mundo en una misma habitación con una coexistencia pacífica.
«Los murales pintados son lo que hacen de Villa Adelaida una casa única en España»
Varias paredes de la villa están decoradas con murales que tú mismo pintaste. ¿Qué consideras que aportan a todo este conjunto arquitectónico?
Mira, en realidad a lo largo de España existen otras 30.000 casas del perfil de Villa Adelaida… pero solo una es un centro de arte con este tipo de murales en sus paredes y está en Santa Pola. Si le quitas estas pinturas, esta casa solo sería un conjunto de ladrillos.
Además ahora están expuestas temporalmente obras artísticas tuyas como espejos, acrílicos o impresiones digitales sobre lienzos. ¿En qué consiste esta exposición?
Cuando miras estos espejos te ves reflejado a través de mis dibujos. Tu propia personalidad cambia según te reflejes. Esto no es un museo convencional, aquí es el propio espectador el que se convierte en Miguel Ángel, Miró o Picasso porque es quien está creando.
Mi cometido como artista no es poner en tu cabeza lo que debes sentir al ver estas obras, sino más bien que toda persona considere que puede llegar a ser un artista. Y cada vez que vengas, te verás como un hombre diferente. Por eso invito a que venga aquí gente de todas las edades, y se descubran a sí mismos. No quiero decirte lo que representan las pinturas, sino animarte a interactuar con ellas.
«Mis obras son para que cada cual las interprete y se descubra a sí mismo a través de ellas»
Una vez ya abierta al público, ¿cuáles son los siguientes pasos a seguir en Villa Adelaida?
Eso lo tiene que determinar la propia gente. Ellos tienen que entrar aquí, verla y proponer que quieren para este centro. Igual que una madre trae comida del Mercadona a casa, esta villa debe crear cosas que alimenten la creatividad de quienes vengan. En España siempre se piensa en el mañana… cuando es todavía más importante el hoy.
La idea original es que sea un ‘centro de talento joven’. ¿Qué crees que aporta el arte, la ciencia o la literatura a la juventud?
Los padres necesitan educación, solo así los hijos también aprenderán a tenerla. Sin embargo, los padres en general están muy ocupados ganando dinero, mientras que los niños juegan al fútbol en la Glorieta rompiendo los cristales de los comercios o orinan en las calles y playas.
La labor de los políticos es cambiar esta educación, y la manera de empezar es acudiendo a centros como este. Aquí el objetivo principal es hacerte feliz y que disfrutes descubriendo nuevas perspectivas, porque así transmitirás también felicidad a la gente de tu alrededor. Una de las obras expuestas es una antigua televisión que reza un mensaje “Enjoy. You only live once”. Podría ser un buen titular para esta entrevista (risas).