Hoy en día, el acceso a la vivienda se ha convertido en uno de los grandes retos sociales de nuestro tiempo, especialmente para los más jóvenes. Conscientes de esta dificultad, desde el Ayuntamiento de La Nucía se ha puesto en marcha una estrategia que busca dar respuesta a esta necesidad.
La primera acción ya se ha materializado con la incorporación de doce adosados al patrimonio municipal gracias a un convenio urbanístico firmado con la promotora Promontoria Coliseum Real Estate SLU.
Se trata de las primeras Viviendas de Protección Pública (VPP) municipales, un paso significativo en la política de vivienda local y que supone “un alivio para muchos jóvenes nucieros que aspiran a independizarse sin tener que abandonar su municipio”, tal y como ha destacado el alcalde, Bernabé Cano.
Firma con gran valor simbólico
El acto oficial tuvo lugar ante notario y contó con la presencia del alcalde, Bernabé Cano, y de Clara Arcas, gerente de promociones de la empresa promotora. Junto a ellos estuvo también el concejal de Participación Ciudadana, Pepe Cano, en la posterior visita a las viviendas.
Además, el alcalde no ocultó su satisfacción, destacando que el acuerdo responde a una gestión urbanística pensada para beneficiar a la ciudadanía. “Con estas viviendas defendemos la utilidad pública de la promoción y, sobre todo, ayudamos a los jóvenes a acceder a su primera vivienda en La Nucía”, subrayó.
Los inmuebles, en la urbanización La Colina, cuentan con piscina y vistas a la bahía
Pensadas para vivir
Los doce adosados se encuentran en el carrer Serra Grossa, dentro de la urbanización La Colina, un enclave residencial con excelentes comunicaciones y servicios. La promoción cuenta con piscina comunitaria y unas vistas privilegiadas a la bahía que se abre desde Altea hasta Calpe, pasando por Benidorm.
Cada vivienda, con un valor de tasación global cercano a los dos millones de euros, dispone de entre dos y tres habitaciones, dos baños y superficies que oscilan entre los 90 y los 125 metros cuadrados. Además, incorporan jardín privado, plaza de aparcamiento subterránea y trastero, características que los convierten en una opción muy atractiva dentro del mercado de protección pública.
Una medida con impacto social
Más allá de los datos, la importancia de esta cesión radica en el impacto que tendrá en la población joven del municipio. Los precios de la vivienda en la Marina Baixa, especialmente en localidades cercanas a la costa, han dificultado el acceso a la primera vivienda para muchos jóvenes y familias.
El consistorio estudiará ahora cuál es la mejor fórmula para poner estas viviendas a disposición de la ciudadanía. Lo que sí está claro es que estarán dirigidas a los jóvenes de La Nucía, respondiendo a uno de los colectivos más golpeados por la falta de opciones asequibles.
Cada vivienda dispone de entre dos y tres habitaciones, jardín y aparcamiento
Primer paso de un plan más amplio
Bernabé Cano reconoció que estas doce viviendas son solo el inicio de un camino que se pretende consolidar en los próximos años. En esta legislatura, el Ayuntamiento tiene previsto desarrollar un ambicioso plan de doscientas Viviendas de Protección Oficial (VPO).
La hoja de ruta ya está marcada: ampliar la oferta pública de vivienda para facilitar el acceso a quienes más lo necesitan, sin que tengan que buscar alternativas en otros municipios o en mercados privados con precios inalcanzables.
Modelo de gestión urbanística
Este tipo de convenios urbanísticos reflejan cómo la colaboración entre la administración pública y el sector privado puede revertir en beneficios directos para la población. El Ayuntamiento defiende que este acuerdo no solo cumple con la declaración de utilidad pública de la promoción, sino que marca un precedente de cómo gestionar el suelo y las promociones urbanísticas en beneficio de la ciudadanía.
Con la llegada de estas viviendas, junto con los proyectos que están en marcha, sitúan a La Nucía como un municipio que apuesta decididamente por ofrecer oportunidades a sus jóvenes, consolidando así una política pública de vivienda que busca frenar la marcha de nuevas generaciones a otros lugares.
Desde el consistorio se defiende este modelo como ejemplo de gestión urbanística al servicio de la ciudadanía
Oportunidad para quedarse
En un contexto donde la dificultad de emancipación es una realidad en toda España, las iniciativas locales como la de La Nucía cobran un valor especial. No se trata solo de entregar unas llaves, sino de ofrecer a los jóvenes la posibilidad de construir su futuro en su propio pueblo, cerca de sus familias y entorno.
La incorporación de estos doce adosados puede parecer una cifra modesta, pero detrás de cada vivienda habrá una historia de vida: la de quienes consigan dar el paso de independizarse y establecer su hogar en La Nucía. Una apuesta por la permanencia y el arraigo que contribuye también a fortalecer el tejido social y comunitario del municipio.