El titular de Sanidad, Marciano Gómez, ha asistido a la presentación de uno de los dos exoesqueletos infantiles de última generación que ha adquirido la Conselleria, a través de fondos europeos, y que se han incorporado a los hospitales Doctor Peset y La Fe para la rehabilitación de menores con enfermedades raras neuromotoras.
Estos dispositivos están destinados a optimizar el tratamiento en pacientes pediátricos de entre 3 y 14 años con patologías neurológicas como la atrofia muscular espinal (AME) o la parálisis cerebral.
“La sanidad pública valenciana está realizando una firme apuesta por la innovación tecnológica y, en este caso concreto, lo que pretendemos es hacerla accesible al mayor número de niños que, por sus condiciones, no sólo necesitan andar, sino también integrarse, jugar, moverse y sentirse autónomos. Esta es una muestra más de la contribución de los avances tecnológicos a la mejora de los tratamientos y calidad de vida de los ciudadanos”, ha señalado Marciano Gómez.
Estos exoesqueletos infantiles están compuestos por hasta ocho articulaciones activas que imitan el movimiento natural de la cadera, la rodilla y el tobillo, y disponen de modos de funcionamiento automático (cuando realiza el patrón de marcha) y asistido-activo (cuando detecta la intención de movimiento del niño para completarlo).
Se trata de una estructura robótica que abraza las piernas y el tronco del menor y le permite ponerse de pie, dar pasos e interaccionar con el mundo de una forma que antes parecía inalcanzable.
Esta tecnología puede utilizarse en terapias de rehabilitación para mejorar la fuerza muscular, la extensión articular, reducir la espasticidad (músculos agarrotados) y permitir que el niño no sólo camine, sino que participe activamente de su entorno.
El dispositivo presentado en el Hospital Universitario Doctor Peset está patentado por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y ha sido desarrollado por la investigadora española Elena García Armada.
Se trata del primer exoesqueleto pediátrico del mundo y su uso va a beneficiar a más de 80 niños y niñas con atrofia medular espinal y parálisis cerebral infantil que reciben tratamiento en los hospitales La Fe y Doctor Peset.
Múltiples beneficios
La rehabilitación con ayuda de este tipo de tecnología permite una mayor participación de los niños en su tratamiento, al facilitar la repetición de diferentes movimientos, de modo pasivo, asistido o activo. De hecho, según ha indicado el conseller “aporta grandes beneficios ya que va a permitir una rehabilitación más eficiente, con medición objetiva de progresos, al incorporar un sistema de valoración de diferentes rangos motores que facilita la evaluación del progreso de los menores”.
Asimismo, la utilización de este tipo de exoesqueleto ha demostrado en numerosos estudios múltiples beneficios para los pacientes pediátricos, tanto ganancias físicas como es la mejora de la fuerza y la espasticidad, ganancias funcionales para el desarrollo de actividades cotidianas como caminar o comunicarse con los demás, así como psicológicas al aumentar la autoestima y la participación social.
Al mismo tiempo, disponer de esta valiosa herramienta de trabajo va a facilitar también a los dos hospitales públicos valencianos la participación en proyectos de investigación que repercutan en una mejora de la atención a los pacientes.
De hecho, el tratamiento mediante exoesqueletos viene a complementar el arsenal de técnicas utilizadas en la actualidad en la rehabilitación infantil, y permite a los médicos rehabilitadores, ampliar la planificación de los objetivos de tratamiento que se mantendrán personalizados. Su manejo requiere una formación específica y dedicación por parte del equipo de fisioterapeutas encargados de estos niños para alcanzar los nuevos objetivos marcados.
Además del suministro de los exoesqueletos, el contrato incluye la adaptación de los equipos a las instalaciones y formación para el personal de los centros. El acuerdo, formalizado por la Conselleria de Sanitat, contempla la entrega de un exoesqueleto a cada centro hospitalario por un valor total de 459.800 euros. La adquisición se enmarca en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, financiado por la Unión Europea a través del programa NextGenerationEU.
 
								



















