Entrevista > Noelia Godoy García/ Presidenta Huellas Felinas de Utiel (Utiel, 25-septiembre-1984)
Poco más de un año después de constituirse como asociación independiente, Huellas Felinas Utiel continúa la labor de protección animal que sus fundadoras iniciaron hace casi una década. Centradas en el control de las colonias felinas mediante el método CES, el rescate y la adopción, sus responsables luchan a diario contra el abandono y la falta de concienciación, una tarea titánica agravada por la pérdida de su refugio en la dana de 2024.
Aunque Huellas Felinas Utiel es una asociación joven, vuestra labor en el municipio viene de lejos.
Sí, empezamos hace nueve años, pero antes éramos una rama de otra asociación más grande con sede en València. Decidimos crear Huellas Felinas de Utiel para ser autónomas y poder estar aquí, al pie del cañón. Si queríamos tratar temas con el Ayuntamiento u organizar rescates, necesitábamos estar presentes en Utiel y no depender de alguien de fuera.
¿Cuáles son las principales acciones que desarrollan en el día a día?
Nuestra labor principal es el método CES (Captura, Esterilización y Suelta). Localizamos las colonias, capturamos a los gatos, los llevamos a esterilizar a nuestras clínicas colaboradoras, como Monvet o Blasco Ibáñez, y los devolvemos a su entorno. Si en esa colonia encontramos gatos dóciles, que tristemente suelen ser abandonos, intentamos buscarles casas de acogida para darlos en adopción.
El control de la natalidad es clave. ¿Por qué es tan importante la esterilización de las colonias?
Es fundamental. Hay gente que, con buena intención, les pone de comer, pero si no se esteriliza, generas un problema mayor. Nosotras empezamos a esterilizar nuestras colonias hace nueve años y algunas de ellas ya han desaparecido. Al no reproducirse, la colonia se controla y, con el tiempo, acaba desapareciendo de forma natural.
«Este Ayuntamiento parece más concienciado y toman cartas en el asunto»
Para esas capturas, especialmente de gatos más ariscos, ¿qué técnicas utilizan?
Usamos jaulas trampa. Son un sistema seguro en el que no tenemos que intervenir directamente. Se coloca comida en el interior y, cuando el gato pisa una trampilla para alcanzarla, la puerta se cierra automáticamente, permitiéndonos cogerlos sin estrés para ellos ni riesgo para nosotras.
A menudo se enfrentan al abandono de gatos domésticos en esas colonias. ¿Qué supone esto para el animal?
Se piensa que por dejar un gato en una colonia donde hay comida ya está salvado, pero eso es matarlo. Es un error. Los gatos son muy territoriales y no siempre aceptan a nuevos miembros. Además, un animal acostumbrado a una casa no sabe buscarse la vida y sufre muchísimo.
Pese a los años de concienciación, el problema del abandono y la superpoblación persiste. ¿Cuál creen que es la raíz del problema?
La falta de empatía y de educación. Creemos que se debería enseñar en los colegios la responsabilidad que implica tener un ser vivo, crear un compromiso para toda la vida. Aquí vemos muchas excusas: «me mudo y el casero no me deja», «he tenido un hijo y no puedo atenderlo»… Hay que ser coherente con la responsabilidad que se adquiere.
«El gato acostumbrado a una casa no sabe buscarse la vida y sufre muchísimo»
Mencionaba antes de iniciar la entrevista que el Ayuntamiento parece más concienciado. ¿Notan un cambio en la administración?
Sí, por lo menos se han dado cuenta de que dos animales en la calle están bien, pero veintidós son un problema. Si no se esteriliza, las colonias crecen, llegan quejas vecinales y aumentan los atropellos. No sé si es por la nueva ley o por iniciativa propia, pero vemos que ahora, con este nuevo gobierno, sí toman cartas en el asunto.
Son pocas personas al frente de la asociación. ¿Cómo gestionan la enorme carga de trabajo?
Realmente, en Utiel, al pie del cañón en el día a día, somos solo dos personas. Las otras compañeras nos ayudan con las redes sociales o cuando están aquí, pero el grueso del trabajo recae en nosotras. Nos faltan manos y, sobre todo, voluntarios que nos ayuden con tareas como los viajes al veterinario en València.
«Nuestra labor principal es el método CES: Captura, Esterilización y Suelta»
La dana de 2024 supuso un golpe durísimo con la pérdida de su refugio y de muchos animales.
Perdimos el refugio y cuarenta gatos. Fue terrible. Por eso hemos comprado otro terreno en una zona alta, no inundable, donde estamos construyendo un nuevo refugio desde cero. No queremos volver a pasar por aquello. Mientras tanto, dependemos exclusivamente de las casas de acogida, que son muy necesarias.
Ese llamamiento a las casas de acogida es vital, pero ¿también lo es el de la adopción definitiva?
Claro. Animamos a la gente a que adopte y no compre. Un animal recogido te va a querer igual o más que uno de raza. El amor que dan es indiferente a su origen. Adoptando, das una oportunidad a un ser vivo y no colaboras con un negocio que, muchas veces, se basa en la explotación animal.
Llamamiento al voluntariado
A pesar del trabajo de sus fundadoras, Huellas Felinas de Utiel admite que la labor sería inabarcable sin el apoyo de vecinos y voluntarios de Utiel y de la comarca. Con el fin de recibir ayuda de otras personas sensibilizadas con el cuidado animal, la asociación dispone de redes sociales y del teléfono 618831488 abierto a voluntarios.





















