El pasado octubre el Gobierno de España anunció el anteproyecto de la nueva Ley de Vivienda, que si bien aún debe aprobarse en el Congreso ya ha sido reflejada en el borrador de los Presupuestos Generales del Estado de 2022.
En concreto el ejecutivo obligará a “los grandes tenedores”, es decir aquellos que son propietarios de diez o más viviendas, a bajar las demandas de sus alquileres. Igualmente, los pequeños propietarios se verán forzados a congelar el precio, salvo que realicen reformas significativas en cuyo caso podrán incrementarlo hasta un 10%, y recibirán incentivos fiscales para reducirlo.
Este plan también supone un incremento del 150% del IBI en viviendas vacías. Al mismo tiempo se apuesta por aumentar el parque público de alquiler con una reserva del 30% de todas las promociones para vivienda protegida, porcentaje del cual la mitad se dedicará a alquiler social.
Posiciones encontradas
La aplicación de estas medidas dependerá de la decisión de cada comunidad autonómica y aún así solo podría aplicarse en ‘zonas tensionas’, es decir en los municipios donde el alquiler medio haya subido al menos un 5% respecto al IPC en los últimos cinco años y que a su vez supere un 30% de los ingresos medios de las familias.
En principio los ayuntamientos también tendrían la última palabra respecto a si quieren cobrar los incrementos en el IBI. Algunos políticos regionales y municipales, de hecho, ya han mostrado públicamente su rechazo a aplicar esta futura Ley de Vivienda.
“El Ayuntamiento de Alicante no aplicará la subida del 150% sobre el IBI y si nos obliga el Gobierno iremos a los tribunales. Es una subida salvaje y un ataque a la propiedad privada sin precedentes que supone inseguridad jurídica y afectará negativamente al mercado inmobiliario”, declaró el alcalde Luis Barcala.
Sin embargo, el presidente Ximo Puig quiso responder a estas declaraciones de Barcala en una visita realizada a Alicante, mostrándose abierto a acatar esta intervención en los alquileres. “La cuestión de la vivienda es una realidad profundamente injusta con todas las personas, sobre todo con los jóvenes y los que sufren dificultades salariales o de exclusión. Es un derecho constitucional que no se está cumpliendo. Algo habrá que hacer y lo que no sirve es que las administraciones simplemente dejemos pasar este tema” declaró.
El propio grupo parlamentario de UP, a pesar de formar parte de la coalición de Gobierno, ha anunciado que presentará enmiendas a este anteproyecto de Ley en el Congreso junto a otros grupos. Por lo tanto, el texto definitivo aún podría variar.
Altea es la localidad donde más se ha incrementado el precio del alquiler
Provincia de Alicante
Desde este periódico hemos querido realizar un análisis sobre cómo están actualmente los precios del alquiler en nuestra provincia. Los últimos datos oficiales ofrecidos por el Gobierno de España datan de un informe publicado en julio de 2020, pero basado en las rentas de 2018. Por lo tanto, si finalmente se acaba realizando el cálculo de la subida respecto al IPC en los últimos cinco años, se deberá tener en cuenta el periodo 2013-18.
No obstante, el portal inmobiliario Fotocasa.com ha publicado también un estudio propio de alquileres medios por municipios el pasado septiembre, lo cual nos permite no solo conocer datos más actualizados sino también poder compararlos con los precios de 2018 dados por el Gobierno.
Los alquileres han subido en todas las ciudades de la provincia salvo en Alcoy
Datos por municipios
El alquiler medio más elevado de la provincia de Alicante en 2018 radicaba en su capital, hacia 834 euros mensuales, y desde entonces se ha seguido incrementando hasta los 881 euros.
Sin embargo, según Fotocasa, varias localidades de las Marinas Baixa y Alta hoy en día superan a Alicante. En concreto el primer puesto del podio lo ocuparía actualmente Altea con 1.046 euros, seguida de Calpe (999 euros), Jávea (978), Benidorm (906), L’Alfàs del Pi (893) y Denia (867). Destaca pues la alta subida en los precios de alquileres que habría experimentado la costa norte de la provincia, en el caso de Altea hasta de un 64% en tres años.
La tercera zona más cara de la provincia son los alrededores de Alicante ciudad. Especialmente en El Campello con 852 euros y en Sant Joan con 707 euros.
Santa Pola es un poco más asequible con 667 euros, aunque menos que la Vega Baja: Orihuela (613 euros) y Torrevieja (575). Más barato es alquilar en Elche (591), Alcoy (422), Crevillent (411) o Elda (404). La ciudad alcoyana es la única donde los precios incluso han caído desde 2018.
Hace tres años Alicante era la 14ª provincia de España más cara para alquilar y hoy es la octava
Comparación por provincias
Si analizamos otras provincias de España, la nuestra sin duda es de las más costosas. Nuestro alquiler medio es de 768 euros; cifra solo superada por Barcelona (1.243), Madrid (1.224), Baleares (1.165), Málaga (930), Valencia (926), Girona (877) y Sevilla (799).
Somos por tanto la octava provincia con mayores precios de alquileres en 2021, lo cual contrasta con 2018 cuando éramos la decimocuarta del país.
Precios de alquiler
Ciudad | Gobierno (2018) | Fotocasa (2021) | Por m² (2021) |
Alicante | 834 € | 881 € | 9 € |
L’Alfàs del Pi | 738 € | 893 € | 11 € |
Benidorm | 710 € | 906 € | 10 € |
Altea | 639 € | 1.046 € | 9 € |
Santa Pola | 500 € | 667 € | 8 € |
Elche | 500 € | 591 € | 6 € |
Orihuela | 450 € | 613 € | 7 € |
Alcoy | 445 € | 422 € | 6 € |
Torrevieja | 430 € | 575 € | 7 € |
Elda | 375 € | 404 € | 5 € |
Crevillent | 300 € | 411 € | 5 € |
Provincia | 534 € | 768 € | 8 € |