El Ayuntamiento de València, a través de la Concejalía de Salud, ha dictado en las últimas tres semanas ocho órdenes de limpieza y control de plagas de propiedades y solares en la Saïdia, Extramurs, Malva-rosa o Carpesa. En todos los casos se advierte a los propietarios de que disponen de un plazo entre 15 días y un mes para asumir su deber de mantener la salubridad de sus propiedades. De no hacerlo, los técnicos municipales del departamento de Salud, auxiliados en su caso por agentes de Bomberos o Policía Local, acometerán las tareas, estimarán el coste de los trabajos y, finalmente, se les hará llegar la factura correspondiente.
Los casos son varios y responden a varias circunstancias, según ha indicado el concejal de Salud, Emiliano García. En el caso de pisos en edificios residenciales, por ejemplo, suelen ser los vecinos los que denuncian malos olores o la presencia de plagas de ratas o de insectos. En el caso de las viviendas vacías, el departamento de Salud solicita la autorización judicial para entrar con ayuda de agentes de Bomberos y Policía Local para acometer los trabajos necesarios para limpieza.
En el barrio de la Malva-rosa, se ha asumido la limpieza de un solar en la calle Pare Antón Martín si el propietario del mismo no lo hace antes. En este caso fueron los vecinos los que denunciaron la acumulación de basuras y enseres en un solar que causa problemas de convivencia.
En varios casos son los propios técnicos municipales los que actúan de oficio al comprobar la presencia de ratas o cualquier otra plaga. Es el caso en la calle Mateu Escrivà de tres solares consecutivos en estado de abandono donde el departamento de Salud ejecutará los trabajos y pasará la factura.
En Carpesa, la plaza número 8, un terreno entre Aldaia y el Barrio de Cristo; solares en la avenida Portugal, en Marxalenes; el antiguo Colegio Europa, en la calle Sèneca, en el barrio de Albors; o un bajo en la calle Goya, en Nou Moles, son otros casos en el cuales el Ayuntamiento actúa de oficio.
En casi todos los casos, las resoluciones que firma el concejal Emiliano García advierten de que el incumplimiento del deber de mantener la salubridad de edificios o solares puede llevar aparejada una sanción que oscila entre los 3.000 y los 60.000 euros, más allá del anuncio de que los técnicos municipales estimarán el coste de los servicios que asumen de manera subsidiaria para trasladar la factura los propietarios que incumplen sus obligaciones respecto a sus vecinos.