Una Navidad internacional y de respeto entre países y culturas que pueden ser distintas, pero que saben convivir con respeto y cordialidad frente a estos tiempos convulsos. Esto fue lo que transmitieron ayer los alumnos del colegio ELIS Villamartín durante la interpretación de su concierto navideño anual que tuvo lugar en La Zenia Boulevard.
Alumnos procedentes de Inglaterra, Irlanda, España, Gales o Ucrania expresaron los valores con los que conviven día a día en el centro, al que diariamente asisten alumnos de más de 35 nacionalidades, durante una sesión de 40 minutos una hora en la que dieron voz a una decena amplio repertorio de canciones navideñas. No lo hicieron solos, pues estuvieron acompañados de un coro formado por profesores, entre los que se encontraba al piano el director del centro, Simon Roberts. De hecho, la preparación de la actuación ha servicio para los pupilos, de unos 13, de doce y trece años de edad, estudien la lengua anglosajona a la vez que ensayaban con diferentes melodías. Villancicos de ‘A Christmas Carol’ o conocidos temas como ‘Silent Night’ fueron algunas de las canciones interpretadas, en un inglés clásico y en momentos hasta complejo que ayuda a estos alumnos a ampliar su comprensión literaria. Para sorpresa de los asistentes, el repertorio contó incluso con piezas recitadas en su latín original.
“Cantar y tocar, especialmente en esta época del año, es muy importante. No solo nos unimos, hacemos música, aprendemos canciones de diferentes épocas e idiomas, sino que la música es fantástica para nuestro bienestar y salud emocional. Se genera un sentido de comunidad y felicidad que sentimos estando todos juntos. Ha sido un placer ver a tantos estudiantes participar en el aprendizaje de nueva música que, esperamos, valorarán por siempre”, asegura al teclado la profesora Karen Blagbrough, profesora de Música y coordinadora de esta iniciativa que, reconoce, decidió aprender a tocar el ukelele para acompañar a sus alumnos en parte de la interpretación.
A la cita acudieron no sólo familiares y amigos, sino también curiosos que estaban realizando sus compras navideñas. Una cita anual sólo interrumpida por la pandemia que ya se ha convertido en tradición en este frecuentado centro comercial, donde el público acompaña a los cantantes en estos conocidos villancicos que ya sirven como preámbulo inmediato a las fiestas de Navidad.