Los responsables de las obras de la Avenida de la Constitución tienen previsto acabar las obras de la intersección entre las calles José María Soler y Cervantes con la Avenida, que ha supuesto renovar por completo uno de los puntos más sensibles de la red subterránea donde confluyen las aguas de saneamiento y pluviales de la zona alta de la ciudad con el resto de la urbe, dentro del proyecto integral de renovación del entramado de esta zona.
A partir del martes, según la previsión del equipo técnico responsable de la obra, se podrá circular en vehículo por esta intersección lo que supone que se podrá acceder a la Avenida de la Constitución procedente de la calle Cervantes, o acceder directamente a José María Soler si se circula por la Avenida en sentido hacia Salesianos.
El concejal de Urbanismo, Javier Martínez, ha señalado la importancia de este punto de la obra dentro del entramado de la red, puesto que aquí confluyen las aguas pluviales procedentes de la zona alta del municipio, que ahora dispondrá de una sistema más moderno y operativo para su retención y evacuación. Al mismo tiempo, la conexión de las aguas de saneamiento en esta intersección permitirá solventar problemas antiguos en esta red que requería su sustitución por el estado en que se encontraba.