El Ayuntamiento de Orihuela va a implantar un nuevo sistema de seguridad en las ocho puertas que limitan el acceso nocturno al parque Severo Ochoa para evitar que ocurran sucesos como el vivido la pasada noche del viernes 21 de abril cuando se cayó una de las puertas de entrada.
Este sistema consiste en la colocación de unos cables de acero para que las puertas queden suspendidas en caso de descolgarse, un método que se ha estudiado y decidido como el óptimo para este tipo de cerramientos de hierro colado que aporta más seguridad para evitar así situaciones que se han repetido en los últimos años a causa, tanto del exceso de oxidación y corrosión, como de actos vandálicos o el mal uso.
Precisamente, ayer se volvió a instalar la puerta de acceso, que se cayó el viernes pasado, tras reforzar su estructura, cambiar el tope de seguridad y revisar el carril por el que se desplaza.
Asimismo, desde la Concejalía de Infraestructuras, procederá a revisar el estado de cada una de las bisagras del resto de cerramientos con los que cuenta el parque y de puertas de las instalaciones de este tipo que existen en la ciudad.