A poco más de una hora de València ciudad, la siempre apacible localidad de Montanejos (Castellón) nos espera para realizar el llamado Sendero Familiar, una ruta circular de unos cuatro kilómetros y medio que transcurre por montañas. El camino, perfectamente señalizado, es ideal para realizarlo con niños a partir de cinco años.
Son muchas las actividades -senderismo, escalada o rafting- que se pueden hacer en esta ruta, con pequeños desvíos para tomar (algunos sumamente atractivos). Por ello recomendamos completarla con calma, más de tres horas, disfrutando de lo que naturaleza nos ofrece: caudalosos ríos, altas montañas, frondosos bosques…
Sin duda, y aunque Montanejos es conocido por su excelente zona de baños termales, este sencillo sendero por la Sierra de Espadà no defraudará a ningún miembro de la familia.
Su inicio
La vía comienza en el aparcamiento de la Fuente de los Baños, dirección Montanejos, por un amplio paseo junto a la carretera, hasta encontrar una senda a la derecha. Este breve repecho nos llevará a un nuevo desvío, a la izquierda, que se dirige a Los Castillejos.
Debemos continuar, no obstante, por el de la derecha, siguiendo las indicaciones del Sendero Familiar, ascendiendo de un modo continuo y moderado por una tupida pinada en la que diversos paneles -estratégicamente situados- informan de las peculiaridades de su flora y fauna.
Al llegar a una señal que marca ‘Cueva Negra’ les aconsejamos tomarla, para descubrir una cavidad preciosa en la propia roca, habitada ya en el Neolítico. En ella los menores se imaginarán que allí vivieron osos, lobos e incluso dragones.
Es una ruta sencilla, perfecta para menores, que transcurre por bellas montañas y junto al río
Cueva Negra
Dentro de la cavidad apreciamos que se trata de unas de las más grandes de la Comunitat Valenciana: un lugar perfecto para hacer un alto en el camino y descubrir su enorme y profunda sala principal, uno de los mayores encantos de la zona. Un espacio donde explorar, escalar, imaginar…
Dice la tradición, de hecho, que la Cueva Negra estaba conectada con otra ubicada en el cercano barranco de Maimona, un pasadizo secreto que ha sido buscado durante años y años por espeleólogos, sin éxito.
La entrada de la cueva está en alto y, nada más acceder, se desciende con cuidado hasta la mencionada sala. Los niños, debido a la pendiente y las piedras sueltas, es mejor que vayan cogidos de la mano de adultos.
Dicen que la Cueva Negra, habitada en el Neolítico, estaba conectada con el barranco de Maimona
Estrecho de Chillapájaros
Regresamos para proseguir una senda que se va adentrando en el bosque, con la vista puesta en la muela rocosa del Morrón de Campos, en muchas ocasiones coronado por el majestuoso vuelo de los buitres leonados.
Bajamos y, tras hacer unos pasos por la carretera, la ruta familiar sigue pasando el túnel, cruzando la presa de Cirat, que contiene las aguas del río Mijares.
A mano izquierda, un nuevo desvío de unos 350 metros nos conduce al estrecho de Chillapájaros, un espectacular y breve recorrido en el que, con ayuda de los paneles didácticos, sabremos la historia de este imponente desfiladero calizo.
El Abrigo de Rufino, otra cueva más pequeña, fue empleada como refugio durante la Guerra Civil
El Abrigo de Rufino
De regreso a la presa, ahora en dirección sur y paralelos a una acequia, avanzamos cómodamente hasta el desvío del Abrigo de Rufino, otra cueva -mucho más pequeña- que fue empleada durante años como corral y, más tarde, como escondite durante la Guerra Civil. La panorámica desde este punto es impresionante.
Estamos ya cerca del final: en el camino principal descendemos hacia un paseo junto a la vera del río. Giramos a la derecha y en apenas cien metros hallamos la Fuente de los Baños, el manantial de Montanejos, del que emana agua todo el año a una temperatura constante de veinticinco grados.
Junto a la fuente, merenderos y zona de juegos infantiles. Si el tiempo acompaña, especialmente en los meses de más calor, el ambiente invita a un chapuzón, un excelente final a una jornada repleta de alicientes.
Montanejos
Municipio de la comarca del Alto Mijares, una visita a Montanejos es sinónimo de tener que elegir entre un sinfín de experiencias, como recorrer las calles de su casco antiguo y, sobre todo, el castillo, antigua alquería o asentamiento árabe del que aún se puede identificar la muralla, dos torres y un aljibe.
En los alrededores otros puntos de interés, véase el acueducto conocido como Puente de San José o el molino harinero del siglo XIX. También nuevas rutas de senderismo que nos conectan con el singular paisaje que ha configurado el río.
Asimismo, el famoso Chorro de Montanejos, un aliviadero del embalse de Arenós muy fotografiado por la fuerza con la que el agua sale despedida, y zonas de escalada como la Pared de los Miradores.