Entrevista > Iñaki Pérez Rico/ Concejal de Patrimonio Histórico de Elda (Elda, 19-agosto-1982)
Una correcta rehabilitación del castillo y que posteriormente sea visitable es, desde hace años, una demanda por parte de nuestros ciudadanos. Se trata, de hecho, de uno de los mayores retos del concejal de Patrimonio Histórico de Elda, Iñaki Pérez Rico.
“Hemos visto cómo poblaciones vecinas han recuperado muy bien los restos de su pasado”, argumenta, antes de apuntar que nosotros tenemos también una historia muy importante que debe ser conocida, creando además un sentimiento de pertenencia.
Optimizar el castillo es regresar a los orígenes de Elda, dejando de lado “esa modernidad que en ocasiones ha sido tan nociva para nuestro municipio”. Queremos asimismo que Pérez Rico nos cuente cuándo se podrá visitar y las fases más relevantes del llamado Plan Director.
«El castillo pasó una situación muy complicada, en estado ruinoso hasta los años ochenta del siglo XX»
¿Cuál es la situación actual del castillo?
El castillo, como sabemos, es una parte patrimonial de Elda, declarado uno de nuestros Bienes de Interés Cultural (BIC). Ha tenido una situación complicada a lo largo del tiempo, en estado ruinoso incluso, muy degradado, desde el siglo XIX hasta mediados de los años ochenta del pasado centenario.
A partir de entonces se fueron haciendo intervenciones -e investigaciones arqueológicas-, pero un poco descontextualizadas unas de las otras. En 2020 se hizo un Plan Director, que nos marcó la ruta a seguir para recuperar el castillo.
¿El objetivo es que sea visitable?
Esa es la idea de las obras que estamos llevando a cabo actualmente. Tras rehabilitar el antemural, con un arco de entrada, y la torre número diez, la siguiente parte a realizar sería la barbacana, además de la integración del patio de armas.
De esta forma grupos escolares podrán pasar por la barbacana, subir, pasar el antemural, seguir junto a la Torre Circular y llegar a la puerta de entrada, entrando hasta el propio patio.
¿Qué verá el visitante?
Fundamentalmente la inmensidad del propio monumento y la importancia a la hora de recuperarlo.
Siempre fue una demanda de la población.
Históricamente ha habido un debate en nuestra ciudad entre la tradición y la modernidad, que conllevaba la destrucción de mucha parte del patrimonio.
Las generaciones actuales ven la necesidad de recoger las raíces de Elda y el castillo se podría decir que es el corazón, el inicio o germen de nuestra localidad, que fue creciendo después de que los musulmanes lo ubicasen en esa loma. Queremos no solo recuperar la fortaleza, sino también el entramado de casas y calles por las que paseaban nuestros abuelos.
«Fundamentalmente, el visitante podrá apreciar la inmensidad y la importancia del propio monumento»
¿Con qué presupuesto y subvenciones contáis?
Con las actuales de la barbacana, que tienen unos seis meses de duración y permitirán que el castillo sea visitable. Tiene un presupuesto de 212.000 euros, abonados íntegramente por el propio Ayuntamiento de Elda.
Sí que estamos pendientes de una subvención por parte del Ministerio de Cultura de tres millones de euros para la restauración completa de la fortaleza, todo su entorno y el paraje del río Vinalopó. También se tiene previsto reforzar las partes por donde pasaba la Vía Augusta.
¿Cuál será la siguiente fase?
La llamada Torre Blanca (cuadrada), junto a la Torre Circular, es el siguiente objetivo, tal y como indica el Plan Director. A espaldas de eso están todas las estancias condales, en las que vivieron los Condes de Elda.
Lo que se pretende es recuperar esa zona y la torre cuadrada, pues como se ve en el escudo de Elda, el castillo contaba con dos torres circulares.
En esa torre, ¿qué se va a hacer?
Un pequeño alzado circular, para que se sepa que es la segunda torre circular y, al mismo tiempo, recuperar la fachada que da hacia la ciudad y las estancias traseras, que nos permitirán comprender mejor cómo era la vida en el propio castillo.
¿Se sabe cuándo estarán todas las obras finalizadas?
El mencionado Plan Director tiene diferentes fases, porque la recuperación del castillo es costosa y está prevista en un plazo medio-largo.
Lo que tenemos que conseguir es, año tras año, ir completando esas fases. Por ejemplo, las obras de la barbacana tenían previsto su inicio en noviembre y no se pudo hasta un mes más tarde. También se debe cimentar la propia colina, que es sumamente arenisca y puede perder su estructura.
«Es el corazón, el inicio o germen de nuestra localidad, que fue creciendo alrededor de la fortaleza»
¿Qué os dicen los ciudadanos?
Están muy satisfechos. De hecho, este mismo año hicimos una exposición sobre la historia del castillo de Elda, que todavía se puede visitar en el Museo Arqueológico.
Siempre hay una respuesta muy buena por parte de la ciudadanía, porque sabe que se trata de un monumento perdido que se puede recuperar.
¿Notas ilusión?
Sí, mucho, aunque también cierto escepticismo debido a que muchas de las actuaciones que se hicieron en los años ochenta y noventa fueron poco científicas. Hubo incluso burlas y la sensación de que no se estaban haciendo las cosas bien.
El de ahora es un plan mucho más serio, que estamos intentando explicar a la ciudadanía; queremos abrir el castillo, sobre todo para que vean lo que se ha hecho y lo que podemos llegar a tener.
Además puede tener muchos usos.
Contamos con un espacio en el centro del castillo, el patio de armas, que es una planicie de unos mil metros cuadrados que puede servir como un lugar de encuentro o para llevar a cabo exposiciones o conciertos.
La idea es que el castillo sea un elemento vivo dentro de la ciudad, integrándolo dentro de las fiestas.
¿El castillo como algo propio?
Exactamente; que no pase lo de antaño en el casco antiguo, donde la gente vivía a sus espaldas porque era un lugar de degradación.
Queremos sentirnos orgullosos de nuestro castillo y recuperarlo, tanto a él como a su entorno, como decía.
«Estamos pendientes de una subvención del Ministerio de Cultura de tres millones para la restauración completa»
¿Se llevan años rehabilitándolo?
Así es, bastantes. Las primeras reformas ya más serias fueron sobre 2004 o 2005, con el antemural. Se hizo asimismo una parte de cemento, que daba a la avenida Nueva Hamburgo, para que se asentara la colina.
A partir de 2015 se trabajó con más intensidad y ahora, con el Plan Director, tenemos ya los pasos exactos a seguir, consensuados con la Generalitat y el ministerio. Vamos a darle el impulso definitivo para que el castillo sea un elemento de máximo orgullo para los eldenses.
¿Las calles que rodean el monumento también se van a mejorar?
Sí, en abril del pasado año el conseller de Vivienda, Héctor Illueca, llegó a un acuerdo con el Ayuntamiento de Elda para que se recuperaran con la tipología antigua las calles cercanas al castillo.
De este modo volverá a ser un barrio con vida y atractivo para que se emancipen allí muchos de nuestros jóvenes. Anhelamos, sin duda, que este barrio sea de referencia, en el que nos sintamos cómodos para pasear y disfrutar del entramado original de nuestra ciudad.
¿Este acuerdo o protocolo sigue vigente?
En principio sí, pese al cambio de gobierno. Pensamos que se trata de un proyecto perfectamente realizable y se podría hacer con la subvención que comentaba del ministerio.
Aparte de los colegios, ¿se han hecho ya visitas?
Sí, en el año Coloma, con la visita de más de 3.500 personas pese al poco tiempo que hubo. Se produjo una respuesta muy positiva por parte de los ciudadanos.
Cuando no hay obras, sí se han hecho pequeñas visitas, para grados universitarios de Historia, Turismo o Arquitectura.
«En el patio de armas, una enorme planicie, se podrán celebrar exposiciones o servir de escenario»
¿La tercera fase será el alzado de la Torre Circular?
Será en concreto un pequeño alzado, sin llegar al que tenía. También la pared blanca, la que queda en la fachada sur del castillo; y la parte de atrás, compuesta por la capilla y las estancias condales.
La valoración de esta fase es de unos 400.000 euros, y se licitará al finalizar las obras actuales.
¿Cómo está el interior del castillo?
Es una planicie, sin mucho más, aparte de las mencionadas estancias. Lo principal que se podrá visitar será el centro del patio de armas.
¿Volverá a ser un referente en la Ruta de los Castillos del Vinalopó?
Por supuesto. Tenemos unos elementos patrimoniales de gran valor en todo el valle del Vinalopó, resultado de la pérdida de terrenos por parte de los musulmanes ante el avance cristiano.
Los propios musulmanes crearon una línea defensiva con esas fortificaciones, a las que ya es hora de que Elda se integre.
¿Alguna cosa que añadir?
Además del castillo, recordemos que tenemos la Torreta, otro Bien de Interés Cultural que separó en tiempos medievales los reinos de Castilla y Aragón.
Estos castillos y monumentos serán una alternativa de ocio cultural al que ya conocemos del litoral alicantino.