Entrevista > Francesc Gascó / Paleontólogo y científico (Llocnou de la Corona, València, 29-febrero-1984)
Francesc Gascó es mucho más que un paleontólogo o científico. Con él se puede hablar casi de todo, gracias a una amplia formación y vocación tanto en el campo como en la investigación, que le ha llevado a participar, entre otros muchos proyectos, en numerosas excavaciones, especialmente en la provincia de Teruel.
Sin embargo, Paco -como prefiere que le llamen- aboga por la exploración de los yacimientos de nuestra tierra, en la Comunitat Valenciana, aunque para ello son precisas más subvenciones y ayudas. De sus últimos trabajos destacamos unas exploraciones en Níger, en África.
También docente y divulgador, es el director científico del pequeño museo municipal de Benagéber y posee un más que interesante canal de YouTube, “la mayor de mis ventanas al exterior”, donde se hace denominar Pakozoico.
«El trabajo que más me gusta es el de campo, excavando o haciendo prospecciones»
¿Cuál es tu amplísima formación?
Soy paleontólogo, aunque para dedicarme a ello estudié Ciencias Biológicas en la Universidad de València, en Burjassot, y posteriormente hice un doctorado en Paleontología, para el que tuve que desplazarme a Madrid.
A continuación, realicé la investigación para mi tesis doctoral en la Fundación Dinópolis de Teruel, siendo alumno de la Autónoma de Madrid.
Has participado también en numerosas excavaciones.
Exacto. Empecé a excavar, siendo alumno de Biológicas, en Venta del Moro -comarca de Utiel-Requena- en un yacimiento que gestionaba nuestro profesor de entonces.
Fue mi primer contacto con las excavaciones, en un yacimiento del Mioceno, la época de los mamíferos.
¿Cuándo excavas en las de dinosaurios?
Poco después, sobre todo en Alpuente, Los Serranos, y Teruel, provincia que cuenta con infinidad de yacimientos.
Desde entonces he seguido excavando cada año, por ejemplo, en Guadalajara o Ciudad Real, en yacimientos del Pleistoceno, una época más cercana a nosotros, con presencia humana.
¿Qué parte de la investigación disfrutas más?
Realmente toda, siempre que puedo llevarla a cabo; porque también he estado involucrado en temas de divulgación o docencia.
Todo ello ha hecho que la investigación quede en segundo plano, pese a que es lo que más disfruto. Dentro de ella, la que más me apasiona es la que se hace en el campo, ya sea excavando un yacimiento o haciendo prospecciones, la búsqueda o exploraciones de nuevos lugares.
«Se han descubierto todo tipo de fósiles en Teruel, porque afloran las rocas adecuadas»
¿Por qué hay tantos yacimientos en Teruel?
Debido a que en esa provincia se descubrió el primer dinosaurio español, en 1987. Desde entonces han proseguido los trabajos de investigación allí por parte de paleontólogos de la Universidad de Zaragoza y de la propia Fundación Dinópolis.
En Teruel se han hallado muchas especies nuevas, no únicamente de dinosaurios, sino todo tipo de fósiles, debido a que afloran las rocas adecuadas. Dinópolis es un parque de ocio cultural, enfocado sobre todo a las familias, y también -como indicaba- una fundación científica y un museo de paleontología.
Pero en València también se han descubierto fósiles.
Por supuesto, en la provincia de València contamos con extensiones enormes de este tipo de rocas y unos yacimientos muy importantes.
Lo único que falta es un poco de apoyo por parte de la Administración, porque nosotros podríamos igualmente tener un proyecto muy potente, tanto como el de Teruel.
A raíz de tu trabajo has hecho artículos de investigación.
Es la manera de funcionar para cualquier ciencia, porque nada existe si no se publica. Durante todo el tiempo que empleé para hacer mi tesis doctoral colaboré con artículos científicos, que han sido parte de mi trabajo.
¿Ahora mismo en qué investigaciones estás?
Me dedico principalmente a la docencia y divulgación, siendo profesor online a tiempo parcial de la Universidad Isabel I y trabajando en la creación de contenidos museísticos, siempre relacionados con la paleontología.
Sí es verdad que sigo vinculado a la investigación; soy colaborador de la UNED (Grupo de Biología Evolutiva) y siempre que puedo les echo una mano.
«Ahora soy profesor online de la Universidad Isabel I y trabajo en contenidos museísticos»
Realmente no has parado.
En los últimos años he colaborado asimismo con el grupo de trabajo Primeros Pobladores del Alto Guadiana, paleontólogos y arqueólogos que investigan yacimientos del Pleistoceno en busca de los primeros habitantes de La Mancha y las faunas, con las que convivían y se alimentaban.
Finalmente estoy muy involucrado en el estudio de los dinosaurios que habitaron la comarca de Los Serranos, especialmente el yacimiento de Benagéber. De hecho, después de diseñar la sala de paleontología de su museo municipal, ahora soy el subdirector científico.
¿Cómo es la propia Benagéber?
Es una localidad pequeña, así como su museo, pero una versión nueva, porque el antiguo Benagéber quedó sepultado bajo las aguas del pantano que lleva su nombre.
El museo relata parte de la historia del pueblo y cuenta con una pequeña sala de paleontología, como dije. Estoy vinculado a la investigación de los fósiles que allí se exhiben.
¿En YouTube recibes el nombre de Pakozoico?
Nació como un blog escrito, de los que había cuando estudiaba, y posteriormente nos reunimos unos colegas paleontólogos para grabarnos hablando de este tema, que tanto nos apasiona, para intentar divulgarlo.
Se creó de este modo nuestro podcast ‘Dinomasters’, que llevamos hacia adelante durante mucho tiempo, aunque es verdad que las reuniones cada vez son menos.
¿Pero Pakozoico sigue vivo?
Sí, es un canal de YouTube que partió de ese podcast y continúa vigente, siendo mi mayor ventana al mundo para que se vea mi labor.
Elaboro contenidos semanalmente, compartiéndolos con la gente, y es una parte de la retroalimentación de todos los encargos y trabajos que me llegan.
«Subo contenidos y los comparto semanalmente en Pakozoico, mi canal de YouTube»
¿Qué es Scenio?
Una plataforma de divulgación científica online, para agrupar a todos los que crean contenidos de esta manera en diferentes formatos.
Se creó, fundamentalmente, porque la unión hace la fuerza y hay creadores muy pequeños que pasan quizás desapercibidos por las plataformas, pero no con el apoyo mutuo de Scenio. Es muy gratificante y suceden colaboraciones muy interesantes.
¿Cuál ha sido tu papel en diversos libros publicados?
Las propuestas me han llegado; nunca han salido de mí, porque apenas tengo tiempo. Debido a mi labor de divulgación, ha habido editoriales interesadas en trabajar conmigo y, como buen autónomo, no puedes decir que no a un buen encargo.
Me he sentido con el deber y la obligación de sacarlas todas adelante. De igual modo, soy un gran lector, tanto de libros científicos como más narrativos.
Eres, además, uno de los científicos más populares del colectivo LGTBI.
Aunque otros muchos científicos son más activistas, desde el punto de vista del colectivo. Siempre lo he llevado como una parte de mí, con suma naturalidad, y muchos se han acercado a mí precisamente por mi manera de divulgar y dar a conocer mi trabajo.
Para mí otros compañeros son referentes, como es el caso de Sassy Science, científica que divulga ciencia desde el mundo drag.
¿Seguís notando que hay cierto estigmatismo todavía?
Sí. Muchas veces vivimos en burbujitas, rodeados en un entorno seguro -donde se trabaja, opina o ve el mundo como nosotros-, pero al salir te encuentras con la realidad, que hay mucho trabajo por hacer.
Es muy importante que haya mucha diversidad, mucha variedad.
«La ciencia, la paleontología y la propia vida precisan de diversidad y personas diferentes»
¿Piensas que España sigue siendo machista?
Me sorprenden, en ocasiones, comentarios que llegan a través del canal de YouTube, porque basta que hagas una mínima mención o reivindicación para que te giren la cara o me digan que no estoy haciendo bien mi trabajo.
Para mí es justo lo contrario; necesitamos que entiendan que la ciencia, la paleontología o la cultura y la vida en general precisan de diversidad y gente muy diferente. Visibilizar que hay personas diversas en todos los ámbitos es determinante.
¿Cuándo y por qué te lanzas a hacer crossfit?
Hace algo más de diez años. Cambié de un modo radical mi cuerpo y mi estilo de vida, puesto que anteriormente no había sido una persona deportista. En mi familia nunca hubo tradición por practicar deportes a nivel extraescolar.
Sin embargo, conforme crecía me fue picando la curiosidad por algunos deportes, como es el caso del rugby, del que me enamoré perdidamente. Después empecé a indagar en lo que es el entrenamiento de fuerza y decidí probar el crossfit en mi tiempo libre.
¿Tanto atrapa este deporte?
Le cogí mucho gusto al crossfit en cuanto lo puse en práctica; me lo pasaba y me lo paso bien, disfrutando del deporte, de los entrenamientos y de una alimentación sana, para que cuerpo y mente funcionen bien.
Descubrí el deporte que me hacía sentir bien.
El rugby, que antes mencionaste, tiene muchos valores.
Siempre digo que el rugby y el crossfit tienen muchas cosas en común, recordándome uno al otro. Compites con el otro equipo, acabas con el ojo morado, pero en el ‘tercer tiempo’ nos tomamos una cerveza juntos y charlamos coloquialmente.
«Pronto le cogí mucho gusto a practicar crossfit; me lo pasaba bien y lo sigo haciendo»
¿Has llegado a competir?
Al comprobar que en el crossfit encontraba esa competitividad sana y compañerismo, me vine bastante arriba y participé en algunas pruebas. Las disfruté mucho, llegando a mi máximo.
Es cierto que es un deporte joven y el nivel de competición ha crecido mucho en los últimos años. Lo bueno del crossfit es que compites contigo mismo, no con los compañeros, pese a que a veces es inevitable picarte con ellos.
¿Producto de este entusiasmo fue el libro ‘¡No hay excusas!’?
Sí, el primero que se me encargó. Fue una experiencia totalmente nueva para mí, que no estaba acostumbrado a escribir. Resultó ser mi prueba de fuego.
¿En qué más estás metido?
El año pasado participé en una expedición con varias excavaciones en Níger, África. Fueron tres meses en pleno desierto y ahora nos queda la parte de investigar todo aquello que encontramos.
Asimismo, desde hace un mes he comenzado a colaborar en el programa de À Punt ‘La Via Verda’. Soy el paleontólogo del espacio y todas las semanas -los lunes- explico alguna curiosidad paleontológica o biológica de cosas cotidianas, o hablo del patrimonio valenciano. Es mi primera experiencia televisiva como colaborador.
Pero no es tu primera vez en televisión.
No, ya había aparecido, por el interés suscitado al publicar algún libro. También estoy acostumbrado a grabarme en casa para mi canal o hablar en radio y en público, y me he ido curtiendo con los años en ese sentido.