El pasado viernes por la tarde eran presentados los carteles que durante las Fiestas Patronales de Altea, cuyos días centrales tendrán lugar del 20 al 24 de septiembre, serán la imagen de la “Federació de Moros i Cristians Sant Blai” y la Comisión de Fiestas del Santísimo Cristo del Sagrario. Obras que en la presente edición han sido realizadas por Salvador Gomis y Joan Llobell, respectivamente.
La presentación de dichos carteles tenía lugar en la Plaça de l’Aigua i contó con numeroso público procedente del mundo festero alteano; así como autoridades y familiares de los artistas y cargos festeros.
En el transcurso de la cita los propios artistas explicaron a los presentes la motivación y el contenido de sus obras. Joan Llobell, autor del cartel del Cristo, indicaba, “el arte se conecta con nuestra dimensión supra personal o divina. El arte es una vía para experimentar el sentimiento oceánico de unidad con el cosmos, que es una constante temática en mi obra desde hace muchos años”. Y añadía, “podríamos afirmar que todos somos uno, que formamos parte de una unidad, en la que todo está interrelacionado, en la que todo está interconectado dentro de una visión holística del mundo y de la realidad. Esta cuestión de reconexión con la realidad se expresa visualmente en esta obra mía con un aura de filamentos dorados que envuelven el rostro de la figura de Jesús, que no deja de ser una figura de carácter universal”.
Por su parte, Salvador Gomis, autor del cartel del Moros y Cristianos, recuerda en su obra unas fechas que considera importantes, a colación del 45 aniversario de las fiestas de Moros y Cristianos en Altea y a obra descubierta explicaba, “la silueta de nuestro pueblo visto desde el mar, una bahía acogedora de culturas a lo largo de los siglos. Al pie la misma, la fecha de la última carta de población, el 11 de enero de 1617. A la derecha, el 10 de agosto de 1705, he intentado recrear el desembarco de las tropas del Archiduque Carlos de Austria, para hacer agua en el Río Algar, en el marco de la Guerra de Sucesión. Abajo de los galeones el escudo de Altea, reconocimiento que el archiduque hizo a la inestimable ayuda de los alteanos. El contorno del escudo da paso a un fondo de corcho, con él he querido reflejar el paso del tiempo, el equilibrio de la fiesta; pasado y presente, con el nombre de las ‘filaes’ actuales y el futuro, sabiendo quiénes somos y dónde querer llegar. El pie de la ventana, donde meteríamos las piedras más grandes de una torre, lo he dedicado a la fiesta, un cimiento sustentado por cientos de festeros, que han aportado la seguridad y la continuidad a día de hoy. Abajo a la izquierda, la silueta de nuestro patrón San Blas en procesión, el gran desconocido hasta 1979. A la derecha una ‘filà’ de Moros recuerda el origen de ese primer año de moros sin cristianos. La ventana que rodea este tipo de efemérides es la silueta de la actual torre de Bellaguarda, vigía y origen de nuestra Altea desde el siglo XIII. En la parte central del cartel dos siluetas, la de un cristiano y un moro que lucen en sus escudos los colores de ambos reinados de este año”.
Con esta minuciosa descripción de su obra, Salvador Gomis, al igual que hacía Joan Llobell, deseaban felices Fiestas Patronales a los alteanos y alteanas.
El acto de presentación era clausurado por el Alcalde, Diego Zaragozí, quien calificaba como “cíclico” el acto de presentación de los carteles de fiestas, que se lleva a cabo cada año en estas fechas y cuyos protagonistas son diferentes.
Diego Zaragozí hacía referencia a la importancia de estas fiestas para las personas que ostentan cargo en el Reinado Moro, Reinado Cristiano y en el Stmo. Cristo del Sagrario. El alcalde manifestaba la satisfacción que para la población de Altea supone el contar con Comisión de Fiestas del Cristo y se refería a la “fortaleza con la que cada año cuenta la fiesta de moros y cristianos; una fiesta que cada año está más consolidada y que necesita de representación en la parte más religiosa de la fiesta del Cristo a través de la Comisión y las reinas y sus damas”. “Creo que hemos de estar contentos de que un grupo de mujeres y hombres valientes de la quinta del 69, encabezados por el clavario Vicente Ripoll, se hicieran adelante para organizar las fiestas del Cristo, algo que hará que la celebración sea más bonita, si cabe, que la del año pasado”. Añadía el primer edil alteano.
Diego Zaragozí daba la enhorabuena a los protagonistas de la tarde y al municipio de Altea porque tiene unas fiestas que “son el orgullo de todos los que pertenecemos a este pueblo”.