Entrevista> José Vicente Coves / Acuarelista (Elche, 1-diciembre-1957)
Al pintor ilicitano José Vicente Coves le podríamos llamar artista ferroviario, teniendo en cuenta que su obra la dedica casi al cien por cien a plasmar escenas de este género. La fascinación le viene desde muy pequeño y no sabe muy bien por qué.
Realizó estudios de Bellas Artes en Valencia, domina la acuarela y otras técnicas, y le encantan las escenas ferroviarias, porque encuentra en ellas un tema cargado de historia, movimiento y conexión.
Tren minero
Los trenes representan una era de industrialización y progreso, mientras que las estaciones y los paisajes ferroviarios ofrecen una riqueza visual para explorar. Las líneas de los rieles, la maquinaria y los contrastes entre lo natural y lo artificial se convierten en elementos clave de sus obras.
Es el último ganador del concurso internacional de acuarela del Museo crevillentino Julio Quesada, con su obra ‘Tren minero de Sierra Alhamilla’. Se trata de un tren minero a vapor, que representa una escena de mediados del siglo XX.
«La acuarela se basa en el agua, y el agua tiene vida propia»
¿Cómo te defines como artista?
Soy un pintor especialista. Es decir, normalmente un artista siempre busca clientes entre aquellos que buscan la especialidad a la que te dedicas, y yo lógicamente los busco entre amantes de mi temática por excelencia, que es el mundo ferroviario, y que son muchos. Pretendo captar la esencia de los ferrocarriles con pinturas llenas de vida.
¿Hay mucha afición por todo lo que rodea al mundo ferroviario en la provincia de Alicante?
Muchísima, incluso hay una asociación de la que soy fundador. Tenemos un museo abierto al público los fines de semana en la estación de Torrellano, y un pequeño tren para disfrute sobre todo de los más pequeños. Allí tenemos nuestra sede donde nos reunimos los sábados y desde donde organizamos diversas actividades.
«De los trenes me atraen sus historias ocultas»
¿De dónde le viene esa fascinación?
Pues de toda la vida, desde pequeño. No sabría decirte por qué, en cuestión de gustos cada uno tiene los suyos y a mí desde siempre me han fascinado los trenes y todo lo que les rodea. Me atraen sus historias ocultas, cómo trabajaron los ingenieros, los edificios, que materiales empleaban, etc. Ya te puedes imaginar lo que pedía a los Reyes Magos de pequeño.
¿Viajas mucho en tren?
Más que viajar en tren viajo para ver ferrocarriles y estaciones. Recientemente fui a Inglaterra para visitar el museo británico del ferrocarril. También he realizado otros viajes con objetivos similares a Francia y Suiza, además de muchas ciudades españolas.
«Ya te puedes imaginar lo que pedía a los Reyes Magos de pequeño»
Fuiste el ganador del último Premio Internacional de acuarela Julio Quesada por tu obra ‘Tren minero de Sierra Alhamilla’. ¿Es la acuarela tu técnica preferida?
Uso todos los medios artísticos que están a mi alcance; lo que ocurres es que el premio recibido era en modalidad de acuarela, y me adapto para poder participar. Cuando la técnica es libre elijo la opción que mejor considere para la obra que vaya a presentar.
La acuarela es una técnica más complicada de lo que parece, porque la capacidad de rectificar errores es muy limitada. Tienes que tener mucha seguridad sobre lo que vas a hacer porque se basa en el agua, y el agua tiene vida propia. Es difícil controlarla sobre el papel, y se seca muy deprisa.
En los museos más importantes, ¿es una técnica menos valorada que otras, como el óleo?
No creo que la acuarela esté menos valorada, creo que como todas las técnicas pictóricas tiene su lugar, y no un lugar secundario. Conozco muchos acuarelistas de renombre que no renuncian a seguir con esa técnica.
Cada obra tiene su lugar y su público. Complicaciones, cada técnica tiene las suyas, porque al igual que antes te decía la escasa capacidad de reacción que tiene la acuarela ante un error, con el óleo es más fácil rectificar porque tarda mucho más en secarse. Solo es cuestión de gustos y de buscar el lugar donde encontrar tus técnicas y artistas preferidos.
«Llaman mucho la atención mis obras sobre líneas mineras que hace cien años desaparecieron de la zona de Almería»
¿En qué estás trabajando ahora?
Ahora estoy trabajando en un cuadro de gran formato, sobre el depósito de locomotoras de Salamanca. Es un trabajo que me ha encargado un cliente, y es una evocación inspirada en los años sesenta, de lo que fue un depósito enorme de locomotoras en la estación de dicha localidad. Espero acabarlo en unos días.
¿Qué es lo que más sorprende a quienes visitan tus obras?
Pues a juzgar por sus comentarios creo que lo que más les sorprende son las reconstrucciones de determinados lugares que ya han desaparecido, y hay que recurrir a mucha información para ser fieles en su reproducción. Sorprende a los que lo conocieron porque vuelven a su memoria, y también a los que no porque no lo imaginaban así. Destacan también el realismo de las obras.
Llama también mucho la atención mis obras sobre líneas mineras de la zona de Almería que hace cien años desaparecieron. Me fui hasta allí para poder recabar información y hacer una reconstrucción que fue también muy apreciada.