El pasado viernes se celebraba el Consejo de Inclusión Social, presidido por la edil Anna Lanuza y formado por asociaciones de carácter social, representantes ciudadanos, partidos políticos, Policía Local y representantes de las áreas de Bienestar Social, Empleo, Juventud, Urbanismo, Cultura y Seguridad Ciudadana.
Un consejo que aprobaba diferentes ayudas sociales y como detallaba la edil de Bienestar Social, «este consejo extraordinario se lleva a cabo para modificar la actual Ordenanza Municipal reguladora de la Concesión de Prestaciones Económicas de Urgencia Social y Desprotección, para adaptarla a las novedades legislativas vigentes en materia de inclusión social, que tienen como eje principal el otorgamiento de ayudas a las personas más vulnerables; como puedan ser mayores; personas en riesgo de exclusión social y económica; personas con diversidad funcional; personas que padecen violencia de género; familias monoparentales, monomarentales y numerosas; así como cualquier persona que cumpla los requisitos que se solicitan a la hora de tramitar las mencionadas ayudas «.
Como ha explicado Anna Lanuza referente a las nuevas ayudas que los usuarios podrán percibir, «desde el departamento de Bienestar Social ya se venían ofreciendo una serie de ayudas a la ciudadanía; como puedan ser las destinadas a alquiler o hipoteca, eficiencia energética, alimentos, entre otras, pero ahora el que hemos hecho ha sido incluir en la Ordenanza ayudas para los menores escolarizados en nuestro municipio; ayudas para personas con necesidades especiales destinadas a cubrir los gastos de dentista, oculista o audífonos”. A lo que la edil ha añadido: “estas prestaciones de carácter puntual o periódico tienen como fin mejorar la calidad de vida y la autonomía de las personas solicitantes con el objetivo de lograr un nivel de vida digno”.
“Las ayudas que se pueden prestar recogen un conjunto de intervenciones de carácter temporal o permanente y van dirigidas a la prevención, diagnóstico y programas de atención primaria básica de la atención social, promoción de la autonomía y la inclusión social”. Ha puntualizado Lanuza, quien matiza que “por otra parte, encontramos las ayudas económicas que comprenden las entregas dinerarias de carácter puntual o periódico destinadas a mejorar la calidad de vida y autonomía así como la atención inmediata a situaciones de urgencia, situaciones socio sanitarias o frente a la carencia de necesidades básicas”.
Para la responsable municipal de Bienestar Social, “lo más destacable de las nuevas ayudas que incluye la ordenanza son las destinadas al apoyo de inicio escolar; ayudas a la vivienda que contemplan reparaciones, alquiler o hipoteca; ayuda para hacer frente a los gastos de suministros energéticos; subvenciones para las reformas para adaptar hogares a las necesidades de personas mayores; desplazamientos; atención y ayuda en tramites documentales o judiciales o paliar la brecha digital”.
“De igual manera, somos un municipio pionero en modificar un plan de atención individualizado para cada demandante de las ayudas nombradas, así como las modificaciones en el IPREM en cuanto a unidades familiares, diversidad funcional, familias acogedoras, monoparentales y numerosas y personas ex titulares de Renta Valenciana para poder dar cobertura a las necesidades reales de la ciudadanía de manera más ecuánime”. Ha sentenciado la edil.
Unas medidas que el Consejo de Inclusión ha aprobado por unanimidad, y al que la edil de área ha dado las gracias con estas palabras: «el poder aprobar en el consejo de Inclusión estas medidas sociales es dar un paso más en nuestro pueblo hacia una gestión social que prioriza a las personas más vulnerables, por eso quiero agradecer el espaldarazo”.
Anna Lanuza ha concluido su intervención adelantando que “el siguiente paso será la aprobación en Sesión Plenaria de las modificaciones en la Ordenanza para poder abordar el conjunto de prestaciones del sistema público valenciano en materia de servicios sociales y dar cobertura a las necesidades básicas de las personas que lo necesitan».