Entrevista > Samuel Coves / Diseñador de moda (Crevillent, 11-julio-2004)
Samuel Coves supo casi desde la infancia que su futuro estaría fuertemente vinculado a la moda, tejidos, bocetos y pasarelas. “Recuerdo que en Sexto de Primaria ya dibujaba revistas como ‘Top Models’”, recalca.
Lamenta, en este sentido, no conservar ninguno de esos primeros esbozos. Siguió destacando en cursos posteriores, sobre todo en asignaturas plásticas, virtudes que mantiene en la actualidad, una vez finalizado el tercer curso de la Escuela de Arte de Orihuela.
Junto a su compañera Lucía Ruiz, de Almoradí, se presentó a la Semana de la Moda de Alcoy, certamen que ganó, pese a debutar. Este triunfo, además, hará que represente a la Comunitat Valenciana en los Premios Nacionales de Moda, a finales de año. “Ya estoy nervioso”, confiesa.
¿Te veían como el diferente de clase?
Nunca me sentí así, aunque es evidente la ventaja de residir en un pueblo donde nos conocemos todos. Siempre he estado protegido y comprendido por mis vecinos.
También es sabido el alto nivel artístico de Crevillent, impulsado por las fiestas de Moros y Cristianos y la Semana Santa. De pequeño ya me fascinaban los trajes que veía en ambas celebraciones.
Ya entonces tendrías referentes.
El primero que me llamó la atención en la moda fueron Alexander McQueen, inglés, y Thierry Mugler, estilista francés que vistió a Beyonce o Lady Gaga, entre otras. Cuando vi esos trajes me dije “¡me encantan!”.
«De pequeño ya me fascinaban los trajes que veía en las fiestas de Moros y Cristianos»
¿Tan extravagantes?
Es mi estilo, 100%, muy similar al de Palomo Spain o Loewe. Me fascina ser extravagante, que guste a muchos y todo lo contrario a otros: busco, no obstante, un punto medio, porque aparte de moda, anhelamos conectar por medio del mensaje que queremos transmitir.
En muchas ocasiones diseñadores realizan trajes muy diferentes, pero el mensaje, en parte, se pierde.
¿Cómo plasmas las ideas a papel?
De las que me vienen intento hacer algún boceto, comenzando por las formas típicas -de un corsé, por ejemplo- para, a continuación, darle una vuelta. Cuando ya tengo diversas opciones, me decanto por una o junto varias en un mismo boceto.
Algo más de la mitad de los bocetos que inicio acaban en la papelera. Algunos sí me los guardo, porque me agrada un detalle en concreto.
Eres un perfeccionista.
Sin duda, para esas cosas considero que mi signo, cáncer, me representa perfectamente. Opino que, si vas a hacer algo, procura hacerlo realmente bien.
«Aparte de moda, anhelamos conectar por medio del mensaje que queremos transmitir»
¿Afrontas el verano más importante de tu vida?
Exacto, pues una artista española internacional va a llevar en varios de sus conciertos mis vestidos. Asimismo, recientemente me felicitó por mi trabajo el estilista de Paul Thin, cantante que participó en Operación Triunfo 2023.
¿Tu primer éxito se produjo en Alcoy?
El proceso fue curioso, porque una maestra del centro me propuso apuntarme. Mientras lo pasaba al grupo de clase tenía claro que iba a acudir al certamen: pensé “estoy en Tercero y ya poseo la madurez artística para hacer una colección que pueda salir adelante”.
Conmigo vino mi compañera y amiga Lucía Ruiz, tras enviar ambos dos diseños.
¿Cuál fue vuestra reacción al saberos dentro del concurso?
Estábamos en clase y, de repente, le llegó un correo, con la aceptación. Dos o tres minutos después, a mí; fue uno de los mejores momentos de mi vida.
La verdadera sorpresa vino más tarde, cuando gané el que era mi primer evento importante. Sin embargo, soy consciente que cometí errores, de novato, siendo normal: debutaba en un backstage, un desfile, me cambiaron una modelo a última hora…
¿Has recibido consejos para la cita de Madrid?
Principalmente del ganador del pasado, porque a finales de año representaré a la Comunitat Valenciana en los Premios Nacionales de la Moda. Faltan todavía unos meses, pero ya siento nervios.
«Soy consciente que cometí errores de novato, es normal: debutaba en un backstage, un desfile…»
Será un nuevo reto en tu brillante trayectoria.
Otro más. Aunque no lo dije en su momento, fue todo un reto afrontar el concurso alcoyano tras una ruptura amorosa. Centrarme en los desfiles, los trajes y el evento en sí me ayudó a superarlo, a no pensar en nada más.
Posiblemente sin ese impulso no hubiera podido participar en la cita, ni mucho menos ganarla. Lo veía como una cosa imposible.
¿Estás en tu mejor momento?
Pienso que sí, aunque no me gusta fijarme mucho en eso, para no gafarme. Soy muy creyente de las energías negativas y sabemos cómo es este sector, que además de estresante, es mucho de subidas y bajadas constantes.
¿Igualmente es una profesión obsesiva?
Bastante, muchas noches me cuesta dormir, pensando en hacer una u otra cosa. Por eso prefiero trabajar en la parte final del día.