Existe un punto geográfico en el término municipal de El Puig que resulta de lo más curioso. Se encuentra cerca del mar. En una de las bocas de la marjal que arrojan agua al mar Mediterráneo tras recorrer l’ Horta Nord desde la Real Acequia de Moncada. En este terreno confluyen elementos del pasado lejano, otros del pasado reciente y al tiempo actividades muy distintas del presente.
El ocio, la fiesta, los estilos de vida, la vida sana, la defensa costera, los puntos de pesca… todas estas actividades y, de diferentes líneas cronológica se dan la mano entre las urbanizaciones Play Puig y Mar Plata, dos conocidas zonas de verano del norte de València que mantiene uno de los pocos terrenos no urbanizados en la salida de la ciudad en dirección a Castellón.
Camino de la playa
El paseo marítimo de El Puig, obra de reciente construcción, se extiende desde los vecinos términos de Puebla de Farnals (por el sur) hasta el de Puzol (por el norte). Los veraneantes lo inundan en sus paseos a la hora del ocaso. De aquí para allá parejas, amigos, familias y deportistas recorren un paseo que se trunca una vez llega al Camino de la Playa (‘Camí de la platja’, en valenciano, según rezan sus indicaciones).
Ahí es donde aparece este ‘triángulo de las Bermudas’ valenciano con el que hemos querido titular este reportaje. Las grandes rocas de granito que desde hace décadas frenan el paso de las aguas también impidieron la continuidad del paseo marítimo haciendo que esta infraestructura diera un salto entre las urbanizaciones de Play Puig y Mar Plata.
Rocas de granito frenan el paseo marítimo entre las urbanizaciones de Play Puig y Mar Plata
Acequia del Molí
Uno de los sistemas hidráulicos más antiguos de la Comunitat es La Real Acequia de Moncada. Desde la época musulmana, esta acequia deriva el agua del río Turia por su margen izquierda mediante un azud en el término de Paterna, en las faldas de La Cañada. Las aguas del Turia se extienden hasta adentrarse en los campos de l’Horta Nord.
La marjal de El Puig es recorrida por diferentes lenguas de agua mansa y una de ellas, la Acequia del Molí muere en este punto del que hablamos. El regadío reclama su protagonismo en dicho punto estratégico.
En 1528 se construyó la Torre de Guaita a fin de avisar del ataque de turcos y berberiscos
Torre de Guaita
Las aguas del Turia no llegan directamente en superficie. Los últimos metros los recorren bajo una estructura del pasado que emerge para sorpresa de los curiosos. Como brotada del suelo, entre conchas y salitre aparece majestuosa la Torre de Guaita. Construida en la segunda mitad del siglo XVI como defensa frente a los piratas argelinos.
Fue en 1528 cuando las Cortes de Monzón acordaron su construcción con la misión de avisar del ataque de turcos y berberiscos que venían por mar y desembarcaban en las costas para invadirlas. Construida a base de piedras rojizas de rodeno propias de este entorno valenciano, posee seis metros de diámetro en su base y una altura de ocho metros y medio.
En tiempos, para su defensa se contaba con dos soldados de a pie y dos a caballo. La comunicación entre las torres se realizaba mediante hogueras que se encendían en la planta más alta. Hoy en día en su base posee un cartel informativo y según ciertos horarios se puede visitar.
Pelikano Unusual Club revive en verano y recoge el espíritu de la legendaria discoteca OK
Noches de fiesta
Pegado a la Acequia del Molí se erige una imponente discoteca: Pelikano Unusual Club. No es solo discoteca. Allí se puede celebrar eventos y reuniones de trabajo, ir a picar algo e incluso asistir a diversas clases y actividades dirigidas para vecinos y veraneantes. Diseñado con un estilo muy vistoso, este local se ve flanqueado además de por una acequia, también por la Torre de Guaita, las casitas de los pescadores, la urbanización Play Puig y las caravanas.
Paellas, piscina, cocktails, baile… Pelikano Unusual Club revive en verano y recoge el espíritu de la legendaria discoteca OK. Sobre su misma estructura en el pasado existía una discoteca que hacía las delicias de los veraneantes del norte de València. Conocidos eran sus combinados ‘Tumba Barcos’, ‘Papa Pitufo’ y otros cubalitros que regaban con fuerza la noches de las décadas de los ochenta y los noventa.
Casitas de pescadores
En la entrada principal de Pelikano Unusual Club se puede ver un grupo de caravanas estacionadas en una zona de aparcamiento. Las caravanas, de usuarios extranjeros que viene a València en busca del buen tiempo y la playa, se adueña del lugar fuera de temporada y reculan cuando llega el verano. La Torre de Guaita, la marjal, el paseo marítimo, el Mediterráneo… la zona de aparcamiento es idílica y estimulante.
Y al otro lado de la Torre de Guaita, donde aún no ha podido extenderse el paseo marítimo, resisten las no menos legendarias casitas de los pescadores de El Puig. A modo de la aldea gala en ‘Astérix y Obélix’, estas casuchas levantadas por pescadores de décadas pasadas resisten a los grandes complejos para sorpresa de turistas y paseantes.