La alcachofa es una hortaliza importante en la comarca desde los años 60, y su cosecha se ha convertido en una de las mayores fuentes de ingresos de la Vega Baja. El producto y su cultivo poco a poco ha ido ganando interés entre los agricultores, a la vez que también ha aumentado su demanda entre el público nacional e internacional.
En el año 2011 surge la Asociación Alcachofa Vega Baja con el objetivo de poner en valor el producto y dar a conocer la denominación de origen de esta hortaliza tan demandada.
Hemos hablado con Diego Martínez Ruiz, actual presidente de la asociación y embajador de esta hortaliza. Él nos cuenta más detalles sobre la relación de la alcachofa con la Vega Baja.
¿Cuándo se empieza a plantar y a recolectar la planta de la alcachofa?
La alcachofa en la Vega Baja se planta desde mediados de julio hasta finales de agosto escalonadamente. Luego se recolecta desde finales de octubre, que encontramos la alcachofa más temprana, hasta finales de mayo.
¿Favorece al cultivo el sistema de riego tradicional?
Así es, desde el principio. Para poder plantar el agricultor tiene que regar, y aquí el sistema de riego reparte el agua por tandas, si el agricultor no tiene agua en la acequia no puede plantar.
El sistema de riego tradicional ayuda a que la plantación y la recolección se hagan de forma escalonada, en función del abastecimiento de agua que tiene cada agricultor.
¿Qué necesita este cultivo para tener una buena producción?
Agua en cantidades y de calidad, un clima templado-frío y el saber hacer de los agricultores, que en esta zona están muy experimentados. Se trata de un cultivo muy arraigado que se lleva cultivando entre 70 y 80 años.
¿Cuánto tiempo es productiva la planta de la alcachofa?
Máximo dos años, no es aconsejable dejarla más tiempo. La planta de segundo año produce un poco menos que la nueva pero, por otra parte, gastas menos dinero en el cultivo. Depende del agricultor, que tiene que hacer balance y decidir qué le interesa más. Lo que nadie hace es poner la misma planta un tercer año, pues genera pérdidas.
¿Qué propiedades tienen las tierras de la Vega Baja para ser idóneas para el cultivo de alcachofa?
La alcachofa se adapta muy bien a la Vega Baja por el tipo de suelo que tenemos, por el tipo de riego y por el tipo de clima, que no es extremo. Son raras las heladas de 2 o 3 grados bajo cero, que serían pésimas para el agricultor y para la planta.
«La producción se destina en un 60 % a las conservas y en un 40 % al consumo fresco»
¿Cuántas toneladas de alcachofa de la Vega Baja se recolectan al año?
El año pasado conseguimos unas 26.000 toneladas, y este año aún no podemos decir mucho porque no hemos terminado, nos queda todo el mes de mayo para seguir recolectando.
De esa cantidad alrededor del 60 % se destina a conservas y el 40 % al consumo fresco de alcachofa.
¿Qué propiedades tiene esta alcachofa en particular?
Por las características del cultivo en esta zona, es una alcachofa que crece despacio y se llena de hojas internas tiernas y comestibles. También tiene propiedades diuréticas, es buena para el riñón, para el hígado… en definitiva, una farmacia en la huerta.
«Gastronómicamente es un producto en auge, presente ya en todos los restaurantes»
¿Ha aumentado el consumo de alcachofa en los últimos años?
Sí, indudablemente hemos notado que ha aumentado la demanda y, paralelamente, hemos aumentado en nuestra comarca el número de hectáreas cultivadas.
El consumo de alcachofa fresca y en conserva está muy arraigado en España y en el extranjero.
¿Cómo podemos distinguir una buena alcachofa?
Tiene que estar tersa, que no tenga el tallo flexible, así comprobaremos que no lleva mucho tiempo cortada. Tiene que estar verde, que no tenga manchas marrones por haberse deshidratado, y debe ser compacta, que al apretarla por arriba cruja un poquito, eso significa que tiene agua.
Cada año elegís a una persona influyente para que haga el primer corte simbolizando el inicio de la campaña. ¿De quién fue el honor este año?
El corte lo hicimos en Cox a cargo del padrino de esta temporada Pablo Gonzalez, chef de renombre murciano que cuenta con dos estrellas Michelín y tres soles Repsol en su restaurante ‘Cabaña Buenavista’. Le encantó protagonizar ese momento y no le faltaron elogios para nuestra alcachofa.
¿Cómo ves el futuro de la alcachofa de la Vega Baja?
Muy bien, la demanda aumenta, la producción aumenta y cada año aumentan las hectáreas cultivadas porque toda la alcachofa se vende. Es un producto con futuro.
«Dolores celebra esta gran fiesta fin de campaña que esperamos que se siga celebrando durante muchos años más»
¿Cómo ha estado presente la asociación en la fiesta Fin de Campaña de Dolores?
Principalmente hemos colaborado con el Ayuntamiento de Dolores aportando materia prima y ayudando en todo lo que pudimos, tanto en la organización como en los actos. Participamos sobretodo en la torrada de alcachofas que se hizo.
Una gran fiesta fin de campaña donde la alcachofa de la Vega Baja fue la gran protagonista y esperamos que se siga celebrando durante muchos años más.
¿Qué les diríais a nuestros vecinos?
Animamos a que se sigan consumiendo alcachofas en fresco y en conserva. También queremos animar a los ayuntamientos de nuestra comarca que todavía no se han adherido a nuestra asociación a que lo hagan, para aunar esfuerzos y difundir este producto, que tanto significa para nosotros y tantos puestos de trabajo crea en el sur de la provincia, por todos los rincones del mundo.