Entrevista > Diego Zaragozí / Concejal de Obras Públicas de Altea (Altea, 22-octubre-1967)
Tras tres meses de confinamiento en los que la vida de muchos ha quedado en pausa, el despertar a la nueva realidad está siendo tremendamente duro para muchos. La inseguridad del mercado laboral, un fantasma que parecíamos empezar a dejar atrás tras más de diez años desde la gran recesión de 2008, vuelve a flotar en el ambiente y desde el ayuntamiento de Altea se trabaja para colaborar en el mantenimiento y creación de puestos de trabajo.
Diego Zaragozí, concejal de Obras Públicas, explica en esta entrevista concedida a ‘Aquí en Altea’ los planes que en este sentido manejan desde el Consistorio.
Ahora que parece que la derivada sanitaria de esta crisis comienza a remitir llega el momento de fijarse en el apartado económico y la creación de empleo. Desde el sector público, uno de los principales motores de promoción del trabajo es la inversión en obras.
Efectivamente, nosotros entendimos desde el primer momento que el Ayuntamiento iba a tener que apoyar a las pequeñas y medianas empresas en general y, preferiblemente, a las locales para, de esta manera, generar trabajo. En este periodo de tiempo, además de las obras que teníamos previstas para iniciarlas en el minuto 1 de la vuelta a la normalidad, hemos trabajado en proyectos para, dentro de nuestras posibilidades, seguir promoviendo obras.
El alcalde, Jaume Llinares, adelantó que la gran obra que tiene pendiente Altea, que es la segunda fase del Frente Litoral, no es necesariamente la que más puestos de trabajo puede generar en el ámbito local. ¿Puede explicar los motivos para que esto sea así?
El problema es que, al pararse los plazos, está todavía pendiente de aceptación, licitación y sería luego cuando comenzarían las obras. Nuestro plazo más optimista era empezar las obras en septiembre u octubre para poder tenerlas terminadas en verano del año que viene. Pero como todo se ha retrasado, seguramente no se empezarán las obras este año. Nuestra idea ahora es conseguir arrancar en 2020 todo el trabajo burocrático.
En cuanto al problema para generar empleo, es una obra grande que saldrá a concurso y supongo que se presentarán grandes empresas. Es verdad que nosotros intentamos, en la medida de las posibilidades, ponernos en contacto con esas empresas por si necesita los refuerzos de autónomos o PYMES locales.
«No se puede castigar a una empresa que tiene a su personal frente a otra que tiene que hacer contrataciones»
A pesar de que sea una obra de esas dimensiones y que tenga que salir a concurso, ¿no se puede, en el pliego de condiciones, poner algún tipo de baremo de puntuación que beneficie a aquellas ofertas que se comprometan a hacer contrataciones locales?
Entiendo que eso no se puede hacer por una cuestión de competencias. No se puede castigar a una empresa que tiene a su personal frente a otra que tiene que hacer contrataciones. Además, esta licitación no la hace el Ayuntamiento, sino el Ministerio.
«En Altea tenemos empresas lo suficientemente importantes como para competir por las grandes obras»
Dicho esto, añado que en el pasado hemos tenido suerte porque en dos grandes obras que no adjudicábamos nosotros, como el Campus de Bellas Artes y la reforma de la Casa Gadea, concursaron empresas alteanas y en los dos casos resultaron adjudicatarias. En Altea tenemos empresas lo suficientemente importantes como para competir por estas grandes obras, pero es más difícil.
Un claro ejemplo del tipo de actuaciones que sí pueden generar ese empleo local tan buscado son las que se engloban dentro del Plan Edificant.
Sí. Todas ellas se las han quedado empresas de la comarca. Son obras con un presupuesto asequible y, por lo tanto, hace más accesible que compitan por ellas empresas de nuestro entorno.
Cuando nos referimos a estas actuaciones que buscan generar empleo, ¿nos referimos a obras que se han pensado en estos últimos meses?
Algunas de estas obras se tenían que hacer para paliar los daños causados por el temporal. Otras, son actuaciones de mejora que, como he dicho, se han ido encargado tal y como ha ido evolucionando el año. En ese sentido, tenemos prácticamente finalizada una obra en la parte final de l’Albir, donde se había roto un trozo del paseo.
Cercana a otra actuación como es la de la rotonda del Chiringuito…
Sí, es una de las más importantes en ese sentido y cuyo plazo de ejecución finalizó recientemente.
El temporal de este pasado invierno afectó a varios puntos del término municipal.
En efecto, por eso otra obra importante en ese sentido es la que se está realizando en la Playa de La Roda. Ahí hemos hecho un cambio porque había unos voladizos de madera que siempre daban problemas con el mal tiempo y hemos cambiado la fisionomía de ese espacio.
¿Cómo han actuado a la hora de adjudicar esas obras para tratar de beneficiar al máximo la generación de puestos de trabajo?
Cada obra la ha hecho una empresa diferente. En la legislatura anterior se creó una bolsa de empresas y autónomos locales y lo que hacemos en invitar a distintas empresas a cada una de las obras. A aquella a la que se le adjudica una, ya no la invitamos a la siguiente para que sea otra la que lo consiga.
Volviendo a la playa de La Roda, también se ha actuado sobre los accesos.
Sí, estamos reconstruyendo una de las rampas de acceso, que había quedado completamente destrozada. También tenemos una obra de reparación de conducción de aguas y saneamiento en el Carrer Sant Vicent, que es una actuación muy necesaria porque había problemas de salubridad muy graves en algunas de las casas de ese vial.
Hemos arreglado todo el acceso peatonal desde el Portet de l’Olla hasta el Convent, que es una zona a la que va a pasear muchísima gente y se había quedado muy limitada. Así mismo, estamos urbanizando ‘Las Mimosas’.
¿Qué me puede decir sobre las actuaciones previstas en los aparcamientos?
Una de las obras más importantes que estamos acometiendo es el asfaltado del parking de ‘La Basseta’, que se ha ido utilizando desde hace unos cinco o seis años. Era una zona de tierra que generaba mucho polvo y suciedad a los vecinos y hemos procedido a asfaltarla para poder trasladar allí el mercadillo.
Efectivamente son muchas actuaciones, pero, tras este parón por el confinamiento, ¿se van a poder acabar a tiempo?
La mayoría se acabaron en el mes de mayo y otras a principios de junio. La primera fase de ‘La Basseta’, por ejemplo, ya se ha abierto al público. En la segunda fase vamos a generar nuevas plazas, pero consideramos, junto a la empresa adjudicataria, que lo mejor sería hacerlo en dos tandas. Prácticamente hemos hecho ya el 60% y ahora queda el resto. El motivo de hacerlo así es que no hemos querido privar de plazas de aparcamiento mientras durasen las obras.
¿Fuera del casco urbano también tienen previsto actuar?
Estamos reparando varias calles en las urbanizaciones de la sierra y en el Mascarat, que es otra zona de urbanizaciones.
«Vamos a bajar en ingresos porque hemos dejado de cobrar algunas tasas e impuestos, pero lo primero es ayudar y no dejar a nadie atrás»
El gran problema al que se enfrentan ahora todos los ayuntamientos es al descuadre presupuestario que supondrán las partidas destinadas a ayudar a los más afectados por la crisis. ¿Su concejalía ha sufrido económicamente? Más allá del Frente Litoral, que ya ha explicado, ¿han tenido que renunciar a alguna actuación?
En el presupuesto municipal, una de las grandes partidas era la destinada al Frente Litoral. Teníamos que tener una reserva de crédito para, en el momento en que se firmase el convenio, poder hacer esa aportación. Como ese convenio no se ha firmado, tenemos un colchón de dinero que se está reutilizando tanto en servicios sociales como en este tipo de obras que estamos comentando.
Como he dicho al principio, ya estamos trabajando en poner en marcha más proyectos que queremos iniciar en este mismo año. Sabemos que la burocracia ralentiza mucho las cosas y que vamos a bajar en ingresos porque hemos dejado de cobrar algunas tasas e impuestos, pero lo primero es ayudar y no dejar a nadie atrás.
«Se está ahorrando mucho dinero en otras partidas por la suspensión de actividades que normalmente sí se realizan»
Echar mano de esa reserva de crédito que me comenta, ¿puede poner en peligro el futuro del Frente Litoral?
No. Es un disponible que tiene el Ayuntamiento que en los dos años anteriores se había cogido de partidas destinadas a inversiones y que ahora se había concentrado para esa finalidad. Por ello, no va a haber ningún problema. Además, tampoco estamos hablando de abrir el melón y gastar toda la reserva porque todavía cabe la posibilidad de que este año se firme el convenio con el Ministerio y tengamos que pagar la parte proporcional de los meses que queden. Ese colchón siempre lo tenemos asegurado. Nosotros no vamos a gastar todo ese dinero.
De todas formas, y en ese mismo sentido, en el presupuesto siempre tenemos un fondo de contingencia para todo lo que pueda surgir y ese dinero ya se ha traspasado a servicios sociales. Lo mismo ocurre con la partida destinada a las fiestas patronales y a buena parte de la que se tenía pensada invertir en actividades culturales, juventud, deportes… Se está ahorrando mucho dinero en otras partidas por la suspensión de actividades que normalmente sí se realizan.
«En algunas actuaciones ya no tenemos gran celeridad porque no viene un verano masificado»
Me ha dicho que muchas de estas obras van encaminadas a reparar los destrozos de este invierno. A la vez, esperamos un verano muy atípico en cuanto al turismo. ¿Han cambiado el orden de prioridades a la hora de hacer las obras debido a esta situación?
Ha variado un poco. Está claro que, cuando al final del año hagamos balance, no lo podremos hacer como si 2020 hubiese sido un año normal. Hemos estado dos meses prácticamente sin actividad. La idea de las reparaciones que estamos haciendo ahora era correr al máximo para que estuviesen terminadas en Semana Santa.
Ahora ya no tenemos esa celeridad porque, como bien has dicho, no viene un verano masificado. Por ejemplo, hay una obra en el casco antiguo, la reparación de un muro en la Costera dels Matxos, que teníamos previsto hacer antes de verano y que ahora vamos a dejar para septiembre porque, paradójicamente, que no se vayan a hacer las fiestas ese mes nos beneficia en algunas cosas.
Durante estos meses de parón, ¿se ha producido alguna novedad respecto a la nueva salida de la autopista que se espera para Altea?
La única que se está construyendo es la de Oliva y nos consta que el Ministerio está estudiando todas las posibilidades de los pueblos que tenemos problemas con la autopista, pero no se ha avanzado prácticamente nada en esa cuestión.
Puede ser que se esté trabajando de puertas adentro en el Ministerio, pero a nosotros no nos ha llegado ninguna notificación al respecto.
¿Cree que la liberalización de la autopista puede generar problemas de tráfico este verano?
Tenemos algunos problemas en el cruce de Altea La Vella. Se está convirtiendo en un lugar con mucho tráfico e, incluso, peligroso por el aumento de tráfico. En su día solicitamos la posibilidad de hacer una rotonda, pero a día de hoy todavía no nos ha llegado una respuesta al respecto.
El problema es que esta situación que hemos atravesado no ha permitido hacer los estudios técnicos que determinen si es o no necesaria algún tipo de actuación.
«Estamos trabajando en la peatonalización lúdica de distintas zonas de Altea»
Pensando en el futuro a medio y largo plazo, parece que esta crisis va a traer un gran cambio en la movilidad urbana con la bicicleta como gran protagonista. ¿Están planificando apretar el paso en ese camino que ustedes ya llevan un tiempo recorriendo?
Estamos trabajando ya en la posible peatonalización de distintas zonas de Altea. Con la desescalada, ha salido mucha gente a pasear o en bicicleta y se han dejado los coches en casa. Creo que estamos entendiendo mejor que nunca que las distancias en Altea son muy cortas y queremos apostar por la peatonalización recreativa, es decir, en fines de semana para que la gente pueda pasear sin ningún peligro.
Por ejemplo, en la carretera que une Altea con Cap Blanch, desde el principio de la desescalada habilitamos uno de los dos carriles para el paseo y no está habiendo problemas y, además, está yendo mucha más gente.
Sé que es muy difícil hablar de estas cosas a largo plazo, por lo que le pido, en todo caso, su opinión personal en este momento. ¿Esas peatonalizaciones han llegado para quedarse o se revertirán cuando volvamos a la normalidad?
La idea es hacer la prueba este verano, empezando en la primera quincena de junio en algunos de esos espacios. La idea es mantenerlo así todo el verano. Como has dicho, y lo dejo claro, lo que te digo es mi opinión personal y creo que en caso de que funcionase bien y que la gente lo admita y no se generen problemas con los vecinos y los comercios, la idea sería mantenerlo así de manera definitiva.