Entrevista > Salud Lozano / Concejala de Servicios Sociales
El COVID-19 ha llevado a la ciudadanía a vivir un estado de excepcionalidad en todo el mundo, cambiando de un día para otro las necesidades de las personas y como consecuencia las prioridades en la gestión de los ayuntamientos. Salud Lozano, comparte lo que ha supuesto esta crisis sanitaria desde la concejalía de Servicios Sociales del ayuntamiento de Cox.
«Teníamos claro que la atención debía ser inmediata ya que son momentos muy complicados para las personas y familias sin recursos»
¿Cómo afronta un municipio como Cox esta situación inusual?
Lo primero con mucha responsabilidad ante un momento histórico tan excepcional. Desde la concejalía de Servicios Sociales éramos conscientes, y más tras haber vivido la Dana el pasado mes de septiembre, que esta segunda crisis iba a ponernos a prueba ante todas las medidas que ya habíamos incorporado en el departamento, para mejorar la calidad de vida de las personas más necesitadas.
Desde el primer momento, teníamos claro que el coronavirus dejaba al descubierto las necesidades de todo el mundo, y que la atención debía ser inmediata ya que son momentos muy complicados para las personas y familias sin recursos, que requieren un trato, aun si cabe, más personalizado. Por ello, el primer paso fue ofrecer a la ciudadanía un número de teléfono (623 397 768) de atención directa y adecuar todos los recursos que están a nuestro alcance para poder hacer frente a las más de 1.247 intervenciones realizadas durante este periodo y a las más de 640 personas que han solicitado ayuda.
«Lo primero que hicimos fue incrementar la partida presupuestaria para poder hacer frente a la diversidad en las necesidades»
¿Qué otras medidas se han tomado desde la concejalía?
En primer lugar, lo que hicimos fue incrementar la partida presupuestaria para poder hacer frente a la diversidad en las necesidades, ya que esta situación a afectado a los colectivos más vulnerables como son las personas mayores y/o con dependencia, personas con discapacidad, familias sin recursos económicos, etc., y la pandemia nos ha puesto al frente de nuevos problemas que nos ha llevado a tener que tomar nuevas decisiones e iniciativas.
«En Cox una gran parte de nuestros trabajadores son autónomos y muchas actividades se vieron paralizadas desde el primer día»
Cox es un municipio con una peculiaridad muy concreta y es que una gran parte de nuestros trabajadores son autónomos y como consecuencia muchas actividades se vieron paralizadas desde el primer día; y hasta el inicio de la fase de desescalada, es decir, apenas un par de semanas, muchas familias no han tenido ingresos. Por ello, las ayudas en alimentos, agua y luz han sido las más demandas, sin olvidar las ayudas del SAD o la atención a victimas de violencia de género.
¿Cómo se gestiona una crisis sanitaria de este calibre?
La verdad es que sin el equipo de profesionales que integran Servicios Sociales: un educador, una psicóloga y tres trabajadores sociales, uno de ellos incorporado como refuerzo para el Covid 19, cuya valía es incuestionable, hubiera sido complicado.
Hay que tener en cuenta que hemos tenido que reforzar todos los servicios e incorporar nuevos como la atención psicológica a la población o realizar llamadas de control pautadas a los usuarios del SAD, trabajando a pleno rendimiento e incluso han atendido trámites de protección de orfandad y prestaciones por discapacidad, directamente al INSS, aportando en todo momento soluciones ante todo lo que ha acontecido diariamente y sin descanso desde que se declaró el estado de alarma.
Sí me gustaría destacar que hubiera sido mucho más difícil si no hubiéramos recibido las subvenciones: de Diputación de Alicante desde el área de Bienestar Social de 39.696 euros y de la conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas de 12.460 euros.