En el verano de 2018 la compañía de gestión de residuos ‘Llegando a la cima SL’ compró unos terrenos en el polígono 21 de la partida de Fontcalent y una Declaración de Interés Comunitario (DIC) para instalar un vertedero privado. Desde entonces ha permitido que multitud de empresas de toda la provincia vinieran hasta aquí con sus camiones para arrojar escombros. Todo ello sin disponer de las pertinentes licencias municipales de actividad y obra, ni el título de gestor de residuos.
“En el Vertedero Municipal de Alicante cobran unos 1.200 euros por arrojar un cargamento de residuos. Pero como aquí no realizan ningún tipo de tratamiento, bajaron los precios a 300 euros. Así empezaron a venir decenas de camiones diarios desde todas partes” nos cuenta Encarna Navarro, ganadera propietaria de los terrenos colindantes con el vertedero irregular.
Así pues la montaña de basura comenzó a crecer y crecer. Hoy supera claramente los 10-15 metros de altura e incluso invade la propiedad privada de Encarna, cuando las Normas Urbanísticas de Alicante dictaminan una altura máxima de 6 metros y un retranqueo mínimo de 10 metros. Los vecinos llevan denunciando esta situación desde hace dos años y, aunque han conseguido cierres provisionales de la actividad, actualmente los camiones siguen llegando.
La montaña Huevo Kinder
Los residentes de Fontcalent la conocen irónicamente como ‘La montaña Huevo Kinder’, pues está tapada con una capa de arena que oculta toda la basura que esconde. No está muy claro pues que ‘sorpresas’ aguarda en su interior. El notario José Perfecto, quien acudió a levantar acta a petición de los propios residentes, identificó “plásticos, escombros, ruedas, calentadores, maderas y hierros“.
“Nosotros sospechamos que puedan haber también materiales industriales peligrosos en las profundidades, como amianto” nos comenta Agustín Pérez, presidente de la asociación vecinal El Salar de Fontcalent.
Desde dicho colectivo también denuncian el impacto causado al medioambiente. “Ya no es solo lo molesto de vivir al lado de una montaña de basura. Como este vertedero no tiene ningún control legal ni ecológico, ha contaminado la tierra y los acuíferos de la zona. Además la arena que usan para tapar la basura ha sido extraída de varias ramblas del valle, desviando así sus cauces” nos explica Agustín.
La primera vez que la Policía precintó el vertedero, a las pocas horas apareció roto
Precintos rotos
Tras multitud de reclamos al Ayuntamiento y la Generalitat, los vecinos no ganaron su primera batalla hasta 2019 (el vertedero ya llevaba un año funcionando). Fue entonces cuando la Policía Local al fin precintó el recinto para que cesaran los vertidos de basura. Sin embargo no sirvió de nada, pues apenas unas horas más tarde misteriosamente todo el precinto apareció roto y los camiones continuaron operando.
El Consistorio alicantino acabó denunciando a la empresa ante la Fiscalía por incumplir su orden de paralización. También la Conselleria de Transición Ecológica le impuso una sanción económica (o al menos eso aseguró a los vecinos en un escrito), aunque no ha trascendido públicamente la cantidad.
“Hemos puesto incontables quejas ante el registro municipal del Ayuntamiento, tanto por asociaciones como a nivel particular. La Generalitat nos aseguró por escrito que multarían a los camiones que siguieran descargando. Sin embargo, nada de nada. Esto parece el lejano oeste, la ley no existe en Fontcalent” se lamenta Agustín Pérez.
El Ayuntamiento volvió a retirar el precinto el 23 de noviembre por un auto judicial
Auto judicial
A principios del pasado noviembre la Policía volvió a precintar la entrada de la parcela, pero en esta ocasión utilizando cadenas y candados para evitar nuevos vandalismos. Los camiones dejaron de llegar por primera vez en dos años y los vecinos festejaron este logro… pero poco duró la alegría en casa del pobre.
La empresa presentó un recurso contencioso-administrativo y el juez resolvió en parte a su favor. “La sala estima parcialmente la suspensión propuesta que quedará referida única y exclusivamente a aquel conjunto de actividades a las que no estaba autorizado el recurrente, referida al almacenamiento de residuos; pudiendo continuar con aquella otra para la que estaba autorizado, consistentes en el tratamiento de residuos no peligrosos” reza el acto del juzgado.
El juez valoró pues que la empresa sí puede funcionar como planta de tratamiento de residuos pero no almacenarlos, dado que cuenta con la Declaración de Interés Comunitario (DIC) así como con una autorización para lanzar emisiones al aire concedida por la Generalitat.
Vuelven los arrojos
El pasado 18 de noviembre varios vecinos se reunieron con el edil de Urbanismo, Adrián Santos, para tratar la situación. “El concejal nos indicó que el Ayuntamiento debía retirar el precinto por este auto judicial, pero también que la empresa ya no podría traer nuevos residuos. En todo caso debían de venir camiones para retirar la basura y valorizarla en una planta donde realmente tengan medios de tratamiento” nos cuenta Encarna Navarro.
“El auto judicial no tiene mucho sentido, pero además solo valora los permisos de la Generalitat. En realidad no ordena retirar ningún precinto porque se lo puso el Ayuntamiento y la empresa sigue sin tener las licencias municipales. El concejal debería haber sido más valiente y no haberlo retirado” opina Manuel Juan, de la asociación vecinal Trek rural.
Sin embargo lo que ha ocurrido, según denuncian los vecinos, es que Llegando a la cima ha vuelto a retomar su actividad con total normalidad desde que el 22 de noviembre fuera retirado el precinto. “Ahora están llegando incluso más camiones que antes, unos 60 al día. Vienen por la mañana, por la tarde y hasta por la noche. La empresa ha entendido el auto judicial justo al revés” denuncia Encarna.
Críticas de la oposición
En el pasado pleno municipal, celebrado el 26 de noviembre, este tema fue largamente debatido puesto que el PSOE propuso crear una comisión específica para la protección del valle de Fontcalent.
Antes del debate político intervinieron tres vecinos de la partida rural. “Todos los políticos que habéis venido a verlo estáis de acuerdo en que esto es una barbarie. ¿A qué esperáis para actuar? Aquí residen votantes de todos los partidos, y les estáis dejando tirados. Invito a Luis Barcala a que venga cuando quiera a verlo con sus propios ojos” manifestó David Pérez, de la asociación Benvinguts a Fontcalent.
Toda la oposición política reprochó al bipartito (PP y Cs) su inacción, la retirada del precinto y su complicidad con la empresa. “Llevan dos años desoyendo las denuncias y han permitido que Fontcalent se convierta en un estercolero. Hemos detectado hasta 17 escombreras ilegales, mientras que permiten que ‘Llegando a la cima’ siga haciendo lo mismo en otras zonas de Alicante” manifestó Raúl Ruiz, concejal socialista.
Por parte de Unidas Podemos, su portavoz Xavier López denunció que Fontcalent es una joya medioambiental que se encuentra al borde del colapso ecológico. “El Ayuntamiento está dejando a esta empresa envenenar la tierra, y probablemente también a los animales y las personas. Muchos de estos escombros están en acuíferos y acaban incluso en el mar” aseguró.
Compromís también cargó contra el gobierno municipal y anunció que llevará el asunto hasta el Senado, según indicó su portavoz Natxo Bellido. Por parte de Vox, su concejal José Bonet tampoco se ahorró ninguna crítica hacia el bipartito. “Ustedes se dedican a hacer reuniones con los vecinos para contarles las bondades del vertedero en vez de cerrarlo. No tiene las licencias, deben clausurarlo ya” demandó.
PSOE, UP, Compromís y Vox piden al Ayuntamiento que vuelva a precintar la parcela
No habrá nuevo precinto
Desde el equipo de gobierno, el concejal Adrián Santos (Cs) se defendió asegurando que el Ayuntamiento no puede volver a precintar la finca. “El auto del juez permite a la empresa que continúe con los tratamientos. Nosotros ahora lo único que podemos hacer es mandar patrullas de Policía y levantar acta si no cumplen con las estipulaciones” señaló.
El edil de Urbanismo quiso recordar también que el tripartito “no hizo nada” para evitar los vertederos en Fontcalent, a pesar de que en 2015 se aprobó una declaración institucional al respecto, y que fue la Generalitat quien concedió los permisos pertinentes a la citada empresa.
También intervino el concejal de Limpieza, Manuel Villar (PP). “Claro que es una instalación que no debería de existir, pero lo que está pidiendo la oposición es que hagamos algo ilegal” indicó.
Finalmente la creación de la comisión para Fontcalent fue aprobada con 15 votos a favor (PSOE, UP, Compromís y Vox) y 5 abstenciones (Cs). Votaron en contra los nueve concejales del PP alegando que dicha comisión en realidad era un instrumento para cerrar el Vertedero Municipal.
La empresa asegura que es una «planta de tratamiento» y que los residuos son «valorizados y reutilizados»
Policías, vecinos y camioneros
Por lo tanto la situación continúa lejos de resolverse. Actualmente los camiones siguen llegando, ante la mirada de la Policía Local que se dedica simplemente a anotar las matrículas y levantar acta. “Suele venir una patrulla durante una o dos horas al día. Deberían estar mañana y tarde, porque los camiones no dejan de arrojar escombros a todas horas. Ahora, por ejemplo, están trayendo todas las cámaras frigoríficas de la fábrica de Jamones Pelegrín que fue cerrada en San Vicente” nos indica Encarna.
Cuando los policías se retiran algunos vecinos se dedican a grabar por su cuenta a los camiones, lo cual en ocasiones está ocasionando ciertas situaciones tensas con los conductores.
Desde este periódico hemos querido entrevistar también al edil de Urbanismo sobre este tema, pero desde su concejalía nos han indicado que prefieren no realizar declaraciones públicas mientras que el tema siga en los juzgados. Cabe recordar que sigue todavía en Fiscalía.
Por otra parte también nos hemos puesto en contacto con la empresa ‘Llegando a la Cima’ cuyo gerente es José Antonio Mataix. En su respuesta vía email nos aseguran que la montaña de basura no se trata de una escombrera, sino de una “planta de tratamiento de residuos de obra y demolición”.
Según su versión, lo que en realidad se hace en esta parcela es “recepcionar los residuos para valorizarlos y convertirlos en material reutilizable en otras obras, es decir, darles una segunda vida, como marcan las necesidades actuales y las normativas en relación al cuidado del medio ambiente y el fomento de la economía circular”.
Los vecinos temen que una gota fría arrastre toda la basura acumulada hacia sus casas
Peligro para los residentes
La montaña de residuos está ubicada en un barranco, por el Camino del Francés. Apenas a unos pocos metros hay varias casas residenciales. También los corrales donde pastan las ovejas y cabras de Encarna. Los vecinos temen que en caso de producirse lluvias torrenciales, el agua pueda arrastrar los escombros hacia sus propiedades ocasionando un gran desastre.
“La basura sigue creciendo y el peligro de un gran derrumbe es cada vez mayor. Aquí estamos hablando de que se están poniendo en riesgo incluso vidas humanas” declaró Agustín Pérez en el pleno municipal.
La Ordenanza Municipal de Limpieza dictamina que “el Ayuntamiento podrá asumir la limpieza de los espacios de titularidad privada que se encuentren abiertos y destinados al uso público si ello está justificado por motivos sociales”. Este procedimiento se denomina ‘ejecución subsidiaria’ y en tal caso probablemente el Consistorio podría reclamarle el coste económico a la empresa.
Fontcalent ya ha sufrido dos grandes incendios en los últimos meses
Incendios sin resolver
En otro orden de cosas, la partida de Fontcalent ya ha sufrido dos graves incendios en lo que llevamos de otoño. El primero ocurrió durante la madrugada del 22 de septiembre en la sierra, arrasando buena parte de sus árboles. El segundo fue el 21 de octubre en el Vertedero Municipal. Las autoridades todavía no han aclarado el origen de ninguno de ellos.
La plataforma vecinal Salvem Fontcalent criticó duramente el funcionamiento del vertedero municipal, gestionado por UTE Alicante, a raíz de este segundo incendio. “Este suceso refleja la mala gestión de una instalación con porcentajes ridículos de recuperación de residuos y en la que se siguen enterrando masivamente los residuos tanto de la ciudad como de otras comarcas”, apuntaron en un comunicado culpabilizando tanto al Ayuntamiento como a la Generalitat.
“Desgraciadamente nos estamos cargando todo el valle de Fontcalent. La montaña Huevo Kinder no es ni mucho menos el primer caso de vertederos ilegales o malas prácticas que hemos sufrido. Hace ya años que empresas de toda la provincia vienen hasta aquí para descargar residuos donde les da la gana. Es triste, pero al final nos hemos convertido en el valle de la mierda de Alicante” sentencia Encarna Navarro.