Entrevista > Carlos González / Alcalde de Elche (Elche, 10-marzo-1965)
Tras un año para olvidar iniciamos otro que todo el mundo afronta con esperanzas, aun sabedores de que todavía queda para que la normalidad vuelva a nuestras calles, fiestas, colegios…
El Alcalde de la ciudad, Carlos González, ha afrontado el difícil reto para cualquier gobernante de dirigir en tiempos de pandemia, algo para lo que nadie estaba preparado.
El 2020 ha sido muy duro y 2021, que se esperaba con ilusión, ha comenzado aún peor. ¿Cómo ves las medidas adoptadas hasta ahora?
La situación de Elche en este momento indudablemente es preocupante, como lo es en el conjunto de la Comunidad Valenciana y España. Estamos en un momento en el que la pandemia está castigando severamente a la población y eso tiene consecuencias directas, tanto en la incidencia acumulada del número de contagios que se producen como en los ingresos en la UCI y en planta del hospital.
Ahora tenemos una presión hospitalaria demasiado alta y preocupante con la perspectiva que hay por delante. La tercera ola todavía tiene recorrido y seguirá generando positivos, ingresos y situaciones difíciles.
«El objetivo es que cuando llegue el verano estemos vacunados el 70% de la población»
Por ser un tema de máxima actualidad y por ese querer normalizar las cosas de cara al verano, ¿cómo ves el tema de las vacunaciones? ¿Se va a llegar a tiempo?
Veo que la Comunidad Valenciana se ha puesto las pilas, y está entre las primeras comunidades en número de vacunaciones. Esto es una buena noticia, pues significa que el sistema sanitario valenciano está dando respuesta al desafío que supone tener que vacunar a cinco millones de valencianos.
El objetivo es que cuando llegue el verano estemos vacunados el 70% de la población. Creo que tanto el president, la consellera como el propio sistema sanitario van a poner toda la carne en el asador para que así sea. Esa es la clave de 2021 para el retorno a la normalidad, o a una situación lo más parecido posible a la antigua normalidad. La otra clave es nuestra propia responsabilidad individual.
Por tanto yo veo 2021 con esperanza, que se sustenta en el proceso de vacunaciones y en la respuesta que demos los ciudadanos.
¿Cómo ves esa nueva normalidad en Elche, suponiendo que la alcancemos con esta vacunación de grupo y paralización del virus? ¿Sin mascarillas, con fiestas…?
Hemos llamado a 2021 como el año de la esperanza y del retorno paulatino a la situación anterior a marzo de 2020. Evidentemente será de una forma suave, poco a poco iremos volviendo a cómo vivíamos. Pero desde luego 2021 es un año de transición en el que vamos a seguir padeciendo las consecuencias de la emergencia sanitaria.
«Entiendo que haya sectores más reivindicativos que otros, pero las administraciones públicas tenemos que distribuir los recursos con equidad»
La hostelería está sufriendo muchísimo, aunque no más que otros sectores. ¿Crees que son justas las manifestaciones que se están organizando contra el Ayuntamiento y sus medidas?
Creo que todos los sectores económicos están padeciendo la caída de la demanda asociada a la crisis sanitaria, unos más y otros menos. El calzado ha disminuido un 32% sus exportaciones, por poner una cifra concreta de un sector estratégico para la ciudad. El turismo ha reducido su facturación en un 95%.
Los gobiernos de todas las administraciones; ya sea estatal, autonómica o local; estamos poniendo cada uno de nuestra parte para contribuir a ayudar a estos sectores económicos. La hostelería es un sector que también está sufriendo, indudablemente, pues tuvieron que bajar las persianas cuando se decretó el confinamiento y han sufrido las restricciones que se han ido produciendo hasta este mismo momento.
Entiendo que haya sectores más reivindicativos que otros, pero en cualquier caso lo que tenemos que hacer las administraciones públicas es analizar la situación e intentar distribuir los recursos públicos con equidad hacia todos los que padecen la crisis.
«Todos debemos tener confianza en las administraciones y entender el momento difícil que también está atravesando el sector público»
Hay muchas quejas respecto a la falta de poder contactar con las administraciones. ¿Cómo se puede gestionar todo esto para que el ciudadano no se sienta desatendido?
Creo que la Administración Pública en general ha sufrido en sus carnes las consecuencias de la crisis sanitaria. Eso ha supuesto, por una parte, que durante meses haya tenido que cerrar su actividad o disminuirla drásticamente, así como retrasos, acumulación de trabajo y dificultades para retornar a la normalidad como consecuencia de las medidas restrictivas.
Todo esto ha provocado colas en las puertas de las administraciones, el colapso de las páginas web y de los teléfonos de atención, etc. Poco a poco se está haciendo un esfuerzo por remontar la situación. Yo confío en la profesionalidad de todos los funcionarios.
Estoy convencido de que se está haciendo un esfuerzo más allá de lo exigible, sobre todo en el ámbito sanitario. Todos debemos tener confianza en las administraciones públicas y entender el momento difícil que estamos atravesando todos, también el sector público.
Todos los ayuntamientos habéis sufrido un sobrecoste que ni mucho menos estaba previsto en los presupuestos. En el caso de Elche, ¿qué supondrá esto? ¿Habrá una compensación de todos estos sobrecostes que han asumido los ayuntamientos y que a veces ni siquiera les correspondía?
Hemos tenido que hacer un esfuerzo tanto de gestión como económico. Los presupuestos de 2020 efectivamente no estaban pensados para hacer frente a una crisis sanitaria, económica y social. Por eso tuvimos que modificar de forma muy sustancial el presupuesto municipal y adaptarlo a las exigencias del momento.
Eso ha supuesto que destinemos más de doce millones de euros a la crisis. Y dudo que vaya a haber ningún tipo de compensación por parte de ninguna administración, porque tanto la nacional como la autonómica también se han tenido que volcar en esta crisis.
En definitiva, creo que es muy difícil recuperar el esfuerzo inversor realizado. De todas formas no creo que lo importante sea eso, sino que los recursos que se han movilizado hayan servido. Me refiero tanto para las familias que tenían auténticas necesidades y estaban en riesgo de exclusión social, como para los negocios que han visto reducir drásticamente sus ingresos, los autónomos, micropymes, etc. La mejor forma de recuperarlo es que la ciudad y las familias ilicitanas recuperen su normalidad.
Con todo el sobreesfuerzo del Ayuntamiento en la limpieza de las calles, las escuelas… ¿Crees que se ha puesto más en valor la acción municipal por parte del ciudadano o que es quien se ha llevado todo el malestar por la situación?
Bueno, creo que existe un gran malestar y desconcierto como consecuencia de que estamos viviendo una situación inédita que algunos definen como la más grave desde la Segunda Guerra Mundial. Yo desde luego no entro en esa comparación, porque estoy convencido que una guerra es mucho más grave que esto, pero sí estamos padeciendo una de las situaciones más complejas de gestionar. Es evidente que todo esto genera incertidumbre y malestar.
Aún con todo eso, estoy convencido de que muchos ciudadanos han sabido ver el valor de lo público en una crisis. Porque en los momentos en que todo se desmorona, las instituciones y los servicios públicos han sido herramientas fundamentales para normalizar la convivencia, atender nuestra salud y proporcionar servicios esenciales en nuestra vida cotidiana.
La crisis sanitaria ha puesto en valor los servicios públicos de toda naturaleza y de todas las administraciones. Desde el ejército hasta la limpieza. Cuando todos estábamos confinados pudimos ver cómo los servidores públicos de la limpieza o los sanitarios estaban ahí trabajando.
«A la residencia de Altabix hay que exigirle un servicio de calidad o proceder al rescate de la concesión»
¿Qué está pasando en la residencia de Altabix?
Dos cosas. Primero que hay una deficiente gestión por parte de la empresa concesionaria, que viene desde antes de la pandemia, y segundo que ahora se ha agravado provocando una crisis intensa como la que se está viviendo.
Por fortuna se están tomando decisiones acertadas desde las consellerias de Políticas Inclusivas y Sanidad. Creo que estamos en un momento en el que todavía se puede reconducir la situación sin vivir momentos dramáticos como los ocurridos en residencias de otros municipios. Deseo que esto sea así.
Como mensaje de futuro, pido a Políticas Inclusivas que sea extraordinariamente exigente con la concesionaria para que se preste un servicio público de calidad a los residentes o que, de lo contrario, proceda al rescate de la concesión.
Se ha empezado una vez más con el presupuesto aprobado en tiempo y forma. Tras todos los cambios que tuvo el de 2020, ¿cómo se plantea el de este año?
Los presupuestos, en buena medida, tienen un hilo conductor que son las políticas e iniciativas que el gobierno municipal va a ir desarrollando a lo largo de los cuatro años. Hay un gran denominador común entre los de 2020 y 2021, así como tendrá un gran reflejo en 2022.
¿Eso qué significa? Pues que este presupuesto está pensado en la crisis sanitaria y económica, lo cual es lógico ya que nace en plena efervescencia de la pandemia y por tanto contempla recursos para afrontarla. Pero al final también responde a las mismas prioridades que el anterior y el siguiente.
Mejora equipamientos colectivos culturales y deportivos, moderniza el espacio público con inversión hacia asfalto y caminos, impulsa la actividad económica y empleo, apuesta por la política social para que nadie quede atrás y moderniza los servicios municipales como la limpieza y el transporte a las pedanías.
Éstos son los cinco grandes ejes sobre los que se mueve este equipo de gobierno. Un año nos toca el centro social de San Antón, otro año las instalaciones deportivas de Torrellano, de L’Altet, La Hoya, etc. Todo esto se desarrolla a lo largo de cuatro años.
«Iniciativas como el Campus Tecnológico o el Parque Empresarial buscan impulsar la actividad económica y el empleo»
E imagino que también partidas pensando en el empleo…
Un apartado fundamental es el impulso de la actividad económica y el empleo, con iniciativas como el Campus Tecnológico o el Parque Empresarial que representan inversión en sí mismo, pero también la capacidad de atraer inversión privada que repercuta en una mayor actividad en la ciudad.
¿Cómo puede ser que en la Diputación sí que se lleguen a acuerdos con la oposición y aquí en el Ayuntamiento de Elche no se consiga?
Muy sencillo. La actitud del PSOE en la Comunidad Valenciana es de colaboración con los gobiernos. De hecho, es una directriz del president Puig, quien en plena pandemia pidió a los grupos municipales socialistas que están en la oposición responsabilidad con los gobiernos.
Por eso en la Diputación el grupo socialista tiene una actitud responsable de no obstaculizar ni crispar. Sin embargo, en otros ayuntamientos no se dan acuerdos porque las oposiciones mantienen una actitud de crispación que yo solo puedo calificar de irresponsable en un momento como éste.
¿Qué se ha quedado atrás en 2020 en cuanto a inversión?
2020 ha sido un año difícil en el que evidentemente tuvimos que poner la prioridad en la crisis sanitaria, lo cual nos ha obligado a hacer un esfuerzo extraordinario para que las partidas establecidas previamente no quedaran rezagadas.
El nivel de gestión presupuestaria total es del 94%. No obstante muchas veces la ejecución se focaliza en el capítulo 6, que es el de las inversiones, y te diré que como media en España se ha ejecutado un 30-35% en la administración local. Nosotros hemos acabado 2020 con obra, entre adjudicada y ejecutada, por encima del 40%. Por tanto hemos tenido una ejecución alta.
«La peatonalización se ha realizado en un tiempo récord, generando las mínimas molestias posibles»
La peatonalización, junto al Mercado Central, son dos grandes ‘deudas’ que tiene desde hace años la ciudad de Elche. La primera se ha realizado y además en año de pandemia.
Ha llegado en un muy bien momento. Porque en tiempos de crisis, como este verano en el que no hemos tenido ni fiestas ni casi actividad social, era el momento de emprender la obra.
Se ha realizado en un tiempo récord, generando las mínimas molestias posibles. El resultado, a tenor de lo que los propios ciudadanos dicen, es que la peatonalización de la Corredera y la plaza de Baix ha supuesto una profunda transformación urbana que ha mejorado sustancialmente la imagen del centro y que ha supuesto un factor de atracción local y de otros municipios.
En estas navidades hemos visto multitud de ciudadanos tanto del municipio urbano, de las pedanías, como de otras localidades, que vinieron atraídos por una obra emblemática que ha llamado la atención por su calidad y capacidad de transformación.
Una de las inversiones que está prevista es el Palacio de Congresos. ¿En qué situación se encuentra este proyecto, sobre todo respecto a su ubicación?
Voy a ser claro y directo. El presidente de la Diputación ha puesto el freno al Palacio de Congresos. Nosotros queríamos acelerarlo y presentamos un calendario de trabajo para posibilitar que pudieran comenzar las obras en 2022. Pero el interés por parte del presidente de la Diputación de realizar informes, a mi juicio innecesarios, ha supuesto un freno y un jarro de agua fría para el proyecto.
¿Las inversiones de la Diputación en la ciudad de Elche están compensadas?
Yo tengo un discurso muy claro respecto a este tema. En los últimos quince años la Diputación ha invertido más de 120 millones de euros en Alicante ciudad para grandes actuaciones. De hecho solamente con dos se llega a 100 millones de euros: El palacio provincial de congresos y el MARQ.
Elche no ha recibido ni el 10% de esta inversión durante estos años. Por eso seguimos reivindicando con fuerza y convicción que la Diputación lleve a cabo una gran actuación, para compensar este agravio comparativo que refleja toda esta inversión en Alicante que no ha tenido su repercusión en Elche. Lo que nos llega desde hace unos 15 o 20 años es desproporcionalmente bajo.
Hablando de inversiones. Una que por fin parece ser realidad es la llegada del AVE a Matola, ¿alguna otra infraestructura que podamos esperar en este 2021?
Espero dos cosas e incluso si me apuras tres. Una es la conexión de Elche con Madrid vía AVE, que es una magnífica noticia porque supone un impulso turístico cuando se pueda reactivar, así como una mejora de la competitividad de las empresas.
Por otra parte, espero que se pueda licitar la obra de la circunvalación sur. Y, en tercer lugar, que se siga avanzando en la modernización de la carretera a Santa Pola, que es otra infraestructura fundamental para mejorar la conexión de nuestro entorno.
«Somos una de las ciudades más seguras de España»
Ha habido algunas acusaciones de exceso de violencia y delitos en Elche. Con las cifras en la mano, ¿cómo está el tema de la violencia callejera? ¿y la de género? ¿Han aumentado con la pandemia?
Vamos a separar la violencia de género con la delincuencia. Se da una paradoja con la delincuencia común: Mientras que los delitos han caído considerablemente durante 2020 en toda España y en nuestra ciudad en concreto más de un 22%, el último mes hubo un repunte de robos en el distrito 7 y pedanías. Esto ha generado una alarma social en el campo que realmente no se corresponde con las estadísticas.
Elche es una de las ciudades más seguras de España. De hecho si nos vamos a las cifras, veremos cómo somos una de las que tiene un menor índice de delitos. Se puede comprobar. Eso no quiere decir, por supuesto, que no se produzcan algunos.
En cuanto a la violencia de género, es una lacra insoportable que se sigue produciendo. Afortunadamente en 2020 no ha habido ninguna víctima mortal en nuestra ciudad, aunque por supuesto sigue ocurriendo. Estoy convencido de que la Policía Nacional y Local hacen todo el esfuerzo para prevenir y atajar esta lacra.
«Con lo que se pide en la nueva contrata tenemos como objetivo que en 2023 Elche sea una de las diez ciudades más limpias de España»
Uno de los mayores capítulos de gastos en cualquier ayuntamiento es la limpieza, y además es de lo que más percibe el ciudadano. El 1 de mayo entra en vigor una nueva contrata. En líneas muy generales, ¿qué va a suponer para la ciudad?
Primero, he de decir que hemos hecho un gran esfuerzo por hacer un buen pliego de condiciones para mejorar un servicio que es fundamental para la ciudad y que los ciudadanos valoramos muchísimo. A partir de ahí, hemos llevado a cabo un procedimiento ejemplar dando participación a los colectivos, los trabajadores, la oposición y las empresas. Siempre todo marcado por la transparencia y la participación.
Finalmente, creo que hemos adjudicado el servicio a la mejor de las ofertas y el resultado de este proceso será que tendremos un servicio del siglo XXI muy reforzado en medios mecánicos y humanos. Todo esto debe traducirse en el objetivo de que en 2023 Elche sea una de las diez ciudades más limpias de España. Porque si estamos pagando un servicio de primera, también debemos tener una limpieza de primera. Así se lo he exigido a la empresa.
¿Nos puedes concretar alguno de esos beneficios?
Por ejemplo, vamos a pasar del barrido en cinco días a la semana a los siete días. También vamos a sustituir todos los contenedores defectuosos del Campo de Elche, que ahora están auténticamente destrozados. Además vamos a incluir 800 contenedores más de recogida selectiva, 400 de papel y 400 de envases. Igualmente se sustituirán casi la totalidad del parque de contenedores por otros con más capacidad y accesibilidad.
Por otra parte, esta contrata será una palanca importante para impulsar a Elche como capital verde europea, reduciendo las emisiones. Por eso todos los equipos serán eco, eléctricos o a gas natural. Así que ambientalmente supondrá un avance sustancial.
De igual forma se va a proceder con un tratamiento de las podas, un problema importante del campo. En una ciudad seca como la nuestra, en la que llueve poco, potenciaremos más el baldeo y se incorpora la limpieza de parques y jardines. En general se afrontan todos los problemas o deficiencias que tiene la ciudad, y es un servicio mucho más verde.
«El aumento de población es un indicador de calidad de vida, bienestar y prosperidad»
Desde 2015 la ciudad ha ganado unos 7.000 habitantes de los cuales 2.248 el año pasado. ¿Qué supone para Elche que haya más empadronamiento?
En un entorno en el que muchas ciudades medias y grandes pierden población, la nuestra la gana con más fuerza. Esto es un indicador de calidad de vida, bienestar y prosperidad. Mucha gente vino a Elche en los años 50, 60 y 70 porque éste era un sitio donde se podía buscar la vida. Muchos de nuestros padres llegaron buscando una oportunidad.
Esto sigue pasando; esta gente viene desde otras comunidades porque puede encontrar su proyecto de vida en la ciudad. Ésta es nuestra gran fortaleza.
Detrás de estas cifras de crecimiento está que Elche es una ciudad abierta, pujante, integradora, en la que prima la convivencia y en la que se vive razonablemente bien. De hecho, cuando yo llegué a alcalde éramos la vigésima ciudad de España y ahora somos la decimonovena pues hemos adelantado a Granada, además de que estamos por delante de unas 30 capitales de provincia.