Son unos parásitos visibles a simple vista que pueden llegar a medir un par de centímetros cuando han ingerido sangre. Estos parásitos “acechan” desde el suelo, sobre todo desde la vegetación, para poder acceder hasta la piel de sus víctimas. Una vez se han alimentado, se sueltan de los animales y regresan al suelo, para transformarse en la siguiente fase del ciclo o para poner los huevos. Después vuelven a por otra víctima pudiendo así transmitir las enfermedades de un animal a otro.
Los peligros de las garrapatas
Estos parásitos no sólo son desagradables, también son peligrosos. Son capaces de transmitir enfermedades mediante su picadura e incluso una serie innumerable de problemas sanitarios. Las garrapatas pueden provocar en sus víctimas:
- Lesiones en la piel (irritación, picores, heridas…).
- Infecciones de piel y generales.
- Síntomas nerviosos y parálisis
- Debilidad.
- Anemia grave.
¿Qué transmiten?
Existen muchas enfermedades que estos parásitos pueden transmitir tanto a mascotas como a personas a través de su picadura. De entre las enfermedades más importantes se destacan dos: la ehrlichiosis y la babesiosis. Estas dos son enfermedades muy graves que afectan mayoritariamente al perro y pueden producirle la muerte. La babesiosis es característica de las zonas con clima húmedo.
Ambas enfermedades se pueden tratar y se llega a una curación definitiva. Es importante detectar la enfermedad lo antes posible para que su pronóstico sea más favorable.
Precaución y prevención
Para anticiparte a la picadura de la garrapata y a las enfermedades que transmiten:
- Utiliza productos repelentes contra garrapatas. Tu veterinario te recomendará los productos más adecuados.
- Revisa la piel de tu mascota después de los paseos por zonas con vegetación, para detectar la presencia de garrapatas.
Si detectas algo raro en tu mascota o si observas garrapatas enganchadas en su piel consulta a tu veterinario.
Realizar un análisis de sangre anualmente ayuda a descartar estas enfermedades antes de que se manifiesten los síntomas en los animales y haya avanzado la enfermedad.
Revisa muy bien a tu mascota después de un paseo por las zonas verdes: las garrapatas se pueden encontrar en cualquier parte del cuerpo. Examina con detenimiento las zonas donde se suelen localizar con más frecuencia: alrededor de los ojos, en las orejas, entre los dedos y en los pliegues de piel del abdomen o alrededor del ano. Conviene que si observas varias garrapatas en tu mascota visites al veterinario para que te enseñe a extraerlas correctamente y hacerle una revisión general para prevenir estas enfermedades.
Hay que arrancarlas adecuadamente sin que ninguna parte de su cuerpo quede enganchada en la piel, porque, si no, se puede infectar la herida provocada por el parásito.
¿Cómo saber si mi perro está infectado?
El único diagnóstico correcto para confirmar que tu perro está enfermo se realiza con un examen clínico completo y un análisis de sangre. Como propietario, debes sospechar estas enfermedades y llevarlo al veterinario si observas en tu mascota:
- Falta de vitalidad.
- Fiebre alta.
- Vómitos.
- Pérdida de apetito.
- Color pálido.
- Orina de color oscuro.
Si detectas cualquiera de estos síntomas solicita una consulta veterinaria cuanto antes.