Es sabido en todo el mundo que el 25 de diciembre los cristianos celebran la Navidad. En este día se honra el nacimiento de Cristo en un pesebre y la posterior visita de los pastores y gente del pueblo al portal de Belén donde dio a luz la Virgen María. Pero, ¿nació realmente Jesús ese día de invierno?
No fue en invierno
No es preciso saberlo, puesto que no dejan ningún tipo de pista en la Biblia. Lo que sí tenemos son algunos escritos en los Evangelios, donde se dice que Jesús nació en otra estación. Esto se debe a que los Apóstoles hablan de los pastores que velaban al niño y hacían pastar al rebaño. Pero en invierno, debido a las bajas temperaturas que hay en Palestina, era improbable que los animales estuviesen en el campo pastando.
Además, no podría haber estado inscrito en el censo romano, puesto que el mal clima dificultaba a los padres desplazarse a las ciudades y tampoco se realizaban documentos. Por otro lado, suponía un elevado coste de impuestos y María y José no podían pagar tal cantidad de dinero.
Solsticio de invierno
Ahora que ya conocemos parte de la historia, conviene saber que hasta el siglo IV se celebraba el Nacimiento de Jesús el día de la Epifanía, 6 de enero, y también su Bautismo por desconocimiento de la fecha exacta.
Posteriormente, cuando el Papa Julio I ascendió en la Iglesia, quiso cristianizar las Saturnales, la fiesta pagana que se hacía en Roma para celebrar el solsticio de invierno.