Antonio Galvañ / Director de empresa gestora de granjas marinas
La constante, y a veces descontrolada, explotación de mares y océanos no nos garantiza poder disponer de una provisión suficiente de especies en un futuro no muy lejano. Según un informe de la Organización de las Naciones Unidas para la alimentación (FAO), la pesca y la acuicultura han de desempeñar un papel preponderante en el logro de una seguridad alimentaria y nutricional.
Pescado de cultivo
En España se consumen más de dos mil toneladas al año de pescado de cultivo procedente de las aguas de la provincia de Alicante, la mayor parte de granjas marinas de Guardamar; aguas templadas a salvo de corrientes.
Cada vez consumimos más pescado de cultivo, principalmente porque resulta más económico y accesible que el pescado salvaje, pero con lo que no puede competir el pez de cultivo es con el sabor, ya que mientras en las granjas marinas se alimentan de pienso, el pez salvaje se nutre de forma natural del mar.
«La elaboración del pienso está sometido a rigurosos controles para evitar la presencia de sustancias nocivas»
Base de la acuicultura
La acuicultura se basa en la instalación de jaulas vivero en mar abierto en las que se introducen alevines. En el caso de nuestra costa principalmente son de dorada y lubina, a los que durante el ciclo de producción, que está en torno a los 16/18 meses, se les aporta pienso alimenticio y se realiza un control sanitario para finalmente ser pescados y distribuidos en el mercado. El número de jaulas va a ser incrementado en el 2019 y se espera que la producción ascienda a ocho millones de peces al año.
En el mercado nacional las tallas más demandadas son el pescado de ración, entre 400 y 600 gramos por pieza, y tallas superiores que llegan hasta 1 kg por pieza.
¿Qué especies crían ustedes y donde es distribuido el pescado?
En estos momentos criamos dorada y lubina. Nuestra producción actual es de unas 1.700 toneladas de pescado fresco al año, estando previsto crecer a 2.700 toneladas a partir de 2019.
Distribuimos nuestro pescado en toda España, también en Portugal, Francia e Italia, directamente a través de grandes superficies, supermercados o bien a mayoristas.
El pez de piscifactoría no corre riesgos de tragar plásticos
¿El pez de piscifactoría no corre riesgos de tragar plásticos?
No, en muy contadas ocasiones puede tragar algún plástico que haya llegado a las jaulas por efecto del viento desde la costa, pero es muy raro. Y en cuanto a los microplásticos disueltos, al no ser un organismo filtrador, la incidencia es mínima en ellos.
¿Y mercurio?
Tampoco, ya que al no estar dentro de la cadena trófica salvaje no acumula dicho metal; además, las materias primas utilizadas para la elaboración del pienso están sometidas a rigurosos controles para evitar cualquier tipo de contaminación o presencia de sustancias nocivas.
¿Podría ser el futuro para asegurar la supervivencia de algunas especies en peligro de extinción y mantener así el equilibrio natural?
Desde luego que si, ya que debido al aumento del consumo de pescado a nivel mundial y la merma en los caladeros tradicionales y sus capturas, es una opción muy válida para seguir abasteciendo a la gente de un pescado de calidad a un precio razonable y disminuir la presión sobre otras especies más sensibles, permitiendo así un equilibrio más estable.
Además, debo destacar que el futuro de la acuicultura se está enfocando hacia la sostenibilidad de la actividad en todos los aspectos, es decir, que se están haciendo esfuerzos por disminuir la huella de carbono y hacer peces más ecológicos.
¿La alimentación garantiza todos los nutrientes necesarios?
Tienen los mismos y se van ajustando sus proporciones en función de la temperatura y el peso medio de los peces, así siempre se favorece su crecimiento y buen estado de salud, a la vez que se mantienen sus propiedades organolépticas para el cliente.
«Solo los paladares más cualificados aprecian la diferencia de sabor, con respecto a los peces salvajes, en una cata a ciegas»
¿Es precisamente la alimentación lo que hace que el sabor no sea exactamente el mismo?
Si, es la alimentación la que diferencia el sabor de los peces de cultivo, debido a lo que comentábamos antes, ya que los peces salvajes necesitan una alimentación más variada para conseguir los aportes necesarios para su crecimiento.
Aunque debo mencionar que, a pesar del comentario extendido de dicha diferencia en el sabor, solo los paladares más cualificados aprecian dicha diferencia en una cata a ciegas.
¿Qué condiciones especiales tiene el Mediterráneo para este tipo de criadero de peces?
Fundamentalmente que, como sabemos, es un mar de temperaturas medias y cálidas y al ser un mar de pequeño tamaño, con una profundidad media no muy alta y muy protegido por las costas que lo rodean, no presenta grandes oleajes. Además, en esta zona concretamente tampoco tenemos grandes corrientes que nos puedan afectar demasiado.