El drama de los más de 500.000 afectados por iDental sigue todavía bastante lejos de terminar en buen puerto. Alicante es una de las provincias con más víctimas de esta macroestafa, pues esta ya desaparecida compañía tenía aquí dos importantes clínicas, una en la capital y otra en Elche.
Todo este espinoso asunto nos ha llevado a preguntarnos cómo funciona el sector odontológico en España, si está bien regulado por la ley, cuántos tratamientos dentales cubre la Seguridad Social y si toda esta lamentable situación se podría haber evitado.
En la provincia de Alicante hay más de 800 clínicas dentales
El boom de la odontología
iDental se anunciaba como una clínica ‘low cost’, dirigiendo su publicidad especialmente hacia aquellas personas de clase media-baja que difícilmente podían permitirse los caros tratamientos ofertados por las clínicas privadas tradicionales. Los precios normales de una prótesis, unos brackets, una ortodoncia o un puente dental pueden ascender a varios miles de euros y, a diferencia de un blanqueamiento dental, no suelen obedecer a razones meramente estéticas sino que son intervenciones necesarias para gozar de una buena salud.
Dado que la Seguridad Social tan solo cubre la extracción de piezas y varios procesos agudos, como infecciones o golpes en la dentadura, durante los años 90 proliferaron miles de nuevas clínicas privadas por toda España. Solo en la provincia de Alicante hay unos 800 establecimientos actualmente.
“Esto no ocurre con ninguna otra especialidad médica. Cuando se creó la actual cartera sanitaria, los políticos de entonces no supieron prever esta situación. Hasta cierto punto es lógico, no había la preocupación tan grande que afortunadamente hoy tenemos por la salud de nuestra boca” nos explica María Victoria Garrido, actual directora general de Alta Inspección Sanitaria de la Conselleria de Sanidad, en declaraciones exclusivas a este periódico.
De hecho, Garrido recuerda que hasta hace apenas 20 años la odontología ni siquiera estaba académicamente considerada como una carrera propia, sino como una especialidad más de la Medicina.
«Un dentista puede ganar 900 euros por una hora y media de trabajo. Este sector ha hinchado los precios a mansalva» G. Reig (afectados por iDental)
Tratamientos muy caros
“Aquí se ha producido una burbuja tremenda de unos años a esta parte. Los dentistas han ido hinchando los precios hasta límites vergonzosos. En cualquier clínica privada nos están cobrando 1.000 euros por un implante. ¿Sabes cuánto cuesta realmente? Poco más de 50 euros. Estamos hablando de 900 euros de beneficio por hora y media de trabajo” nos apunta Guadalupe Reig, portavoz de los la Agrupación de Afectados por iDental (ADAFI) en la provincia de Alicante.
“En el norte de Europa se suelen cubrir un porcentaje mucho mayor de tratamientos dentales, pero el sistema sanitario español está integrado en los países de ‘Odontología Sur’ como Portugal, Italia o Grecia. Aquí al ciudadano le toca pagar casi todo de su bolsillo” expone Óscar Castro, presidente del Consejo General de Colegios de Dentistas en España.
Se supone que la extracción de piezas debe ser un tratamiento de último recurso, al menos así lo suelen definir los profesionales odontológicos. Sin embargo, esto es prácticamente lo único gratuito en nuestro país.
“Si vas a la Seguridad Social porque te duele una muela, todo su tratamiento es darte un antibiótico y quitártela siete días después. No intentan salvártela, y ni mucho menos ponerte piezas nuevas. Así que al final las personas de pocos ingresos nos vemos abocados a buscar clínicas low cost” explica Reig.
Debido a los altos precios de los tratamientos odontológicos muchas personas acudieron a empresas tan baratas como desastrosas
Las empresas low cost
Una vez llegados a estas clínicas nos encontramos con una regulación que tanto los colegios de odontólogos como los afectados coinciden en que es “muy deficiente”. Aquí es donde aparecen empresas como Vitaldent o iDental, que ofrecen precios muy por debajo del mercado y terminan recibiendo aluviones de demandas por tratamientos defectuosos o mala praxis.
“El estado permite irresponsablemente que empresas ajenas a la salud ejerzan la odontología, lo que siempre suele acabar en desastre. Estas mercantiles no están bajo el control de los colegios profesionales, así que se lo pueden saltar y hacer estas barbaridades” apunta Castro.
El presidente del Consejo Odontológico añade que el gobierno también debería de regular mejor la publicidad. “Les hacen ofertas engañosas a la gente, yo incluso he visto regalar smartphones o hamburguesas por un tratamiento dental. La prestación sanitaria siempre queda en segundo plano”.
“Al estado se le ha escapado totalmente de las manos lo de las clínicas dentales” coincide Guadalupe Reig. “Aquí cualquiera puede montar una clínica, sea profesional odontólogo o no. Luego ocurre lo que ocurre”.
Poca regulación
Preguntando a la Directora General de la Conselleria de Sanidad está de acuerdo con el problema, pero cree que tiene una difícil solución. “Es cierto que cualquier persona, incluso aunque no sea médico, puede montar una mercantil que se dedique a la odontología. Pero cambiar esto por ley es bastante complicado, porque choca contra los principios del libre mercado y competencia. Yo creo que la Unión Europea nos lo tumbaría”.
De hecho, en las otras ramas de la Medicina la legislación española tampoco exige que una empresa sanitaria privada esté regentada necesariamente por un médico licenciado. Tan solo en el campo de la Farmacéutica se obliga a que el dueño de una farmacia sea un profesional del sector.
No obstante, Garrido nos asegura que la Conselleria está preparando un decreto para regular mejor la publicidad sanitaria. “Queremos llevarlo pronto a Les Corts y esperamos poder evitar en el futuro estas campañas agresivas y engañosas que tanto daño han hecho a la gente“.
Varios países europeos que tienen menos impuestos que España sí cubren la odontología en la Seguridad Social
Aumentar la cobertura sanitaria
Aunque nadie duda que la mejor y definitiva solución para prevenir todas estas macroestafas sería incorporar los tratamientos dentales a la Seguridad Social, sí que hay discrepancias sobre su viabilidad real para las arcas públicas.
Resulta que las enfermedades bucales son las dolencias más corrientes hoy en día, después de los resfriados. “El 98 por ciento de los ciudadanos tienen algún problema en la boca. Hay que entender es que nuestra sanidad pública es universal pero no gratuita, la pagamos a través de nuestras cotizaciones” apunta Óscar Castro.
Para el presidente de los odontólogos una opción mucho más factible sería aumentar las campañas de prevención. “Llevamos muchos años enfatizando a los políticos en la importancia de dar una educación dental tanto a niños como a mayores. Así es como realmente se evitan luego los problemas”.
La directora general Garrido tampoco se atreve a asegurar que la Seguridad Social pudiera asumir toda esta cobertura. “Desde luego haría falta una inversión muy potente, porque ahora mismo apenas hay cobertura sanitaria al respecto”.
Por otra parte cabe señalar que, según el último informe de la consultoría internacional PwC y el Banco Mundial, los ciudadanos españoles pagan un porcentaje de impuestos más elevado que en países como Dinamarca, Suecia o Alemania donde sí están cubiertos muchos de estos tratamientos en la Seguridad Social. De hecho, la inversión en Sanidad Pública en relación al PIB de España (6,26 %) es inferior a la danesa (8,6 %), la sueca (9,13 %) o la alemana (9,58 %); por poner algunos ejemplos.
«La cartera sanitaria se redactó en los años 80, cuando no había tanta preocupación por la salud dental como ahora» M. V. Garrido (Conselleria de Sanidad)
Situación en la Comunidad Valenciana
Desde las comunidades autonómicas se pueden hacer algunas correcciones debido a que la competencia sanitaria está descentralizada en España. Según Garrido, la Comunidad Valenciana es una de las mejores preparadas en cuento a odontología se refiere. “Aquí tenemos unidades de salud dental orientadas a niños, tanto en prevención como en tratamientos. En Madrid ahora lo están debatiendo, pero aquí ya existen hace años”.
El odontólogo Castro discrepa totalmente de esta valoración, y piensa que nuestra región es de las menos avanzadas. “En realidad aquí estamos bastante mal. No hay un plan de prevención infantil adecuado ni se está fomentando la salud dental. En el País Vasco cubren los empastes hasta los 16 años y tienen un programa realmente ejemplar de prevención y salud bucal”.
Aún con todo, los especialistas advierten que la decisión de incorporar la totalidad o gran parte de los tratamientos odontológicos a la cartera sanitaria tendría que emanar del Ministerio de Sanidad más que de un gobierno autonómico. De lo contrario, podría formarse una especie de turismo sanitario dental interno que acrecentaría todavía más las desigualdades entre comunidades autonómicas.
Futuro incierto
Volviendo al caso concreto de iDental, precisamente este pasado 25 de enero la asociación alicantina de afectados mantuvo una nueva reunión con la directora general autonómica María Victoria Garrido y la delegada territorial sanitaria en la provincia Encarna Llinares.
“Siendo realistas, la reunión no fue demasiado productiva. Teníamos muchas expectativas e ilusión de salir con compromisos y soluciones para los afectados pero no sucedió así. Al menos fueron bastante sinceros con nosotros” nos comenta Guadalupe Reig.
Según la portavoz alicantina de los afectados, desde la Conselleria les reconocieron que el sistema sanitario no está preparado para atender a tantos afectados como son todos los que pasaron por iDental. Cabe señalar que el número total oscila en torno a las 120.000 víctimas tan solo en la Comunidad Valenciana, si bien no todas precisan de tratamientos.
“Nos admitieron que ha habido fallos en los mecanismos de vigilancia y control, regulación de la publicidad y en la coordinación de las administraciones con los colegios profesionales y Consumo” apunta Reig.
Informes de daños
Desde la Conselleria nos confirman que poco pueden hacer por los afectados que quedaron con tratamientos a medias o sufrieron daños en su boca a causa de mala praxis. “Podemos ayudarles hasta donde cubre la Seguridad Social, que desgraciadamente es poco. Ahora estamos analizando los casos más graves y esperando la iniciativa del Ministerio”, nos señala María Victoria Garrido.
Recientemente la Audiencia Nacional ha dictaminado que las administraciones públicas deben facilitar medios para que cada afectado por esta macroestafa pueda ser examinado por un profesional odontólogo y reciba un informe sobre los daños sufridos, de cara a la demanda colectiva que este colectivo mantiene contra los antiguos propietarios de la empresa iDental. En la Comunidad Valenciana ya han comenzado a realizarse dichos informes.
Los afectados también llevan meses pidiendo a la Conselleria de Sanidad que les facilite sus historiales clínicos. “En la provincia de Alicante están todos dados” nos apuntan. Sin embargo, los portavoces de los afectados lo desmienten. “Es verdad que por fin nos los están pasando, pero en Alicante aún nos faltan varios” nos aseguran.
Además, cabe señalar que cuando la Conselleria accedió a las clínicas iDental a recoger dichos informes, encontró que muchos habían sido borrados o semidestruidos. “A veces solo llevan un falso resumen y una copia del crédito, así que estamos un poco igual” se lamenta Guadalupe Reig.
«Lo de iDental ha sido la versión dental del Fórum Filatélico» Ó. Castro (presidente Consejo Dentistas)
Los dentistas no se responsabilizan
Los afectados de iDental también apelan a la solidaridad de los odontólogos profesionales y les piden colaboración para arreglar sus destrozos bucales. “De momento no nos están ayudando mucho. Nos dieron una lista de voluntarios, pero la mayoría nos quieren cobrar. Somos personas de bajos ingresos que no podemos permitirnos los precios normales del mercado, y encima muchos todavía estamos pagando los créditos bancarios de nuestros tratamientos inexistentes”.
Óscar Castro defiende la postura de los colegiados. “No puede cargarse en nosotros toda la responsabilidad de esta macroestafa. Los colegios no tenemos fondos ni medios para obligar a atender a pacientes tratados en clínicas privadas” argumenta.
El presidente del Consejo Nacional de Dentistas recuerda, además, que muchas de estas clínicas low cost fueron incluso subvencionadas por las administraciones públicas como la propia Generalitat Valenciana. “Aquí se ha forrado todo el mundo. Las entidades bancarias llegaban a acuerdos con estas empresas para conceder créditos a sus pacientes. En el caso de Vitaldent, incluso el banco Santander acabó quedándose con ella cuando quebró. Esto ha sido la versión dental del Fórum Filatélico”.
Un colectivo poderoso
Actualmente varias personas vinculadas a iDental ya han sido detenidas o están siendo investigadas. No se trata solamente de los miembros de la cúpula, incluso dos informáticos se encuentran imputados por haber borrado presuntamente miles de historiales clínicos para eliminar pruebas.
Aún así, los afectados saben que se enfrentan ante un poderoso colectivo que suele ser harto difícil de pleitear. Cabe recordar que en Alicante ocurrió un caso muy sonado en 2006, cuando una niña boliviana de cinco años falleció tras pasar por la Clínica Dental Esteve.
El juez titular del juzgado de lo Penal concluyó en 2010 que dicha niña había fallecido a causa de “una actuación gravemente negligente” de los facultativos en una operación bucodental.
Sin embargo, el odontólogo y la anestesista involucrados apenas fueron condenados a un año y siete meses de prisión (según la legislación española, las condenas inferiores a dos años de cárcel no deben cumplirse si no se haya en posesión de antecedentes) y a tres años de inhabilitación profesional. Hoy en día, están habilitados para seguir ejerciendo.