Enrique Cano (Torrellano, 1976) mira a su alrededor y ve cómo todo lo que soñó hace dos décadas comienza a ser una realidad. El tsunami del fútbol femenino profesional ya es imparable en España y más pronto que tarde llegará con toda su potencia a Elche.
Mientras tanto, Cano, empleado del club, coordinador de la sección femenina y entrenador del primer equipo, lleva poniendo desde hace tres lustros los cimientos para que la entidad esté plenamente preparada para dar el salto a la élite. “Miro todo lo que está pasando en los últimos meses y veo que no estaba tan equivocado cuando aposté por esto”, señala el técnico, pionero en Elche y la provincia en la apuesta por el fútbol femenino, ante el espectacular auge mediático de este deporte en los últimos meses.
Apuesta por el fútbol femenino
“Este boom lo estoy viviendo con satisfacción y orgullo. Todos los que apostamos en su día por el fútbol femenino esperábamos que sucediera, aunque a nosotros en Elche aún nos pilla un poquito lejos”, reflexiona el técnico, quien recuerda que llegó al fútbol de mujeres por casualidad.
Era jugador del Torrellano, en Tercera, y decidió, medio en broma medio en serio, entrenar a un grupo de chicas de la localidad hasta que el equipo fue creciendo y comenzó a competir. Tras disolverse por problemas económicos, Cano retomó el proyecto, ya en Elche, hace 15 años.
120 personas y 7 equipos
Actualmente el área de fútbol femenino, que “no sección” para Cano, cuenta con 120 personas, entre jugadoras y técnicos, repartidos en siete equipos, y su presupuesto está entre los 75.000 y los 80.000 euros. El primer equipo está en Segunda, categoría que es su techo histórico, a la espera de una “apuesta” del club para dar el salto a la Liga Iberdrola, la Primera División.
Clubes de un perfil similar al Elche, como Albacete, Recreativo, Levante o Betis, ya se han atrevido a dar el paso. “Nosotros estamos poniendo los cimientos, haciendo un camino para cuando el club considere que se puede dar el salto definitivo”, afirma el responsable del área femenina.
¿Cuándo será ese momento? Cano no se atreve a poner una fecha. Admite que el primer equipo manda y lo principal es la “estabilidad del club”. “Es evidente que para ascender necesitas un salto de calidad y eso llega a través de una inversión para poder incorporar jugadoras que marquen la diferencia”, explica. De momento, el primer equipo del Elche femenino no es profesional. Solo algunas jugadoras reciben ayuda de alojamiento y manutención, algo que limita mucho “la exigencia” al equipo.
Rivalidad provincial
La provincia de Alicante, una de las de mayor potencial en número de habitantes, es un excelente caladero para el Elche, pero sin la opción de ofrecer alguna ayuda económica en los gastos de desplazamiento a las jugadoras se limitan mucho las opciones de fichar el talento emergente.
El Sporting Plaza de Argel de Alicante, pionero del fútbol femenino en la capital, es el gran rival histórico y deportivo. “Nos peleamos normalmente por las mismas jugadoras. En Murcia el Alhama ha logrado reunir a todas las jugadoras de talento, pero aquí nos hacemos la guerra entre nosotros”, asegura Cano.
«Echamos de menos un gran patrocinador, antes era casi una donación social pero ahora el fútbol femenino se ve» E. Cano
Patrocinadores
Mientras llega esa apuesta por la élite, el técnico dice estar “contento” con lo que tiene. “Estamos en el Elche, que es un gran club y con unas instalaciones deportivas y médicas de primer nivel”, ensalza Cano, quien echa de menos “la apuesta de un gran patrocinador” por el fútbol femenino. “Tenemos a Gasolinera d’Elx, que nos ayuda a cuadrar el presupuesto, que ha sido siempre el objetivo. Nuestra filosofía ha sido siempre no ser una carga para el club”, reitera.
Sin embargo, los nuevos tiempos y el impacto mediático del fútbol femenino lo convierten ahora en un producto atractivo. “Todas las marcas quieren visibilidad y ahora el fútbol femenino la tiene. Al principio se veía esto como una donación social, un acto benéfico, pero el impacto que tiene ahora es imparable y es de verdad. Hemos echado de menos un apoyo fuerte de alguien que diga: quiero ser vuestro patrocinador en la Liga Iberdrola”, subraya el entrenador.
“Hemos tenido momento de incertidumbre, como cuando subimos a categoría Nacional, pero eso ya ha pasado a la historia. En el Elche somos conscientes de que el fútbol femenino es un valor más para reforzar el club. Estamos dando pasos adelante y ojalá podamos hacer algún día una apuesta decidida a intentar el ascenso a la Liga Iberdrola”, apunta el máximo responsable del área femenina.
«Nuestra filosofía ha sido siempre no ser una carga para el club» E. Cano
Captación
La visibilidad del fútbol femenino en los últimos años ha allanado el camino a los técnicos del Elche, que sin embargo siguen realizando un exhaustivo trabajo de captación de niñas, comenzando por los colegios. Técnicos frajiverdes visitan los centros escolares para mostrarles a las niñas imágenes del Martínez Valero y de las jugadoras, y para explicarlas que jugar al fútbol no es patrimonio de ningún género.
Si desean probar, el Elche abre sus puertas a todas las niñas hasta categoría cadete. A partir de este nivel, el cuerpo técnico ya se muestra más exigente y selectivo, aunque siempre intenta “recolocar” a sus descartes en otros clubes de la ciudad, con los que mantiene unas excelentes relaciones diplomáticas. Afortunadamente, la sociedad española se va despojando de prejuicios y apenas hay padres que se oponen a que su hija le dé patadas a un balón.
“La niña que quiere jugar acaba jugando”, sentencia Cano, quien desvela que, al contrario de lo que sucede con los niños, los padres de las chicas suelen crear menos problemas. “Para ellos que la niña juegue al fútbol es un hobby más que nada. No tienen al lado a 20 personas diciéndole que su hija va a llegar a Primera”, argumenta Cano.
«Los técnicos del club visitan los colegios para captar a las niñas que quieran ser futbolistas» E. Cano
Espectadores
Otro de los aspectos, en el que el fútbol femenino está creciendo de forma exponencial, es en el de los aficionados que presencian sus partidos y en el fenómeno de los fans. “Es verdad que desde los clubes y la Federación se está alimentando dar visibilidad a las jugadoras. Ya no es raro ver a una niña con la camiseta de su jugadora favorita”, apunta el técnico ilicitano, a quien le gustaría que Elche contara con un referente nacional de primer nivel para enganchar y servir de modelo de las jóvenes de la ciudad.
“Hemos tenido algunas jugadoras importantes: Asun Martínez Salinas, internacional sub 17; Mari Ángeles Candela o Vero Parreño, pero nos falta esa figura top, el Saúl Ñíguez del fútbol femenino”, apostilla.
También la asistencia a los estadios, como ha quedado demostrado en la final de la Copa o las semifinales de la Champions, se ha disparado en los últimos tiempos. Enrique Cano reconoce que hay mucha “puerta abierta” en este crecimiento, aunque apunta que no es algo negativo “porque haces que la gente se vaya enganchando”.
“Hay otros espectáculos deportivos que son gratis y la gente no va. Me gusta que algunos clubes, como Valencia o Osasuna, hayan creado políticas económicas y precios residuales”, señala Cano, quien cree que uno de los principales atractivos del fútbol femenino es que el aficionado lo observa como un deporte “más puro y romántico”, en el que no tienen cabida los vicios del masculino.
Entrenador
Pero Enrique Cano, además de coordinar toda la estructura femenina, también se sienta en un banquillo. Asegura que manejar un vestuario de chicas es complicado “porque no suele ser homogéneo”. “Al no ser profesionales la exigencia es limitada y pueden coincidir desde niñas de 15 años a mujeres de 25. Se juntan personalidades que no tienen mucho en común y con ambiciones y objetivos distintos”, recalca el preparador de Torrellano.
Cano defiende que las mujeres futbolistas “también tienen carácter”, si bien matiza que “su juego suele ser más limpio”. “Puede haber encontronazos, pero enseguida se piden disculpas”, añade Cano.
«Me gustaría que algún día el equipo femenino fuera como el filial, con sueldos y la opción de disfrutar del estadio» E. Cano
Jugar en el Martínez Valero
Uno de los sueños de Cano es ver a su equipo femenino jugando en un Martínez Valero repleto de aficionados. Las mujeres franjiverdes ya han pisado este estadio en dos ocasiones, aunque sin la repercusión mediática de los nuevos tiempos. “Tengo envidia sana del filial. Ojalá algún día el equipo femenino pueda ser como ellos, sin grandes sueldos, pero con un aliciente económico para que la exigencia pueda ser máxima. Poder disfrutar de este estadio sería un lujo”, reflexiona el técnico.
Por último, Enrique Cano, que se mostró convencido de que España realizará “un gran papel y dará la talla” en el próximo Mundial de Francia, señaló la “contundencia en las áreas” como la gran diferencia a día de hoy entre el fútbol de hombres y el de mujeres. “Nos falta mejorar en tareas defensivas y en el remate”, admite Cano, quien pide no mirar los partidos de mujeres con los mismos ojos y prejuicios que se usan para los de hombres. “Es verdad que parece que no hay la misma intensidad, pero eso no quiere decir que no la haya, solo que es distinta”, concluye.