Ingenuo, soñador, travieso, torpe, curioso, cercano, real, auténtico. Así define Daniel Mesa a Totó El Payaso. Un ser simple, divertido y emotivo, o por lo menos, eso le dice la gente. Sus inicios fueron improvisados. En su colegio se preparó un espectáculo de clown y le dieron el papel del hermano pequeño de una familia de payasos que se llamaba… Totó.
De ahí viene su nombre y con él se quedó. Los estudios de Arte Dramático y en el Conservatorio Superior de Música le ayudaron a reconocer que no quería ser actor. 19 años después, nos cuenta el payaso en el que se ha convertido.
Totó el payaso hará un ´clownbate` de boxeo donde el público será el protagonista
La cosa va de payasos
Daniel Mesa actuará en Art al Carrer el próximo miércoles 31 de Julio a las 20:30 horas en la Glorieta. Traerá ´El Ring`, un alocado ´clownbate` de boxeo donde el público será el protagonista. Un formato de calle que hará que todo el mundo disfrute del humor y, según Totó, de lo absurdo y ridículo del ser humano. “Este año, he pedido al ayuntamiento un censo municipal. Antes del espectáculo voy a pasar lista, así que nadie puede faltar”, bromea como de costumbre.
Este payaso chicharrero es repetidor, pero en su gremio es buena señal. Hace dos años, participó en la 2º edición de Art al Carrer. “La primera visita a Santa Pola me regaló momentos muy buenos. Una plaza llena de gente, un público en media luna muy cercano y respetuoso, una dosis de clown en estado puro… ¡lo pasamos genial!”, recuerda ilusionado.
Para Totó no existen las fronteras. Desde sus islas natales lleva la nariz allá dónde sea bien recibida. “He estado en África, Portugal, China, Japón, así que… ¿por qué no en Santa Pola?” (ríe). Ha visitado muchos rincones de España pero este municipio costero está siempre en su mente, ya que es un lugar idóneo para defender el trabajo de los payasos y enseñar al público un show novedoso, fresco y de calidad.
«Santa Pola es el lugar idóneo para defender el trabajo de los payasos» D. Mesa
Nueva edición
La 4ª edición de Art al Carrer recoge espectáculos de danza, música, acrobacias, clown, magia y teatro de improvisación, cada miércoles de julio y agosto a partir de las 20:30 horas en la Glorieta y frente a la playa (avenida González Vicen).
“Se trata de sacar la cultura a la calle, que la gente disfrute de ella de forma gratuita, poder dinamizar los espacios abiertos, crear ambiente y potenciar el consumo”, explica Antonio López, animador juvenil de la concejalía de Juventud y coordinador de la campaña.
Propuestas
Este año hay una propuesta de música, dos de danza y otras dos de acrobacias, una con un mástil y la otra relacionada con frutas y verduras. También habrá teatro de improvisación, dónde el público lanza un tema que los artistas tendrán que interpretar, según el coordinador. ¡Y no hay que olvidar el clownbate!
Como siempre, Daniel está eufórico por actuar. La adrenalina recorre su cuerpo de arriba abajo. Esperemos que haya un telón que pueda abrir y por el que echar una mirada al público, para no perder la costumbre.
“Los primeros momentos son muy importantes. Siento al público, noto su energía, identifico quiénes me darán juego, a quiénes habrá que trabajarse un poco más y quiénes han venido obligados y mejor dejarlos en paz (llora de risa). Una vez siento esto, comienza la magia del payaso. Todos me ayudan a hacer lo único que sé hacer, el tonto”, cuenta.
La Circoneta
Totó está inmerso en varios proyectos, uno de ellos La Circoneta, un espectáculo de calle donde da vida a una antigua caravana, causante de sus recorridos por Canarias de norte a sur y de este a oeste. Se ha convertido en un payaso escritor tras publicar un cuento infantil inspirado en su espectáculo ´Totó, un payaso viajero` y pretende acercar el mundo del clown a los centros escolares.
Además, lo compagina con el maravilloso mundo del Payaso de Hospital. “Cada semana meto mis narices en el hospital de la mano de la Fundación Theodora, ayudando a llevar el poder de la risa a los im-pacientes y hacer la estancia más humana y llevadera”, explica. Su labor social y humorística le ha supuesto un reconocimiento en el sector del clown.
Calidad artística
“Para nosotros es un lujo que artistas como Daniel Mesa y Yeyo Guerrero apuesten por venir aquí, y además por segunda vez”, sostiene Antonio. El festival no ha cambiado mucho, pero la calidad artística se ha mantenido en las cuatro ediciones.
“Ha llegado gente muy buena que son amateur y provienen de asociaciones de Elche y Alicante, hasta compañías semiprofesionales de Madrid, Granada, etc. El único cambio ha sido el aumento progresivo de los cachés de los artistas, que este año se mantienen en 400 euros por grupo”, comenta el animador juvenil.
«No soy la típica compositora romanticona, mis letras son bastante reivindicativas» Anita
Cantautora callejera
La ilicitana Ana Antón ´Anita`, se estrena este año en Art al Carrer. Alfonso Copé, su pareja y el que será compañero de escenario, sí repite experiencia. Anita es médico, madre y una mujer muy inquieta.
Comenzó como corista y ahora es compositora de 20 temas propios. Forma parte de la Asociación de Cantautores La Explanada de Alicante y compagina su vida en el hospital con sus propios conciertos, festivales como el de Cantautores en Pirineos o cantando en locales con música en directo, como El refugio del poeta en Elche o Taller Tumbao en Alicante.
El miércoles 22 de agosto a las 20:30 horas, en González Vicen, interpretará junto con Alfonso Copé ´Canción de autor, fresca y descarada`. “Tocaremos nuestros temas pero habrá sorpresas. Jugaremos con el público”, adelanta la cantante.
Anita se define como una cantautora irónica, satírica, con humor y melódica. “No soy la típica compositora romanticona, mis letras son bastante reivindicativas, no solo de denuncia social sino también personal; además mezclo soul, funky y swing”, explica.
Caché
La ilicitana ha participado en uno de los eventos culturales más importantes de la provincia de Alicante, Elx al Carrer, un referente a seguir para Art al Carrer. Sin embargo, la valoración no es positiva.
“Es una lástima, pero la cultura esta ninguneada. En Santa Pola, los artistas tenemos un caché, pero en otros festivales no nos pagan, ni dejan pasar la gorra ni tampoco vender discos. Al final es el artista quién tiene que ceder su arte, espacio, tiempo y dinero para sacar adelante un proyecto cultural”, sostiene.
La campaña en Santa Pola sigue la misma línea que otras como Elche o Petrer (ArtenBitrir). “La única diferencia es el calendario. Ellos los celebran los fines de semana y las actuaciones son simultáneamente en varios puntos de la ciudad. Los artistas que acuden tienen un caché bastante importante. En cambio, nosotros lo planificamos en dos meses y aprovechamos el verano. Prevemos un volumen de entre 250 y 300 personas por espectáculo”, argumenta el coordinador de Art al Carrer.
«Me parece indignante que la gente no pueda tocar o cantar tranquilamente en la vía pública» Anita
Cultura en la calle
Anita es bastante crítica con el nivel de cultura callejera en nuestro país. “Falta cultura en las calles y deben dejar de privatizar el arte en los espacios al aire libre. Me parece indignante que la gente no pueda tocar o cantar tranquilamente en la vía pública porque te quiten la guitarra o te multen”, declara.
La ilicitana explica que canta porque con la música puede llegar a la conciencia de otras personas. Transformar la visión de la gente. “Soy feminista y así lo demuestran mis letras, y si hay adolescentes que me escuchan es una forma de llegar a ellas y de que oigan otra música que no sea la de los 40, que sus letras dejan mucho que desear”, asegura.
Falta de opciones
Daniel Mesa apunta en la misma dirección y echa en falta más opciones culturales. Festivales como Art al Carrer educan al espectador y le enseña a valorar y respetar los diferentes lenguajes escénicos que en la calle se pueden ofrecer de una manera profesional. Ayuda a entenderlos, valorar y crear en el espectador una opinión crítica sobre qué le gusta o qué no le gusta, según el artista. “Hay que seguir haciendo cultura entre todos, por todos y para todos”, añade.
En cuanto al nivel cultural en nuestro país, todos coinciden en que hay que seguir trabajando. “Desde las compañías hemos de seguir ofreciendo un buen trabajo, y las administraciones deben respaldarlo y fomentar espacios para ponerlos a disposición del público. Estos también han de proteger esas buenas propuestas y ser parte crítica de la cultura, mediante un consumo responsable y respetuoso, haciendo que la cadena se cierre y, entre todos, valoremos que propuestas son buenas y aportan una mejoría a nivel cultural del país y cuáles no aportan nada”.