El alcalde de Alicante, Luis Barcala, ha reiterado su rechazo a la ubicación de nuevos depósitos de combustible en la zona porturaria, después de conocer la resolución que desestima la práctica totalidad de las alegaciones presentadas por el Ayuntamiento de Alicante contra la petición de la empresa concesionaria de levantar una serie de depósitos de combustible en los terrenos que tiene en explotación.
No obstante, el alcalde dará traslado al departamento jurídico del Ayuntamiento de Alicante de la resolución de las alegaciones para estudiar en primer término la posibilidad de continuar con la vía judicial para no permitir la instalación de los depósitos de combustible proyectados en el puerto. Paralelamente, Barcala ha expresado su intención de abrir una vía de negociación con la concesionaria de los terrenos para permitir en los mismos otro tipo de actividad que se ajuste más al desarrollo que tanto el Ayuntamiento de Alicante como la Generalitat y el propio Puerto plantean para esa zona “que no es precisamente permitir instalaciones industriales de este tipo, sino más bien favorecer actividades en la línea de las propuesta que hemos puesto sobre la mesa dentro de lo que hemos denominado Alicante Futura y de las que también ha planteado el Consell con su distrito digital”.
El alcalde ha insistido en que “queremos un puerto con una actividad industrial que vaya de la mano de nuestra propuesta de modelo de ciudad y que debe ser capaz de compaginar desarrollo tecnológico, con el turístico y los servicios”. A este respecto, Barcala ha señalado que “el Ayuntamiento no se va a quedar con los brazos cruzados hasta ver en qué acaba todo este procedimiento”, dado que existen visiones contradictorias sobre lo que permite en este momento el Plan Especial del Puerto y el Plan General de Ordenación Urbana de la ciudad. “Seguiremos la vía judicial si los servicios jurídicos municipales informa favorablemente en este sentido, pero además impulsaremos contactos con la concesionaria porque creemos que lo más operativo es sentarnos con la adjudicataria del suelo y buscar alternativas de uso a los terrenos que no confronten con los intereses de la ciudad y del propio Puerto”.