Entrevista > Hernán Camilo Ascencio / Socio fundador de Muspell Cooperativa Valenciana (Colombia, 9-abril-1991)
Detrás de Muspell Cooperativa Valenciana se encuentran tres jóvenes emprendedores: Hernán Camilo Ascencio, Carlos Corbí y Christian Romeu. Esta idea nace de un experimento fallido cuando eran estudiantes en la Universidad de Alicante.
Tras desarrollar el producto y el proceso en sus casas, el proyecto adoptó un carácter innovador, lo que les hizo ganar los Premios Nuevas Ideas Empresariales otorgados por la Fundación Empresa Universidad de Alicante (Fundeun) en 2017. A día de hoy, buscan nuevos nichos de mercado en el extranjero para internacionalizar la marca.
La idea surge cuando estudiaban en la Universidad
Muspell Cooperativa Valenciana se ha alzado con el Premio Iniciativa Empresarial en la XVII Gala de los Premios Provinciales de la Juventud, organizada por la Diputación de Alicante el pasado mes de noviembre. ¿Qué supone para vosotros este reconocimiento?
Fundamentalmente, una motivación con la que poder seguir cumpliendo objetivos. No es el primer premio que hemos recibido. De hecho, con una semana de diferencia ganamos una medalla de bronce en el Campeonato Internacional de Hidromiel que se ha celebrado en Polonia, la segunda competición internacional más importante del mundo.
¿Qué te impulsó a decantarte por el mundo del emprendimiento a tan temprana edad?
Cuando estudiaba Ingeniería Química en la Universidad conocí a Carlos Corbí. Desde el primer momento teníamos claro que íbamos a montar una empresa. Sin embargo, nuestras ideas estaban más orientadas por el lado del combustible y de los motores, pero dimos con el hidromiel, que también nos llamaba la atención.
Empezamos a experimentar de manera intermitente, ya que los exámenes no nos permitían dedicarle más tiempo. Cuando estábamos finalizando la carrera, empezamos a formarnos más a nivel empresarial. Para ello, nos apuntamos a varios concursos donde además de recibir premios, recibíamos formación. Ya en 2017 fuimos creando toda la estructura necesaria. Empezamos como una afición y acabó convirtiéndose en una empresa.
¿La provincia dispone de un buen ecosistema para que los jóvenes emprendan?
Las universidades, al menos en Ingeniería Química, están empezando a meter en el programa asignaturas vinculadas al emprendimiento para enseñar a los alumnos que, además de irte a una empresa a trabajar, hay otros caminos como emprender. Es un importante paso.
«Al principio, experimentábamos en nuestras propias cocinas»
¿Cómo fueron los inicios de Muspell?
Al principio, experimentábamos en nuestras propias cocinas hasta que, tiempo después, decidimos coger un local en el que constituir una pequeña fábrica. Los comienzos han sido especialmente difíciles por no disponer de los medios económicos necesarios para montar algo tan grande desde un primer momento.
Además, como la maquinaria industrial es muy cara, aprovechamos nuestros conocimientos de ingeniería y empezamos a construir máquinas para elaborar la bebida y embotellarla, proceso en el que hemos tardado más de un año.
«Estamos intentando internacionalizar el producto»
¿En qué momento os encontráis ahora mismo?
A día de hoy estamos intentando internacionalizar el producto. Actualmente uno de nuestros socios se encuentra en Países Bajos cerrando una colaboración con una fábrica de cerveza, con el objetivo de hacer un producto en común compuesto por un 50% de hidromiel y 50% cerveza.
¿Cuál es el secreto del éxito?
Ser constantes, porque nunca sabes cuándo se va a presentar la oportunidad y si no estás preparado no la vas a poder aprovechar. Cualquier persona en nuestro lugar, igual en los primeros meses o en el primer año, al ver que el proyecto no terminaba de consolidarse, se hubiese rendido.
Hasta el momento, ¿cuál ha sido la acogida del proyecto en cifras?
Entramos al mercado en agosto de 2018, año en el que conseguimos facturar mil euros aproximadamente. Esta cifra es la que estamos facturando a día de hoy cada mes. Es cierto que son todavía cifras muy pequeñas, pero tenemos el inconveniente de que el hidromiel aún no está totalmente integrado en el mercado. Por ello, es un producto que cuesta más vender, pero una vez que lo prueban tiene buena acogida.
¿Qué ha sido lo más complicado de llevar a cabo este proyecto?
Fundamentalmente, la inexperiencia general del mercado. Hemos de decir que no nos da miedo el fracaso, ni siquiera nos lo planteamos, pero suponiendo que pasase, sería un aprendizaje. Si una idea no sale, hemos aprendido muchos elementos que nos van a permitir el día de mañana montar otra empresa y sacarla adelante.
La antigua bebida del siglo XXI
Fermentada a base de miel, Muspell pretende ser una alternativa a las bebidas alcohólicas de siempre.
A raíz de una receta de hidromiel, elemento anterior al vino y probablemente precursora de la cerveza, se renueva y reinventa. Sin malta, sin gluten. Refrescante, con un sabor suave, sin dulzor, y con un toque amargo.