Entrevista > José Luis Balboa Sempere / Bailarín y drag queen (Alicante, 21-agosto-1968)
Series de televisión como RuPaul´s Drag Race han puesto en el centro de todas las miradas el universo drag. Por ello, hemos querido conocer mejor a la primera ganadora de la Gala Drag Queen de Torrevieja, Princess.
En realidad se llama José Luis Balboa Sempere y se dedica al mundo del baile. Con picardía y elegancia se maneja como pez en el agua encima del escenario, hábitat al que está acostumbrado desde hace más de treinta años.
Es bailarín de danza desde hace treinta años
¿Por qué empezaste en el mundo drag?
Hace años atravesaba una época de dificultades económicas en la que acabé de chófer para un amigo mío que hacía drag. Cuando empecé a tomar contacto con este mundo me enamoró, porque siempre he sido una persona que me gusta pasármelo bien. Además, durante muchos años he trabajado en el mundo del teatro.
Tu versión drag se llama Princess. Háblanos de ella.
Mi hermano y sus amigos decían que yo era como una princesa: joven, con clase y elegante, y me llamaban, sin que yo lo supiese, La Princesa, así que me gustó ese nombre. Al principio era muy ajeno a este mundo, fui aprendiendo sobre la marcha.
Tras un año actuando con mi amigo, nuestros representantes nos recomendaron separarnos ante la cantidad de trabajo que teníamos, ya que podíamos hacer hasta cuatro actuaciones en un mismo día, era agotador.
Poco tiempo después de adentrarte en el sector, decides participar en la primera Gala Drag Queen de Torrevieja en la que obtienes la victoria. ¿Qué recuerdas de aquella experiencia?
Fue espectacular poder romper los moldes de Torrevieja porque, pese a ser un pueblo bastante avanzado, en este tema tienen sus reservas. Nos trataron como a reinas llevándonos a los mejores restaurantes y lugares. De hecho, salí tan agradecida que volví a salir en el desfile al año siguiente.
Sin embargo, desde mi punto de vista, hay que dejar camino a otras compañeras, porque eso de presentarte cada año como hacen en otros puntos del país para ver quién gana más veces, lo respeto, pero no va conmigo.
¿Cuál es el secreto del éxito de una drag?
Las drags somos como bombas atómicas, porque en muy poco tiempo tenemos que dar muchísima energía y eso agota. En mi caso me considero una drag bastante picante pero de estética elegante, lo que atenúa lo bruta que puedo llegar a ser en algunos momentos. Además, hay algunas drag que tienen la suerte de cantar bien y pueden explotarlo.
Con tanta peluca, vestuario y maquillaje, ¿se puede vivir económicamente de esto?
Normalmente tenemos un buen armario que vas haciéndote poco a poco, pero lo normal es que si trabajamos en diferentes sitios, haya gente que se ponga lo mismo. A mí como lo que más me gusta de este universo es la creatividad, me vuelvo loco intentando siempre cambiar y mejorar, y eso vale dinero.
Normalmente sí que sale rentable porque casi nunca te gastas todo lo que vas a ganar, pero sí he visto casos de personas que gastan más de lo que podrían ganar en un concurso.
«El drag siempre fue un suplemento»
¿Qué papel juega el drag en tu vida?
El drag siempre fue un suplemento, una faceta de mi vida con la que poder desarrollar otras habilidades como la del maquillaje. Siempre he querido hacerlo todo y la única forma de llevarlo a cabo es dosificándome.
Por este motivo, no me considero una drag queen a nivel nacional, porque para mí lo son aquellas que trabajan a diario como pueden ser La Flexy o Nacha La Macha. Mi profesión es la danza.
Durante todos estos años, ¿qué ha sido lo más difícil de hacer drag?
Sin lugar a dudas hacer reír a la gente. Para ello tienes que estudiarte y descubrirte a ti mismo para saber afrontar todo tipo de situaciones. Por suerte, el maquillaje y la estética es algo que me ha costado menos.
«En nuestro país hay mucha ignorancia con el mundo drag»
En Estados Unidos existe una fuerte cultura drag, ¿algún día despertará el mismo interés en España?
En nuestro país hay mucha ignorancia con el mundo drag. Mucha gente se cree que una drag, hablando en plata, es un maricón que se disfraza y hace la loca, pero detrás de una drag hay horas de trabajo.
No es fácil estar durante horas con tacones de mínimo veinte centímetros, corsés que no te dejan apenas respirar, una peluca que te aprieta la cabeza… Con decirte que yo he llegado más cansado de hacer drag que de bailar…
Primera drag queen
La cultura drag surge durante la segunda mitad del siglo XIX como una sátira cómica de la sociedad aristocrática, la política, los roles de género, la etiqueta social y los convencionalismos sociales.
Julian Eltinge está reconocida popularmente como la primera drag queen de la historia.