La asamblea de colegiados del Colegio de Aparejadores, Arquitectos Técnicos e Ingenieros de la Edificación de Alicante aprobó por unanimidad autorizar la venta su inmueble de la calle Rafael Altamira de Alicante por 1.721.000 euros, máxima puja presentada en la subasta notarial. La subasta, que partió con un precio inicial 1.100.000 euros, presentó una reñida competencia hasta alcanzar la cifra señalada. Se fueron sucediendo las pujas, lo que provocó que se fuera ampliando la hora de cierre, que en principio estaba fijada a las 18:00, hasta las 23:06 en que finalizó definitivamente.
“La subasta ha resultado ser un éxito y estamos muy contentos con ello. A última hora se fueron sucediendo las pujas, lo que hizo que se fuera alargando la hora de cierre, hasta alcanzar la cifra de 1.721.000 euros. Trasmitimos la información a los colegiados y se ha decidido la venta al inversor que pujó por ella”, ha comentado Martín Pomares, presidente del COAATIEA.
El inmueble, que data de principios del siglo pasado y se compone de dos edificios, se emplaza entre las calles Rafael Altamira y Mayor, ofreciendo un excepcional enclave en el corazón de la ciudad a escasos metros del edificio histórico del Ayuntamiento. Este edificio, de uso residencial, cuenta con 1.435 metros cuadrados sobre una parcela de 506 metros cuadrados que da a dos de las calles más emblemáticas de la ciudad de Alicante.
Este edificio, en la parte que linda con la calle Rafael Altamira, consta de una planta baja y dos plantas altas. La primera de ella de 467 metros cuadrados, un primer piso que ocupa 465 metros cuadrados; y un segundo de 444 metros cuadrados. Por otra parte, la zona que linda con la calle Mayor consta de una planta baja de casi 40 metros, dos alturas más de 42 metros cuadrados cada uno. Se trata de un edificio emblemático que se encuentra catalogado como Bien Inmueble de Relevancia Local.