El alcalde de Elche, Carlos González, acompañado por la concejala de Urbanismo, Ana Arabid, y por el gerente de Pimesa, Antonio Martínez, ha visitado las obras del tercer bloque del Área de Regeneración Urbana (ARRU) de San Antón, una de las iniciativas de regeneración urbana más relevantes, ambiciosas y de mayor alcance urbanístico y social de cuantas se están desarrollando en la Comunidad Valenciana y en el conjunto de España.
El alcalde ha recordado que el pasado 11 de septiembre de 2019 se inició la construcción del bloque 3 y ha anunciado que, tal y como le ha comunicado la empresa constructora, los plazos se están adelantando y la obra podría estar finalizada a principios del próximo año, algo que permitiría también adelantar la fase de comercialización de las viviendas.
“Se trata de un edificio de 90 viviendas (50 de tres dormitorios y 40 de dos), 69 plazas de garaje y un local comercial situado entre la calle Obispo Cubero, la rotonda N-340, una calle peatonal y una parcela dotacional. La construcción se lleva a cabo por la unión temporal de empresas ORTHEM-ABALA BARRIO DE SAN ANTÓN ELCHE, por un importe de 4,6 millones de euros”, ha explicado el alcalde quien ha añadido que “son viviendas de un tamaño reducido, pero enormemente funcionales. Tienen clasificación energética A y todas miran al exterior. Además, están libres de barreras arquitectónicas”.
El edificio consta de planta baja con local comercial y aparcamientos en superficie para bicicletas, 10 plantas de piso con 9 viviendas por planta y dos plantas de sótano para aparcamiento con una capacidad de 69 vehículos en total.
“Estamos ante un edificio que va a continuar con la trayectoria de los bloques 1 y 2. El bloque 1, de 74 viviendas, ya ha sido entregado a los vecinos y están viviendo en él. En el bloque 2, de las 120 viviendas de las que consta, tenemos firmadas casi 40 escrituras y seguimos entregando viviendas”, ha señalado González.
Tal y como ha explicado el alcalde el Ayuntamiento, a través de Pimesa, ya está trabajando en el bloque 4. “En estos momentos se está redactando el proyecto y esperamos que a la vuelta del verano estemos en condiciones de licitar la obra de un cuarto bloque que nos llevaría a un montante total de 338 viviendas en marcha entre construidas, en construcción y en licitación. Sería la fase 1 y la fase 2 de este ARRU que, no sólo es una gran actuación urbanística de regeneración, sino que tiene un componente social, de mejora de la calidad de vida de los vecinos ya que, al final, no sólo van a vivir en viviendas más cómodas y modernas, además, van a solucionar el grave de problema de accesibilidad que tienen los viejos edificios”.
“Estamos transformando un barrio degradado en un barrio nuevo y moderno. El objetivo del ARRU de San Antón es posibilitar el uso residencial en viviendas constitutivas de domicilio habitual en un contexto urbano seguro, provisto del equipamiento y los servicios básicos. En definitiva, mejorar la calidad y la funcionalidad de las infraestructuras, dotaciones, equipamientos y espacios públicos del Barrio de San Antón y por tanto, fomentar la dinamización económica y el desarrollo social del barrio”, ha concluido el alcalde.
Respecto al futuro, el alcalde ha señalado que el objetivo es renovar el barrio completamente, unos 15 edificios y en torno a las mil viviendas. “Tenemos garantizada la financiación hasta la Fase 2 y a pesar de la pandemia está teniendo consecuencias económicas sobre la capacidad de la administración de emprender proyectos, la salida de la crisis pasa por la inversión, en estimular la demanda desde el sector público. Esto es un acicate para el Ayuntamiento y deber serlo también para la Generalitat Valenciana, para que juntos busquemos financiación en el Gobierno de España y en Europa para seguir adelante con este proyecto. No podemos frenar aquí”.
Favorecer la reactivación económica
El alcalde ha destacado que, al margen de la importancia que tiene esta actuación para la regeneración de un barrio degradado y la mejora de la calidad de vida de sus habitantes, desde el punto de económico, se trata de una iniciativa enormemente positiva para reactivar el sector de la construcción y la economía.
“Desde el punto de vista económico, y ahora que estamos en un momento muy complejo, la inversión en este tipo de iniciativas significa un estímulo al sector de la construcción que tiene efectos multiplicadores sobre la economía. Invertir, como haremos en el cuarto bloque, otros 5 millones de euros a través de Pimesa significa un nuevo estímulo a la economía”, ha indicado Carlos González quien ha añadido que “hasta este momento, con esta actuación, llevamos invertidos y comprometidos en el barrio de San Antón unos 25 millones de euros en obra civil y en apoyo a un sector, el de la construcción, que genera empleo, genera riqueza y que tiene efectos multiplicadores sobre la economía”.