Nuevos tiempos para el fútbol sala en Alfaz del Pi. Su equipo más representativo volverá a competir la próxima temporada en Preferente, tras lograr el ascenso en un año que debía haber sido de transición y que acabó de forma imprevista y con un resultado sorprendente. Y es que al fútbol sala alfasino le pasó algo muy parecido a lo que sucedió con el equipo de fútbol. El parón de la competición le llegó en el momento justo.
Solo una semana antes de la suspensión del campeonato, el equipo alfasino sentenció la segunda plaza al derrotar al que iba tercero en un duelo directo. De haber perdido ese partido, el Alfaz habría quedado fuera del ascenso, ya que tras suspenderse la liga por la pandemia la Federación decidió premiar a los dos primeros clasificados con el salto de categoría. “Las cosas vinieron así, pero también es mérito nuestro haber sido segundos”, defiende Juan Cortés, secretario y coordinador de los equipos de la entidad.
Aspira a consolidarse en la nueva categoría sin renunciar a un nuevo ascenso
Historia
El Club de Fútbol Sala de Alfaz, fundado en 2001, había vivido tiempos mejores, compitiendo incluso en la categoría Nacional B, la equivalente a una tercera división. También hubo un tiempo en el que caminó de la mano del Benidorm tras un acuerdo de filialidad. El equipo llegó a asentarse en Tercera, peleando incluso algunos años por subir a Segunda B.
Sin embargo, el proyecto se diluyó de forma precipitada al encontrar trabajo, tras acabar los estudios, varios de sus principales jugadores. El pasado verano, Cortés y el resto de técnicos del club planificaron una nueva etapa con la única idea de que los jugadores fueran adquiriendo conceptos y preparar a medio plazo el salto a Regional, que llegó antes de lo previsto.
El Alfaz, sin embargo, no se piensa parar ahí. “Lo normal es intentar asentarnos en la categoría nueva, pero el objetivo a medio plazo es competir en Preferente cuanto antes”, explica Cortés. Y es que la diferencia entre estas divisiones del fútbol sala es notable. “En Preferente ya hay reloj parado y los pabellones son cubiertos”, explica el coordinador.
Crecimiento
No lo ha tenido fácil el Club de Fútbol Alfaz del Pi para reinventarse. Además de tener como competencia el baloncesto, el deporte que más alto ha llevado a la localidad, el fútbol 11 sigue siendo el gran polo de atracción para los jóvenes. El club cuenta actualmente con una estructura formada por siete equipos, aunque el próximo curso podría crecer hasta los nueve, ya que se pretende crear un cadete y un juvenil para cubrir todos los escalones del ciclo formativo.
Incluidas las escuelas municipales, un centenar de niños están bajo la supervisión de la entidad. “La población de Alfaz da para lo que da. En localidades en las que hay más tradición o existe un equipo en la máxima categoría es más fácil que salga una mayor cantera”, explica Cortés.
A los jugadores se les cobran cuotas “baratas y asequibles” y el compromiso del club con los niños es “formar personas, porque a jugadores profesionales casi ninguno va a llegar pero personas serán toda la vida”, explica Cortés. Eso no quita para que exista la ambición deportiva de querer ganar y progresar. “Este año tendremos un cadete ya más competitivo porque es algo que reclaman los mismos chicos. Quieren competir y ganar. Y queremos que sea así para que maduren y puedan saltar al primer equipo”, detalla el coordinador alfasino.
«La Tercera es nuestro tope sostenible» J. Cortés
Cantera
Bajo las premisas de la austeridad y el compromiso con el club, el Fútbol Sala Alfaz tiene claro que su horizonte “sostenible” es llevar al equipo sénior hasta Tercera. “Más arriba de esa categoría ya te piden cobrar y la política del club es que no se paga a nadie, a excepción de una pequeña gratificación a y de la base”, desvela Juan Cortés, quien intuye un escenario complicado para los patrocinadores “por culpa de la pandemia de coronavirus”.
El club asume que tiene que “fabricarse” su propia cantera desde abajo, siempre con la amenaza latente de que “los equipos de fútbol” acaben por llevarse a sus mejores jugadores, tal y como ha sucedido en varias ocasiones en los últimos años.
Quizá por este motivo el club alfasino mira más allá de su término municipal en busca de materia prima. “Uno de los objetivos es contar con una escuela en Benidorm, algo mixto entre ellos y nosotros para que podamos llegar a más gente y beneficiarnos ambas entidades”, desvela.
La peña ‘Sonem a futsal’ se ha convertido en la envidia de las aficiones rivales
Afición
Puede que el primer equipo aún esté en categorías menores del fútbol sala, pero de lo que puede presumir Alfaz es de contar con un apoyo en las gradas casi de Primera División.
“Tenemos una afición envidiada por todos los equipos”, asegura Cortés en relación a la peña ‘Sonem a futsal’, formada por padres y madres de niños de la base. El animoso y divertido grupo de seguidores acompaña al primer equipo incluso a los partidos a domicilio, llenando el autocar y las pistas rivales, como sucedió en Elche o Santa Pola.
“Muchos jugadores me dicen que solo saltar a la pista y verlos animar es un estímulo tremendo para el equipo. Ya vamos ganando 1-0 el partido”, sentencia orgulloso Cortés.