El melón está en su mejor momento en esta época del año. El de Carrizales tiene unas características especiales y únicas por el terreno en el que se desenvuelve, una tierra que contiene sales que se acentúan al entrar en contacto con el agua de riego y que le concede un sabor dulce muy característico.
La producción será algo inferior este año, pero por el contrario se ha ganado en dulzor, calidad y calibre. Los agricultores esperan que este año la climatología no nos de ningún disgusto como el año pasado con la Dana, y que puedan tener una cosecha tranquila y productiva.
Cultivo autóctono
Hemos recorrido el terreno con sus protagonistas, Juan Muntaner, biólogo y uno de sus principales productores; Felip Sánchez, concejal de Agricultura en el ayuntamiento de Elche, y Fernando Antón, presidente de la comunidad de regantes de Carrizales.
Con ellos hemos podido ver de cerca un cultivo autóctono, único por sus características, y hemos comprobado como cuidan y defienden una zona y un cultivo tan nuestro.
Felip Sánchez
¿Cuál es la colaboración de su concejalía con los productores de este melón?
El ayuntamiento tiene un convenio de colaboración con la comunidad de Carrizales que este año ha supuesto una subvención de 3.500 euros, y también les apoyamos con la difusión del producto a través de campañas en los medios de comunicación, dando la difusión necesaria para su promoción y venta.
«Tenemos especial interés en apoyar todo tipo de cultivo sostenible y diferenciador» Felip Sánchez (concejal)
Desde el ayuntamiento tenemos especial interés en apoyar todo tipo de cultivo como este, que se hace de manera sostenible y que ha creado su propia marca diferenciándose del resto por su calidad y su sabor.
¿Apoyar la agricultura local está dentro del proyecto Elche ciudad verde 2030?
Es un proyecto que abarca muchos sectores y desde luego la agricultura es uno de ellos. Somos una ciudad agrícola y es nuestra intención presentar nuestra candidatura a Capital Verde Europea contando con todos los espacios verdes que tiene Elche bien conservados, y los agricultores son parte fundamental de esa conservación. La zona de Carrizales es además una zona protegida.
En la actualidad tienen un sello de calidad, ¿pero habría que apostar por una marca de calidad?
El ayuntamiento apuesta por la obtención de la marca de calidad y apoya plenamente a sus agricultores. Una marca que deben apoyar los propios compradores con su consumo, y los propios agricultores poniendo en valor esa marca con su cultivo. De cara al futuro debemos luchar por disponer de los recursos hídricos necesarios y, aunque la producción es limitada, hay que intentar también abrir mercado.
Fernando Antón
¿Hay posibilidad de ampliar la zona de cultivo?
Hay posibilidad de aumentar el número de hectáreas, pero lo que hay que tener en cuenta es que hay que garantizar el agua necesaria para regar, que es nuestro principal problema en este momento.
«La salinidad de la tierra le da ese dulzor tan especial que solo se produce en este territorio» F. Antón (regantes)
¿Estamos hablando por lo tanto de un producto autóctono exclusivo que solo se puede obtener y consumir en esta zona?
Por el momento yo diría que sí. Este año se va a llegar a los 600.000 kilos.
Es una producción por lo tanto relativamente pequeña y de un producto de máxima calidad que lo hace aún más atractivo. Cada vez hay más agricultores interesados en el melón de Carrizales, pero la zona está limitada precisamente por sus características de salinidad de la tierra, que le dan ese dulzor tan especial que solo se produce en ese territorio, y al ser una producción pequeña se queda en la provincia.
¿Qué Importancia tendría para ustedes conseguir la marca de calidad?
Incluir el sello de red natura 2000 en nuestros melones ha supuesto una distinción que nos beneficia y que nos abre puertas. Lo que sí que nos gustaría es conseguir una marca que nos diferencie de los demás y que reconozca las características y la calidad de nuestro producto.
Juan Muntaner
¿Qué investigaciones se han realizado sobre el terreno?
Hemos realizado un proyecto con la Agrupación Proteccionista del Sureste (ANSE) y contamos con la colaboración de la Universidad Miguel Hernández. Entre otros ensayos estamos plantando unas bandas de flores polinizadoras entre las plantas de los melones, de esta forma las flores atraen a cierto tipo de insectos que benefician y estimulan la polinización.
También hemos plantado bandas en los setos de carrizo para aumentar y beneficiar la biodiversidad, y en ocasiones hemos incluido girasoles para atraer a aves. Con ello se consigue que estos pájaros se coman los insectos perjudiciales, como las orugas, que producen plagas en los melones. Así, al final, lo que queremos conseguir es fijar esta población de fauna y que con este proceso natural no tengamos que usar pesticidas. Algunos productores ya lo estamos consiguiendo. La producción de este melón es limitada.
«Pertenecemos a una de las zonas de especial protección de la naturaleza en Europa» J. Muntaner (biólogo)
¿Qué supone pertenecer a la Red Natura 2000?
Supone pertenecer a las zonas de especial protección de la naturaleza en Europa, e implica el control de pesticidas para ir hacia un cultivo agroecológico, así como para la obtención de mayores ayudas y subvenciones para preservar un producto autóctono en nuestra comarca. El incluir el logo de Red Natura 2000 en nuestros melones supone una distinción que nos beneficia y que nos abre puertas.
¿Es un problema la gran población de conejos existente?
Es un problema grave que tenemos todos los agricultores de la zona, no solo nosotros. Tenemos que vallar las fincas porque se lo comen todo.
Hay una superpoblación tremenda y apenas hay depredadores. Los zorros, que eran su principal enemigo, han sido muy castigados y las aves de presa han descendido muchísimo; por lo tanto, estamos desamparados ante este serio problema.
¿Cuál sería la solución?
La principal sería proteger a todos sus depredadores, empezando por los zorros que no están protegidos, y controlar la población de conejos en todas las épocas del año.