Entrevista > Julián Rojas Moreno / Miembro de la moto peña Los Arcasiles y organizador del reto solidario ‘De Faro a Faro 2020’
Tras un año trabajando en este proyecto y un aplazamiento de fecha por la crisis sanitaria del coronavirus, el pasado 4 de julio la moto peña Los Arcasiles Vega Baja pudo realizar su primer Reto Solidario ‘De Faro a Faro’, en beneficio de la polio infantil.
AQUÍ Medios de Comunicación ha entrevistado a Julián Rojas, organizador del evento y miembro de la moto peña Los Arcasiles para que pueda contar cómo transcurrió el reto solidario a través del país.
¿Cómo se organizó el trayecto?
Salimos veinte motos y se hicieron tres grupos para realizar el trayecto, simplemente por temas de logística. Teniendo en cuenta que los depósitos de las motos son diferentes y no tienen la misma capacidad para la gasolina nos dividimos.
Un grupo con motos más grandes, que tienen depósitos de 125 o 130 litros; luego un grupo intermedio con motos con capacidad de entre 20 y 25, y el último grupo de motos con depósitos de 15 litros o menos, que lógicamente tendrían que hacer más paradas.
También llevábamos una furgoneta de apoyo que iba tras el último grupo por si había alguna avería, con gasolina por si alguien se quedaba sin ella, con bocadillos o por si algún acompañante del motorista se cansaba que pudiera subirse.
«Recorrimos 1.150 kilómetros de sol a sol, de Alicante a Galicia»
¿Y cómo se desarrolló el viaje?
Iniciamos la salida en Santa Pola acompañados por otra peña motera, ‘Los Ángeles Guardianes’, compuesta por policías y guardias civiles que nos acompañaron durante los primeros kilómetros al amanecer. El resto del viaje se desarrolló tranquilamente, sin accidentes ni averías. Llegamos al Faro de Finisterre antes del anochecer, a eso de las 20:30 horas.
«Las paradas fueron las necesarias para repostar y de un máximo de 15 minutos»
¿Durante el camino qué paradas hicieron?
Sólo paramos a echar gasolina; hay quien también aprovechó para comer algo, pero hicimos paradas rápidas para repostar, tomar un café, ir al baño y volver a la carretera, de 15 minutos como máximo. Llevábamos bocadillos preparados para no tener que entrar en los bares.
¿Cómo fue la llegada a Finisterre?
Llegamos en tres grupos, por el tema de las paradas, pero antes de subir a la meta hicimos un punto de encuentro justo en la subida al Faro de Finisterre, para llegar todos juntos.
Tuvimos en cuenta los tiempos, porque los primeros llegaron a las seis de la tarde con una velocidad normal y los últimos a las ocho y media.
Con su hazaña también quisieron hacer una simbólica unión de los pueblos. ¿De qué manera?
El día antes de la salida llenamos unas botellas que llevaban nuestro logo con agua del mar Mediterráneo, cogida allí mismo bajo el faro de Santa Pola.
Parte de esa agua fue vertida por nosotros a nuestra llegada al cabo Finisterre en el océano Atlántico, como símbolo de unión entre los pueblos, pues somos una península rodeada por mares y es algo que nos describe.
¿Qué hicisteis una vez allí?
Nos recibió el alcalde de Finisterre, José Marcote Suárez y el teniente alcalde, Xan Carlos Sar Oliveira. Se celebró un vino de honor y se les hizo entrega de una botella de agua de nuestro mar, a lo que el alcalde personalmente se comprometió para coger una barca, ir mar adentro y verterla en el océano Atlántico.
Luego nos cambiamos, nos aseamos, nos pusimos unas camisetas hechas para la ocasión y hubo una posterior cena de hermandad motera, en la que ya se empezó a hablar del siguiente faro porque la gente se quedó encantada.
«Hemos recaudado 2.300 euros para la polio infantil»
El reto se ha organizado con fines solidarios. ¿Cuáles eran?
La recaudación ha sido para la polio infantil. El Rotary Club de Almoradí ha hecho la donación. Han pagado diez céntimos por kilómetro recorrido y motorista. Fuimos veinte motoristas los que hicimos el reto y recorrimos 1.150 kilómetros, por lo que conseguimos recaudar 2.300 euros para este fin.
Desde aquí mostramos nuestro agradecimiento a los patrocinadores que nos han apoyado para cumplir este reto, entre ellos vosotros, AQUÍ medios de comunicación, Rotary Club de Almoradí y a la Asociación Disminuidos de Almoradí (ADA).
¿Volveréis a repetir una experiencia como la del reto solidario 2020?
Sí, ya trabajamos en ello pero aún no hemos decidido a qué faro se va a hacer. Para el año que viene queremos plantear un reto de ida y vuelta, es decir, nosotros llegar al faro que finalmente se decida, contactar con peñas moteras de ese lugar y que ellos hagan el mismo viaje a la inversa a la semana siguiente hasta Santa Pola.
Lo único que sabemos de momento es que se recogerá dinero para otra causa, el cáncer infantil, y ya estamos inmersos en la búsqueda de nuevos patrocinadores que apoyen nuestro nuevo reto.