Entrevista > Antonio Campos / Socorrista profesional (Madrid, 14-diciembre-1967)
Este verano los socorristas han multiplicado sus funciones más que nunca. Ahora les está tocando ejercer también de limpiadores, desinfectadores, sanitarios, porteros… Unos nuevos roles para los que apenas han tenido tiempo de preparación, pues se han visto limitados tanto por el confinamiento como por el riesgo de contagio de la covid-19 en el cuerpo a cuerpo.
Hablamos con Antonio Campos, representante de la Fundación Salvamento y Socorrismo en la provincia de Alicante. Tras dedicarse durante su juventud a esta vital profesión, actualmente regenta una empresa de formación de socorristas. Muchos de sus pupilos son quienes se están encargando ahora de vigilar nuestras piscinas y playas.
«La mayoría de las comunidades de vecinos, hoteles y ayuntamientos han entendido que necesitan más profesionales»
Dado que este año tenéis muchos más aspectos que controlar… ¿Se están contratando más socorristas?
Efectivamente antes de comenzar el verano la Generalitat modificó el decreto regulador para que, aparte de las tareas propias de los socorristas, también recayera en nosotros las funciones de controlar los accesos y la distancia social.
Hay de todo. En general la mayoría de las comunidades de vecinos con piscinas grandes, hoteles o ayuntamientos con playas sí han entendido que necesitan más profesionales. En algunas piscinas donde normalmente solo había un socorrista, este verano le han puesto un compañero que le ayude porque si no es imposible controlar tanto la puerta como el agua. Incluso donde al principio se resistían a contratar nuevos socorristas, están viendo que no les queda más narices pues se han visto desbordados.
«Un protocolo europeo dictamina que si un socorrista tiene sospechas fundadas de que un usuario tiene la covid-19 no debe atenderlo»
¿Cómo mantiene ahora mismo un socorrista su propia integridad para rescatar a una persona sin exponerse a ser contagiado?
Hay un protocolo europeo que dictamina que si un socorrista tiene sospechas fundadas de que un usuario tiene la covid-19, no debe atenderlo. Esta es la regla sobre el papel, pero en la práctica depende de la iniciativa de cada uno. Por lo que a mí respecta, si una persona necesita una reanimación pulmonar por supuesto que actuaría sin ponerme a pensar en si está contagiado o no.
De todas formas también estamos utilizando respiradores manuales o mascarillas especiales para no tocar piel con piel. En cualquier caso la decisión final siempre queda al criterio del socorrista, pero yo te aseguro que cuesta mucho dejar escapar una vida delante de nuestros ojos si podemos evitarlo. Así que en general estamos actuando igual, aún exponiéndonos a un contagio.
¿Cómo han sido los cursos de salvamento este año?
Evidentemente, diferentes a un año normal. Los hemos agrupado todos en junio, siempre guardando las distancias entre los alumnos y tomándoles la temperatura al entrar. Hemos insistido mucho en cómo hacer la Reanimación Cardiopulmonar (RCP) a personas infectadas, aunque algunos ejercicios de contacto se han anulado.
Algunas empresas les han dicho que este año es mejor que hagan solo el masaje sin insuflaciones. Yo esto no lo entiendo. Si una persona no quiere poner su vida en peligro, pues que no trabaje de socorrista, bombero o policía. Por mucho que la ley ampare no actuar, los profesionales de salvamento nos debemos a una ética profesional para hacer siempre lo necesario por salvar una vida.
Además existe el problema agravado, que ya viene de años anteriores, de que se están ofertando algunos cursos de socorrismo por internet donde se copian los exámenes y apenas se realizan pruebas físicas. Luego esto repercute en que personas sin apenas preparación se convierten en socorristas. En algunas comunidades como Galicia o Navarra no admiten estas ‘titulaciones exprés’, pero en la Comunidad Valenciana, a pesar de que lo hemos denunciado constantemente, la Generalitat sí los valida.
¿Cuáles son los principales ‘puntos negros’ de la Costa Blanca?
En Guardamar hay una zona de corrientes muy mala donde se han producido bastantes ahogamientos. También en Torrevieja existen varios sitios complicados.
Aún así en general tenemos un litoral bastante tranquilo, la mayoría de las víctimas mortales suelen producirse porque sufren un ataque cardíaco o algo similar durante el baño. Yo espero que este año haya menos fallecidos al haber venido menos turistas que otros veranos.
«Nuestras playas deberían tener socorristas todo el año porque también hay bañistas en temporada baja»
¿Existe mucha precariedad laboral en este sector?
En general yo diría que no está mal remunerado, pero desgraciadamente algunas empresas no respetan los convenios colectivos. Lo mismo que puede ocurrir en otros sectores como la hostelería, construcción, etc. Hay que tener en cuenta que el rango de edad del socorrista suele ser muy corto, y la gente lo concibe como un trabajo temporal de verano.
Ayudaría mucho para profesionalizar el sector que los ayuntamientos e instituciones crearan cuerpos permanentes de socorristas, sobre todo teniendo en cuenta que aquí tenemos turistas y bañistas que vienen durante todo el año.
¿Los bañistas os están haciendo más caso este verano?
No creas. Este año estamos notando que muchas personas están ya cansadas de tantas normas, y cuando les dices algo te sacan las uñas con bastante agresividad. También están los típicos adolescentes que les llamas la atención, y luego encima viene su padre a echarnos la bronca a nosotros.
Yo ya les dije a mis chicos que este verano había que tener más paciencia y psicología que nunca, porque claramente todos estamos un poco más alterados de lo normal. En realidad quiero aclarar que los socorristas no somos policías, se supone que solo estamos para informar. Nuestra única potestad es llamar a la Policía si vemos que la gente no está cumpliendo las normas sanitarias, los cuales son quienes deciden cómo actuar.