Ante el brote de coronavirus detectado en la ciudad que ha provocado siete nuevos contagios, con origen en el entorno social y procedentes de un mismo foco, el alcalde de Novelda, Fran Martínez, ha hecho un llamamiento a “extremar las precauciones” en los contactos familiares y sociales ya que los casos asintomáticos pueden provocar una transmisión elevada del virus.
Fran Martínez ha apelado una vez más a la responsabilidad individual y colectiva para evitar la trasmisión comunitaria del coronavirus tras detectarse siete nuevos caso en Novelda, lo que sitúa en número de afectados confirmados por PCR desde el inicio de la pandemia en 88, trece de ellos en los últimos 14 días.
Martínez ha asegurado que este brote, que se originó en un encuentro social, está “totalmente controlado” y lo afectados, a los que se aplicó el protocolo establecido por Conselleria, se encuentran confinados en sus respectivos domicilios. Aún así el alcalde de Novelda ha reiterado la necesidad de “no relajar” la aplicación de las medidas de prevención higiénico-sanitarias (guardar la distancia de seguridad interpersonal, uso permamente de mascarillas y mentener la higiene de manos con geles hidroalcohólicos y lavado frecuente, evitando en las tres C: recintos cerrados, lugares concurridos y contactos cercanos), y a “actuar con responsabilidad, ya que una conducta descuidada puede acarrear consecuencias muy negativas para el propio entorno y para la población en general”.
Nuevas medidas
Fran Martínez ha aprovechado su comparecencia ante los medios de comunicación para recordar que entran en vigor las nuevas medidas acordadas por todas las comunidades autónomas en la última reunión mantenida por el Consejo Interterritorial de Sanidad.
Las medidas, que han sido trasladas personalmente por el alcalde al presidente de Comercios Asociados de Novelda, Juan Ramón Doménech, en la reunión mantenida a afectan principalmente a los establecimientos de ocio nocturno, hostelería y restauración. En este caso se ha decretado la suspensión de la actividad en discotecas, salas de bailes, karaokes y bares de copas. Asimismo los establecimientos de hostelería y restauración, terrazas y bares deben asegurar una distancia mínima de 1,5 metros entre mesas que deberán tener una ocupación máxima de 10 personas. Igualmente se decreta el cierre de estos establecimientos a las una de la madrugada y se prohibe el consumo colectivo o en grupo de bebidas en la calle o en espacios públicos, así como fumar en la vía pública y espacios al aire libre cuando no se pueda respetar una distancia mínima interpersonal de dos metros.