Entrevista > Manuel Lázaro García Guillén / Cantante (Petrer, 17-diciembre-1962)
A pesar de que el gusanillo de la canción ya habitaba en su interior desde bien joven, no fue hasta los 35 años cuando decidió entregarse en cuerpo y alma a su gran pasión. Manuel Lázaro, cantante de Petrer habitual de nuestros escenarios (es fácil verlo en los conciertos de verano), de voz robusta y potente, es un especialista del ‘classical crossover’, género musical que fusiona elementos del estilo del canto lírico con la música popular que artistas como Andrea Bocelli han elevado a lo más alto.
Sus gustos musicales, ópera aparte, se mueven por distintos derroteros: zarzuela, rock, pop, soul, boleros, Elvis Presley, Georges Moustaki, Leonard Cohen, Joaquín Sabina, Bono de U2… grandes artistas en sus respectivos estilos que no destacan por poseer una voz académica, pero sí por “sentir la música dentro, en lo más hondo”. Y por supuesto, dentro del mundo de la lírica, admira a Luciano Pavarotti y Andrea Bocelli, dos sumos sacerdotes que están en su altar particular.
Hoy, la crisis sanitaria por el coronavirus ha afectado sobremanera sus citas musicales con el público, dejándole sin actuaciones para lo que resta de año. Aunque dice sentirse “pesimista” con la evolución de la pandemia, es de los que opinan que en la vida hay que “adaptarse y reinventarse” conforme vengan las circunstancias.
¿Cuáles fueron tus comienzos en el mundo de la música?
La música siempre me ha gustado; cantautores como Víctor Jara o Lluís Llach ya me atraían desde la adolescencia. A eso de los 35-40 años dejé el trabajo que tenía como informático y me decidí a dar un paso adelante trasladándome a Madrid, donde estudié canto lírico con profesores muy buenos como Miguel Zanetti, el pianista de Montserrat Caballé y José Carreras, María Candelaria y Francisco Ortiz, pero un problema en la espalda cortó mi formación y tuve que dejarlo. Cuando me recuperé retomé mi carrera musical, pero ya no fue lo mismo.
Tras varios trabajos, estando en Valencia volví a cantar en bares y cafés teatro con mi guitarra, recuperando poco a poco mi voz. Tuve otra operación fuerte y lo dejé otra vez, pero regresé a la música de nuevo, esta vez con más fuerza, comenzando a especializarme como ‘tenor classical crossover’, un cantante de fusión al estilo de lo que hacen Andrea Bocelli o Il Divo, música pop pero con técnica clásica.
Tuve éxito y conocí a Angie Lang, una cantante londinense que me animó a seguir y con la que monté el dúo ‘Perfect Symphony’; con ella empecé a descubrir que me gustaba cada vez más este tipo de música, que combinaba con baladas, boleros o música pop. Mi repertorio es muy variado.
El canto lírico exige una voz con unas cualidades muy especiales, ¿por qué te decantaste por este género musical?
Porque vi que tenía buenas posibilidades de cantar como tenor. La ópera es mi pasión y me enamoré de ella en parte gracias a la voz de Pavarotti. Sin embargo, para la música en general soy muy ecléctico, aunque hay un género, el reguetón, que no me gusta nada.
Con 17 años tenía en Petrer una banda de rock y hacíamos versiones de AC/DC, Rolling Stones, etc. El formato acústico y la canción de autor me gustan mucho, musiqué un poema del poeta Paco Mollá y me gustaría terminar un disco con canciones basadas en poesías suyas, en las que estoy trabajando ahora mismo.
Es de suponer que tus referentes serán cantantes relacionados con la ópera…
La belleza de la voz la encuentro en Pavarotti por sus agudos perfectos, y en Bocelli por el registro tan amplio y su interpretación. Mis primeros referentes fueron Lluís Llach, Leonard Cohen, Moustaki o Sabina, del que me encanta interpretar “Peces de ciudad” en acústico. No tiene que ser exactamente una persona con la voz formada, prefiero alguien que sienta la música por dentro.
«Petrer es un pueblo con artistas muy buenos»
¿Qué canción nunca falta en tu repertorio?
Depende del público, si es español o inglés. Los ingleses, que son un público muy exigente, aunque también agradecido, quieren oír el ‘Caruso’, de Lucio Dalla, que es mi canción favorita, o baladas como ‘Can’t Help Falling in Love’, de Presley.
«La canción que tú más disfrutas es con la que más haces disfrutar a la gente»
Para el público español llevo más boleros, rancheras y temas de Serrat, por ejemplo, y luego los temas de Bocelli gustan a todo el mundo. Cuando hacía acústicos cantaba el ‘Fields of Gold’, de Sting; ‘Le métèque’, de Moustaki o ‘Jo també he dormit a l’alba’, de Lluís Llach. Al final la canción que tú más disfrutas es con la que más haces disfrutar a la gente.
¿Una ópera favorita?
Sin duda ‘Tosca’, de Puccini, y en especial el aria ‘E lucevan le stelle’.
La crisis sanitaria por el coronavirus te habrá afectado, como al resto de artistas de este país…
Mucho, he tenido que suspender todos los conciertos que tenía programados para este año, que eran bastantes. Menos mal que el ayuntamiento de Petrer se ha portado muy bien con los artistas locales programando actuaciones este verano en ‘Cultura al carrer’, me dio mucha alegría que contaran conmigo, pero la situación en la que estamos me hace ser pesimista. Como sigamos así, cuando volvamos a la normalidad no va a haber artistas.
«Petrer es un pueblo con artistas muy buenos»
¿Un escenario en el que te gustaría actuar?
No soy ambicioso en cuanto a buscar grandes escenarios conocidos a nivel mundial. Me encantaría montar un gran escenario en el Castillo de Petrer con una buena iluminación, juntarnos allí los artistas de la localidad, que hay muchos y muy buenos, y hacer un bonito concierto.